Portugal y Espa?a, un mercado el¨¦ctrico com¨²n con una factura desigual
La presencia masiva de los consumidores lusos en el mercado libre y una formaci¨®n de tarifas reguladas diferente evitan subidas en el recibo dom¨¦stico de la luz
Portugal y Espa?a comparten el Mercado Ib¨¦rico de Electricidad (Mibel), pero sus consumidores no sufren los mismos sustos. Hay varios elementos que explican por qu¨¦ los lusos no tienen la preocupaci¨®n de sus vecinos ante el alza continuada de precios energ¨¦ticos de este verano. Una de las razones radica en el tipo de tarifa predominante entre los consumidores dom¨¦sticos: el 85,3% de los clientes portugueses paga precios fijos pactados con las comercializadoras en el mercado liberalizado, lo que les ahorra sobresaltos inmediatos en la factura mensual. Unos 5,4 millones de consumidores est¨¢n en el mercado libre, frente a los 933.000 que contin¨²an en el mercado regulado, seg¨²n datos reflejados en el bolet¨ªn de junio de la Entidade Reguladora dos Servi?os Energ¨¦ticos (ERSE), la entidad independiente que regula los sectores del gas natural, la electricidad y los combustibles. En Espa?a, por el contrario, todav¨ªa hay 10,7 millones de clientes que est¨¢n en el mercado regulado, el m¨¢s sensible a las oscilaciones diarias que se deben a los costes de producci¨®n energ¨¦tica.
Adem¨¢s, los clientes portugueses con tarifa regulada est¨¢n protegidos frente a los vaivenes del mercado mayorista gracias al sistema que se utiliza para la formaci¨®n de la tarifa, que nada tiene que ver con el espa?ol. En el caso luso, las tarifas reguladas se fijan anualmente por la ERSE, que puede revisarlas cada trimestre, mientras que las tarifas espa?olas del mercado regulado (PVPC) est¨¢n ligadas directamente al comportamiento horario del mercado mayorista. Precisamente, la subida constante de la cotizaci¨®n del gas natural y de los derechos de emisi¨®n de di¨®xido de carbono, las dos evoluciones que han disparado principalmente el coste de la producci¨®n el¨¦ctrica, motivaron que el regulador portugu¨¦s hiciese el pasado junio una revisi¨®n extraordinaria al alza de su previsi¨®n del precio medio de adquisici¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica para la tarifa de ¨²ltimo recurso prevista para 2021, que estaba en 49,52 euros por megavatio hora. La ERSE increment¨® su c¨¢lculo hasta los 54,52 euros por megavatio hora ante ¡°el constante aumento de precios de la energ¨ªa ocurrido en el mercado ib¨¦rico de electricidad¡±, seg¨²n la directiva del organismo.
La labor de este organismo suscita las cr¨ªticas del sector privado. Las compa?¨ªas que operan en el mercado liberalizado consideran que sufren la competencia desleal por las tarifas fijadas por la ERSE. La Associa??o de Comercializadores de Energia no Mercado Liberalizado (Acemel), que re¨²ne a una veintena de empresas que comercializan electricidad y gas natural, ha recurrido a la Autoridade da Concorr¨ºncia para quejarse de que los precios regulados no pueden ser m¨¢s competitivos que los costes del mercado libre, seg¨²n public¨® el semanario Expresso.
¡°Almohadas¡± para controlar los precios
Dado que la escalada de precios se ha disparado en agosto, es previsible que las tarifas que la ERSE anuncie en octubre para 2022 contemplen nuevas subidas, si bien el ministro de Ambiente y Acci¨®n Clim¨¢tica, Jo?o Pedro Matos Fernandes, asegur¨® esta semana que el Gobierno dispone de ¡°muchas almohadas¡± para ¡°inhibir el aumento de precios¡± en las facturas de la luz. Aunque no hizo promesas concretas, el ministro se?al¨® que el Gobierno est¨¢ empe?ado en evitar incrementos en 2022.
Algunas ¡°almohadas¡± ya se aplican desde diciembre de 2020, cuando se aprob¨® un descenso del IVA del 23% al 13% sobre los primeros 100 kilovatios hora consumidos en un mes en aquellos hogares con menos potencia contratada. En la pr¨¢ctica, benefici¨® a 5,2 millones de contratos (alrededor del 86% de los clientes de baja tensi¨®n). En marzo se ampliaron las ventajas para las familias numerosas. El Ministerio de Ambiente y Acci¨®n Clim¨¢tica destaca en un correo electr¨®nico que ¡°esta medida fiscal es permanente, al contrario que las medidas adoptadas en Espa?a, que son de naturaleza temporal y solo hasta el final de este a?o¡±.
La propia composici¨®n de la tarifa dom¨¦stica, en la que impactan m¨¢s aspectos como los costes de intereses econ¨®micos generales o del uso de redes que el precio de la propia energ¨ªa, ayuda a minimizar el impacto alcista en el recibo de la luz. Mientras que el coste de la energ¨ªa representa el 62% de la tarifa el¨¦ctrica para el sector industrial, solo supone el 37% en los recibos dom¨¦sticos, seg¨²n datos del Ministerio de Ambiente y Acci¨®n Clim¨¢tica.
Portugal es el octavo pa¨ªs de la Uni¨®n Europea con el precio m¨¢s caro de la electricidad para el consumo dom¨¦stico, mientras que Espa?a ocupa el quinto lugar, seg¨²n datos de Eurostat relativos al segundo semestre de 2020.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.