Cuatro empresas se llevaron uno de cada diez euros adjudicados por la v¨ªa de emergencia en 2020
Este procedimiento, a dedo y con m¨ªnimos controles y transparencia, se us¨® en su mayor¨ªa para compra de suministros sanitarios como mascarillas, pero tambi¨¦n se colaron concesiones de tele p¨²blica, piscinas, pistolas t¨¢ser y hasta camellos para la cabalgata de Reyes
El 31 de marzo de 2020, en los primeros ca¨®ticos d¨ªas del estado de alarma, el Gobierno de Murcia adjudic¨® la gesti¨®n de su televisi¨®n p¨²blica a la empresa CBM, la misma que lo hac¨ªa hasta entonces. Lo hizo utilizando la tramitaci¨®n de emergencia, un sistema excepcional que permite dar contratos a dedo por la v¨ªa ultrarr¨¢pida, sin abrir expediente y con muy pocos controles previos y transparencia. Este sistema, el m¨¢s r¨¢pido y directo de la Ley de Contratos ¨Dpermite hasta poner en marcha algo solo con hablarlo¨D est¨¢ limitado a tres supuestos muy claros: acontecimientos catastr¨®ficos, situaciones que supongan grave peligro y necesidades que afecten a la defensa nacional.
La pandemia que estaba arrancando por entonces justificaba el procedimiento en algunos casos porque la crisis de la covid es considerada una cat¨¢strofe y supone graves peligros, por eso se permiti¨® el uso de este sistema para la compra de material sanitario. Por eso, para justificar qu¨¦ tiene que ver el coronavirus con la televisi¨®n p¨²blica de Murcia hay que ponerse algo m¨¢s imaginativos.
En su justificaci¨®n, el primer argumento del Ejecutivo murciano es que el estado de alarma fren¨® los tr¨¢mites administrativos y no pudieron conceder a tiempo el concurso abierto que hab¨ªan convocado para esa concesi¨®n. M¨¢s all¨¢ de que no llegar a tiempo no es causa suficiente para usar este sistema, lo cierto es que s¨ª lo tuvieron: el contrato vigente por entonces arranc¨® en 2015 y se hab¨ªa prorrogado tres veces. Finalizaba el 30 de abril. Y no fue hasta el 25 de febrero que pusieron en marcha el contrato, despu¨¦s de varios retrasos en los tr¨¢mites previos. Con esos plazos era casi imposible que llegaran a tiempo aunque no se hubiera declarado el estado de alarma.
Murcia tambi¨¦n aleg¨® que la televisi¨®n es esencial en casos de cat¨¢strofes. Y no aprobar ese contrato a dedo por tramitaci¨®n de emergencia supon¨ªa un ¡°significativo peligro para la salud y la vida de las personas¡±. Con estos mimbres, se aprob¨® la contrataci¨®n de emergencia por unos 744.000 euros al mes hasta que el concurso abierto eligiera a un ganador por la v¨ªa ordinaria. El plan era que fuera solo un parche durante dos meses, mayo y junio, pero se prorrog¨® dos veces, la ¨²ltima ya estimaba alargarlo en 2021.
El contrato de la tele p¨²blica de Murcia es uno solo uno de los muchos que se colaron entre los que se encargaron para comprar mascarillas, mamparas y test PCR. En total, las administraciones p¨²blicas adjudicaron y publicaron 16.589 contratos de emergencia durante 2020, que suman 6.445 millones de euros. Suponen un 15% de todos los que se firmaron ese a?o, un porcentaje in¨¦dito. Para comparar: la Administraci¨®n General del Estado firm¨® 658 contratos de emergencia, m¨¢s de 3.200 millones de euros durante 2020; frente a los 50 contratos de 2019 (27millones), o los 12 de 2018 (tres millones).
