La semana en la que S¨¢nchez Gal¨¢n hizo saltar chispas
La invectiva del presidente de Iberdrola contra los clientes con tarifa PVPC levanta ampollas en v¨ªsperas de la junta de accionistas
Para sacar adelante un partido de tenis hace falta algo m¨¢s que dominar con soltura los registros de la disciplina. El saque, el resto, el rev¨¦s y los remates en la red son fundamentales para ganar puntos, s¨ª, pero ante todo hay que evitar los errores no forzados. En eso, la raqueta y la empresa no se distinguen tanto: ante todo, los directivos ¡ªcomo los jugadores¡ª tienen que evitar esa clase de fallos. Esos, y no los errores de gesti¨®n, son los que suelen bajar de los altares a quienes nunca pensaron que caer¨ªan.
Mayo va camino de ser el peor mes para Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n (Salamanca, 71 a?os) desde que asumi¨® la presidencia de Iberdrola, en 2006. Una racha solo equiparable con la de finales de junio del a?o pasado, cuando el juez Manuel Garc¨ªa Castell¨®n le imput¨® ¡ªjunto con tres de sus m¨¢s estrechos colaboradores¡ª por los encargos de espionaje al excomisario Jos¨¦ Manuel Villarejo. Doce palabras arrastraron el pasado jueves d¨ªa 5 a su propio laberinto al ejecutivo mejor pagado del Ibex (13,2 millones en 2021): ¡°Solamente los tontos que siguen con la tarifa regulada pagan ese precio¡±, dec¨ªa, en un acto p¨²blico y entre las risas de sus compa?eros de estrado, en referencia a la brutal escalada de la luz en los ¨²ltimos meses. Ni 24 horas, y ya en el ojo del hurac¨¢n, llegaba un segundo golpe: la justicia rechazaba su recurso de apelaci¨®n y le manten¨ªa como imputado en el caso Villarejo por dos supuestos delitos de cohecho, falsedad en documento mercantil y otro contra la intimidad.
Su cr¨ªtica a las tarifas PVPC, de largo las menos rentables para las el¨¦ctricas, est¨¢ lejos de ser una novedad. Pero nunca nadie del sector hab¨ªa llegado tan lejos. Tampoco pensaban que ¨¦l lo har¨ªa. Menos a¨²n, con una invectiva directa al ment¨®n a un buen n¨²mero de sus propios clientes ¡ªun buen n¨²mero de ellos, acogidos al bono social¡ª que ha soliviantado a propios y extra?os. Y que ha enfriado a¨²n m¨¢s su relaci¨®n con el Ejecutivo, que ya ven¨ªa tocada desde el verano pasado, en especial tras la pol¨¦mica del vaciado de pantanos y los movimientos del Gabinete para rebajar los beneficios de las energ¨¦ticas y abaratar la luz.
¡°Sus declaraciones nos causaron bochorno a muchos¡±, se despachaba esta semana la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transici¨®n Ecol¨®gica, Teresa Ribera, en EL PA?S. Una opini¨®n que tambi¨¦n comparten en privado varios de sus competidores, que creen que sus palabras echan m¨¢s le?a al fuego y agravan la crisis reputacional de las empresas del sector. De poco sirvieron las disculpas posteriores, en condicional ¡ª¡±en el caso de que alguien se hubiera sentido ofendido¡±¡ª, en forma de escueto mensaje en la red social Twitter y en nombre de su presidente, aunque desde una cuenta corporativa.
Con un patrimonio actual que se calcula superior a los 100 millones de euros, su carrera como ejecutivo empez¨® en Tudor en la d¨¦cada de los setenta. All¨ª aprendi¨® ingl¨¦s, un idioma que muy pocos dirigentes de su generaci¨®n dominan con soltura y al que ¨¦l ha sabido sacar especial partido: bajo su batuta, el exponencial crecimiento de Iberdrola ha sido, sobre todo, por el mundo anglosaj¨®n. Despu¨¦s de Tudor pasar¨ªa por la aeron¨¢utica ITP y la teleco Airtel, antes de aterrizar en la el¨¦ctrica bilba¨ªna. Corr¨ªa el a?o 2001, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar acababa de ganar sus segundas elecciones por mayor¨ªa absoluta y el mercado el¨¦ctrico era otro: la liberalizaci¨®n acababa de salir del horno e Iberdrola ¡ªnacida de la fusi¨®n de Iberduero e Hidroel¨¦ctrica Espa?ola¡ª no ten¨ªa ni una d¨¦cada de vida. Nada que ver con lo que es hoy: un gigante multinacional volcado en las renovables, en cuya construcci¨®n tuvo mucho que ver el empresario.
