Lo que no se derogar¨¢ de momento: otros ¡°aspectos lesivos¡± de la reforma laboral de 2012, fuera de la negociaci¨®n

El men¨² que se cocina en la negociaci¨®n del nuevo marco de relaciones laborales aborda la retirada de algunos de los ingredientes m¨¢s controvertidos de la reforma laboral que llev¨® a cabo el PP en 2012, pero deja fuera muchos otros. Entre ellos, uno de los que m¨¢s revuelo gener¨® hace casi 10 a?os: la reducci¨®n en la cuant¨ªa de las indemnizaciones por despido improcedente de 45 a 33 d¨ªas, con un tope de 24 mensualidades. Fuentes del di¨¢logo social se?alan que la reparaci¨®n de alteraciones como esta se abordar¨¢ ¡°m¨¢s adelante¡±, y no en este primer paquete.

?El motivo? Que el compromiso adquirido con la Uni¨®n Europea, y que se recoge en el componente 23 del Plan de Recuperaci¨®n, Transformaci¨®n y Resiliencia, debe estar listo antes del 31 de diciembre. En este se hace referencia a la simplificaci¨®n en la contrataci¨®n y la reducci¨®n de la temporalidad, al nuevo mecanismo de sostenibilidad del empleo (los ERTE estructurales), a la modernizaci¨®n de la negociaci¨®n colectiva y a la subcontrataci¨®n, as¨ª como a la mejora en la eficiencia de las pol¨ªticas p¨²blicas de empleo¡ª .

¡°Esas cuestiones est¨¢n ah¨ª, no encima de la mesa, pero si se abren se abordar¨¢n en otro proceso distinto del actual¡±, apunta Mari Cruz Vicente, secretaria confederal de Acci¨®n Sindical de CC OO. ¡°Se van a derogar, porque as¨ª lo recogen tanto el acuerdo de gobierno entre PSOE y Unidas Podemos como sus respectivos programas electorales¡±, se suma Fernando Luj¨¢n, secretario confederal de UGT.

Los tres platos principales de la carta negociadora actual se refieren a la recuperaci¨®n de la ultraactividad ¡ªel tiempo que va desde que un convenio expira hasta el momento en el que se acuerda uno nuevo¡ª; a la vuelta a la prevalencia del convenio sectorial por encima del de empresa, y a la reducci¨®n de la temporalidad por medio de la eliminaci¨®n del contrato por obra o servicio, junto con la limitaci¨®n de las situaciones en las que un contrato temporal pudiera implementarse.

En el pacto entre PSOE y Unidas Podemos se recogen tres puntos a resolver con ¡°car¨¢cter urgente¡±: la derogaci¨®n del despido por absentismo causado por bajas por enfermedad ¡ªel ¨²nico apartado que ya se ha retirado¡ª; la del marco de un a?o al que limit¨® el PP la ultraactividad, y la de la prioridad aplicativa de los convenios de empresa.

Trabajo previo

La mengua en la cuant¨ªa de las indemnizaciones que implement¨® el PP tambi¨¦n se traslad¨® a aquellas situaciones en las que las empresas se amparaban en causas econ¨®micas para llevarlas a cabo. Para estos casos se rebaj¨® la cuant¨ªa a 20 d¨ªas por a?o trabajado, y se elimin¨® la necesaria autorizaci¨®n administrativa para la presentaci¨®n de los ERE. Para que todo el paquete indemnizatorio rebajara considerablemente su volumen tambi¨¦n se prescindi¨® de los salarios de tramitaci¨®n, aquellos jornales que la empresa estaba obligada a abonar al trabajador que hubiera denunciado su despido si un juez decretaba su readmisi¨®n, y que se hubieran acumulado durante todo el litigio.

Vicente recuerda que los temas que se est¨¢n negociando ahora son, adem¨¢s, aquellos sobre los que exist¨ªa un trabajo previo y un consenso mayor, pues las primeras negociaciones al respecto se retrotraen a 2019, cuando se debatieron con la entonces ministra de Trabajo socialista, Magdalena Valerio. ¡°Son asuntos prioritarios y que por nuestra parte ya est¨¢n cerrados. Eso no quiere decir que lo que est¨¢ ahora mismo sobre la mesa sea lo que vaya a quedarse tal cual¡±, apunta Vicente. ¡°Nosotros no hemos renunciado a nada en la negociaci¨®n. Nuestra m¨¢xima es derogar la reforma del 2012. Un marco que incurre en graves incumplimientos de diversos aspectos que reconoce la Carta Social Europea¡±, a?ade Luj¨¢n.

A pesar de que existe una cuenta atr¨¢s preestablecida para resolver las materias acordadas con Europa, los sindicatos convienen en puntualizar que no se ha definido, por el momento, ning¨²n calendario para enfrentar estos otros aspectos del texto. ¡°Si la voluntad del Gobierno es negociar un Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI, eso no se hace de la noche a la ma?ana¡±, subraya Vicente.