Y es normal. Era una situaci¨®n, de verdad, extraordinaria. Pero, ?qu¨¦ se compr¨®? ?A qui¨¦n? Y, lo m¨¢s importante, ?se cumplieron siempre las pocas reglas de la tramitaci¨®n de emergencia? ?Hay m¨¢s casos de contratos, como m¨ªnimo, sospechosos? Spoiler: la respuesta a las dos ¨²ltimas preguntas es no y s¨ª.
Un 10% para cuatro empresas
La crisis sanitaria hizo que muchas empresas tuvieran que reconvertirse y que otras vieran oportunidades en medio de la crisis. Es el caso de FCS Select Products, una empresa dedicada al sector de las bebidas energ¨¦ticas con sede en Barcelona y una filial en China que nunca hab¨ªa trabajado en el sector sanitario. Gracias a cuatro contratos con el Ministerio de Sanidad, todos firmados el 23 de marzo y que suman m¨¢s de 217 millones de euros, se convirti¨® en el principal importador, o intermediario, del Gobierno.
Es la empresa que m¨¢s dinero se llev¨®, en 2020, v¨ªa contratos de emergencia. Una de sus administradoras hab¨ªa sido condenada en 2015 por estafa, seg¨²n desvel¨® El Confidencial. Tras esos cuatro contratos (aqu¨ª, aqu¨ª, aqu¨ª y aqu¨ª), no volvi¨® a firmar con administraciones p¨²blicas espa?olas. Fue flor de un d¨ªa. Pero muy, muy lucrativa.
Le sigue en la lista la empresa china Hong Kong Travis Asia, con 187 millones, debidos sobre todo a una compra de 150 millones en mascarillas. De hecho, esta empresa se llev¨® uno de cada tres euros que fueron a parar a empresas extracomunitarias (574 millones, el 9% del total).
La tercera en la lista es Barna Import M¨¦dica. Al contrario que FCS, se trata de una empresa que ya se dedicaba antes de la crisis a la importaci¨®n y venta de productos sanitarios. Sumaron 121 millones pero repartidos en 225 adjudicaciones. Vendieron a administraciones de todos los niveles mascarillas, guantes y batas, entre otros elementos de protecci¨®n.
La cuarta es Abbott (111 millones en 103 adjudicaciones), la gran mayor¨ªa para la compra de test de ant¨ªgenos, puesto que comercializan uno de los m¨¢s efectivos dentro de este tipo de pruebas de diagn¨®stico.
En total, estas cuatro empresas suman unos 637 millones de euros, casi el 10% del total adjudicado y publicado en 2020. En este buscador se puede acceder al detalle de todos los contratos de emergencia.
?Qu¨¦ es emergencia y qu¨¦ no?
?Cu¨¢ndo se puede usar la tramitaci¨®n de emergencia? Seg¨²n la Ley de Contratos, ¡°cuando la Administraci¨®n tenga que actuar de manera inmediata a causa de acontecimientos catastr¨®ficos, de situaciones que supongan grave peligro o de necesidades que afecten a la defensa nacional¡±. En estos casos, se contrata a quien se considere y ya, sin abrir expediente, incluso solo habl¨¢ndolo, para poder ponerlo en marcha r¨¢pido.
Lo normal es encontrar en los contratos del pasado reparaciones imprevistas (si se rompe una ca?er¨ªa o se agrieta el asfalto de una carretera) o medidas ante temporales climatol¨®gicos y otras cat¨¢strofes. Pero, ya antes de la llegada de la pandemia, estas reglas no siempre se cumpl¨ªan. El 2 de enero de 2020 el ayuntamiento canario de Icod de los Vinos us¨® este sistema para alquilar tres camellos para la cabalgata de Reyes. No fue suficiente, seg¨²n su criterio, hacerlo como contrato menor. Necesitaban a¨²n m¨¢s flexibilidad, y lo adjudicaron adem¨¢s por emergencia. Ten¨ªan poco margen, es evidente, pero tambi¨¦n lo es que los Reyes vienen cada a?o y era, por tanto, previsible. Y, claro, que no hab¨ªa cat¨¢strofe ni grave peligro si lo hubieran hecho sin camellos. Algo similar ocurri¨® en C¨¢diz, pero en su caso lo que necesitaban con emergencia para el pasacalles de las fiestas navide?as eran Transformers y estrellas luminosas.