Ya en el grupo energ¨¦tico, su ascenso fue r¨¢pido: en 2006 dio el salto de vicepresidente y consejero delegado a presidente, en sustituci¨®n de ??igo de Oriol ¡ªque hab¨ªa intentado, sin ¨¦xito, la fusi¨®n con Endesa¡ª. Desde ese cargo ha pilotado la muy exitosa expansi¨®n internacional del grupo ¡ªEstados Unidos, Reino Unido, Brasil, M¨¦xico...¡ª, lo que le ha granjeado el favor de los accionistas y un poder omn¨ªmodo en la que es, desde julio de 2020, la mayor cotizada de Espa?a. Hoy, en plena vor¨¢gine, Gal¨¢n est¨¢ a punto de relevar a la m¨¢xima responsable del negocio en Espa?a, ?ngeles Santamar¨ªa. Salvo giro inesperado de guion, el chileno Mario Ruiz-Tagle, hasta la semana pasada jefe de la filial brasile?a, tomar¨¢ el relevo. Un nombre que conviene no perder de vista de cara al futuro: el salmantino tiene 71 a?os.
¡°Gal¨¢n tiene olfato empresarial y ha sabido ver por d¨®nde soplaba el viento en la industria. Pero su estilo es muy personalista¡±, apunta un antiguo colaborador. ¡°Tiene claro lo que quiere y es claro en sus ¨®rdenes¡±, se?ala otra persona que trabaj¨® con ¨¦l. Y a?ade: ¡°No le van las grandes ideas filos¨®ficas ni las grandes frases: es un hombre de acci¨®n, muy operativo y muy pegado al terreno, que no descansa hasta conseguir sus objetivos¡±. Buena prueba de ese estilo, dice, es el v¨ªdeo que se viraliz¨® tras una reuni¨®n con inversores internacionales hace tres a?os. En ¨¦l, y tras pedir que bajaran la luz del auditorio, Gal¨¢n recriminaba a los operarios: ¡°No piensen, por favor, no piensen: ejecuten. Ya piensan otros, no se preocupen¡±.
A poco m¨¢s de un mes de la junta de accionistas, que afronta con inquietud porque es la primera que tendr¨¢ tras su imputaci¨®n, la incertidumbre es palpable. Su consejo de administraci¨®n le ha mostrado una confianza inquebrantable y, hasta ahora, los grandes accionistas ¡ªcon los fondos soberanos catar¨ª (8,7%) y noruego (3,4%), y el gigante estadounidense BlackRock (5,1%) a la cabeza¡ª han primado la rentabilidad y la buena marcha de la empresa en lo financiero sobre la reciente sacudida reputacional.
¡°Este a?o, sin embargo, las cosas han cambiado: algunos inversores se han dado cuenta de que el tema reputacional ya est¨¢ afectando a los negocios¡±, apunta Juan Prieto, fundador y CEO de Corporance, la primera firma espa?ola de asesor¨ªa de voto para inversores institucionales, que susurra al o¨ªdo de un grupo de accionistas europeos (aseguradoras y gestoras francesas y alemanas, fondos de pensiones suizos y, ahora, espa?oles tambi¨¦n) que suman, seg¨²n sus estimaciones, entre un 10% y un 20% del capital de las principales cotizadas espa?olas, incluyendo la el¨¦ctrica.
Prieto se refiere, sobre todo, a la compra de la energ¨¦tica estadounidense PNM Resources, paralizada por el regulador de Nuevo M¨¦xico aludiendo directamente al caso Villarejo. ¡°Va a haber guerra en esta junta: pensamos que el consejo va a encontrar una oposici¨®n m¨¢s fuerte que otros a?os¡±, desliza por tel¨¦fono. Consciente de que ser¨¢ una prueba de fuego, Iberdrola acaba de anunciar un dividendo extra a sus accionistas si la junta alcanza un qu¨®rum de al menos el 70% y un sorteo de diez bicicletas el¨¦ctricas entre quienes voten. El objetivo: incentivar la participaci¨®n de los minoristas, habitualmente menos activos y tambi¨¦n menos contestatarios con la direcci¨®n de las cotizadas. En cinco semanas, los due?os de Iberdrola tendr¨¢n la palabra.
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