Si nos vamos a a?os anteriores encontramos la compra de comida para la estaci¨®n de esqu¨ª de Boi Ta¨¹ll o el curso de Big Data y Machine Learning que compr¨® la empresa p¨²blica de ingenieria Ineco a Telef¨®nica con una emergencia cuanto menos sorprendente.
El 13 de marzo, un d¨ªa antes de la declaraci¨®n del estado de alarma, lleg¨® al BOE el primer Decreto Ley de muchos con medidas por la pandemia. Entre otras cosas, declaraba que la Administraci¨®n General del Estado pod¨ªa usar la contrataci¨®n de emergencia ¡°para atender las necesidades derivadas de la protecci¨®n de las personas y otras medidas adoptadas por el Consejo de Ministros para hacer frente al COVID-19¡±. Dos semanas despu¨¦s, se ampli¨® esta potestad a todas las administraciones p¨²blicas y se dio luz verde a los pagos por adelantado, incluso antes de firmar nada ni de recibir ning¨²n material.
Con estas reglas sobre la mesa, ya en pleno caos pand¨¦mico, entre miles y miles de contratos de emergencia, se colaron algunas adjudicaciones de emergencia que, a primera vista, no parecen responder de forma estricta a la lucha contra el virus ni a ejecutar las decisiones del Consejo de Ministros en esta l¨ªnea. Uno de los ejemplos m¨¢s habituales son los contratos de campa?as de publicidad institucional. Es evidente que anuncios de mascarilla + distancia + lavado de manos s¨ª que cumplen esos requisitos, pero esa justificaci¨®n no es tan clara en campa?as de prevenci¨®n de incendios forestales (algo que ocurre cada a?o, por cierto), sobre planes de reactivaci¨®n econ¨®mica o, y estas son las m¨¢s habituales, las de promoci¨®n tur¨ªstica.
Usando la tramitaci¨®n de emergencia firmaron contratos para publicar anuncios que ayudaran a reactivar el turismo Catalu?a, que lo autoriz¨® v¨ªa decreto ley; el Consell Insular de Eivissa, que adem¨¢s no justifica el uso de este procedimiento en su publicaci¨®n, aunque es obligatorio; y hasta la propia Secretar¨ªa de Estado de Turismo, que le dedic¨® dos millones de euros.
El Ayuntamiento de Marbella gast¨® 36.000 euros en 15 pistolas t¨¢ser. Su justificaci¨®n del uso de la emergencia: ¡°No todos los ciudadanos aceptan de buen grado las indicaciones¡± para cumplir las normas de confinamiento aprobadas tras la declaraci¨®n del estado de alarma. Adem¨¢s, seg¨²n ellos, es un asunto de riesgos laborales. Y esta es su argumentaci¨®n, literal, un todo en uno: ¡°El agente corre riesgo de sufrir otro tipo de agresi¨®n que puede degenerar en lesi¨®n f¨ªsica que debilite sus defensas inmunol¨®gicas que puedan degenerar en el contagio del COVID19 o cualquier otra enfermedad infecto contagiosa¡±.
Cuando el Ayuntamiento de Meco (Madrid) us¨® esta v¨ªa r¨¢pida para contratar la gesti¨®n de la piscina municipal tir¨® de la excusa habitual de las prisas (es que con todo este jaleo no me ha dado tiempo), aunque se contrate para cada verano, y de una m¨¢s imaginativa: los vecinos est¨¢n pas¨¢ndolo mal y necesitan su piscina.
Mascarillas, test, acondicionamiento de espacios y servicios inform¨¢ticos
Pero la chicha de los 6.439 millones de euros en contratos de emergencia se destin¨® a medidas de protecci¨®n. La gran mayor¨ªa, 5.398 millones, fue a contratos de suministros, sobre todo mascarillas y otra vestimenta de protecci¨®n (casi tres mil millones), seguidas de test.
Entre las obras, de los 326 millones adjudicados, m¨¢s de 94, un 30%, fueron a a acondicionar, reparar y mantener espacios sanitarios. Mas all¨¢ del coronavirus encontramos las obras de emergencia habituales: arreglos de carreteras y v¨ªas de tren y reparaciones tras los destrozos causados por temporales, en este caso por Gloria, la borrasca que dej¨® trece fallecidos en enero de 2020.
En servicios, la mayor¨ªa se gast¨® en transporte, log¨ªstica y alquiler de veh¨ªculos, a veces para llevar a su destino los suministros anteriores; en pruebas de covid, rastreo de contactos, asistencia sanitaria y alojamiento de pacientes; y en limpieza y desinfecci¨®n, sobre todo en los primeros meses, cuando la idea m¨¢s difundida era que el virus esperaba agazapado en las paredes durante horas casi para saltarte encima cuando caminaras cerca. Tambi¨¦n destaca el gasto en servicios sociales e inform¨¢tica, en este ¨²ltimo caso para atender las nuevas necesidades del teletrabajo.
Por organismos, la Administraci¨®n General del Estado gast¨® m¨¢s de la mitad de esos 6.445 millones. Casi todo lo gestion¨® Sanidad. De hecho, el 98% del dinero en contratos de ese ministerio se adjudic¨® v¨ªa emergencia. Entre las comunidades, destacan Catalu?a (807 millones) y Madrid (689).
Por cuesti¨®n de competencias y de presupuesto, las entidades locales tuvieron mucho menos peso. Entre ellas destaca el Ayuntamiento de Madrid, con 45 millones gastados en emergencia. Ah¨ª se encuentra, entre mascarillas y test, el contrato para dise?ar un pebetero que contuviera la llama de homenaje a las v¨ªctimas de la enfermedad.
Todos los contratos de emergencia publicados, de todas las administraciones
Esta informaci¨®n fue publicada originalmente en Civio.es
Hemos analizado todos los contratos de emergencia adjudicados durante 2020 y publicados ese a?o en el Portal de Contratos del Sector P¨²blico y desde las plataformas vinculadas de las comunidades aut¨®nomas, excluyendo los menores. Puede que algunos contratos no est¨¦n en nuestra base de datos porque o no se hab¨ªan publicado a¨²n o no se hab¨ªan vinculado con el portal estatal o est¨¢n mal clasificados.
Hemos tenido que extraer, limpiar y estructurar y completar datos durante meses y hemos encontrado falta de informaci¨®n, errores, c¨®digos incoherentes, retrasos y diferencias en las formas de publicar de cada organismo. Pero era la ¨²nica v¨ªa para tener una visi¨®n lo m¨¢s completa posible: el Portal de Transparencia, por ejemplo, incluye solo contratos de la Administraci¨®n General del Estado -y no todos- y mezcla emergencia con urgencia
Aqu¨ª puede leer la metodolog¨ªa en detalle
Con informaci¨®n de Carmen Torrecillas, Miguel ?ngel Gavilanes, Antonio Hern¨¢ndez, Mar¨ªa ?lvarez del Vayo y ?ngela Bernardo a trav¨¦s de la Fundaci¨®n Civio
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Econom¨ªa
- Coronavirus
- Emergencias
- Emergencia sanitaria
- Empresas
- Ayuntamientos
- Crisis econ¨®mica
- Pandemia
- Coronavirus Covid-19
- Material sanitario
- Mascarillas
- Adjudicaci¨®n contratos
- Regi¨®n de Murcia
- Televisi¨®n auton¨®mica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Abbott
- Cat¨¢strofes
- Estado de alarma
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Contratos administrativos