Las vacaciones m¨¢s caras: menos d¨ªas fuera de casa, destinos nacionales y m¨¢s cenas en el apartamento
Los espa?oles reducen de cinco a entre tres y cuatro d¨ªas las estancias en hoteles, que suben los precios m¨¢s de un 20% respecto a 2019 por el tir¨®n de la demanda y el alza de los costes
La industria tur¨ªstica ya estaba llamada en primavera a volver a ser uno de los grandes motores de la econom¨ªa espa?ola. Tras dos a?os de hundimiento, los buenos datos de la Semana Santa hac¨ªan prever para el verano lo que la Organizaci¨®n Mundial del Turismo (OMT) defini¨® como efecto champ¨¢n: el regreso de las familias hacia sus destinos favoritos tras haberse contenido las ganas de viajar durante la pandemia. El ahorro y el fin de las restricciones facilitaron el ...
La industria tur¨ªstica ya estaba llamada en primavera a volver a ser uno de los grandes motores de la econom¨ªa espa?ola. Tras dos a?os de hundimiento, los buenos datos de la Semana Santa hac¨ªan prever para el verano lo que la Organizaci¨®n Mundial del Turismo (OMT) defini¨® como efecto champ¨¢n: el regreso de las familias hacia sus destinos favoritos tras haberse contenido las ganas de viajar durante la pandemia. El ahorro y el fin de las restricciones facilitaron el descorche. Cundi¨® el optimismo. ¡°Con la enorme demanda, la sensaci¨®n era que este iba a ser un verano espectacular¡±, relata Ricardo Fern¨¢ndez, director general de la agencia de viajes Destinia. Muchos lugares, desde A Coru?a a Formentera, han colgado este puente el cartel de completo. Sin embargo, la actividad no ha escapado de la inflaci¨®n galopante que atraviesa medio mundo: para los empresarios, la consecuencia directa ha sido la p¨¦rdida de rentabilidad. Para el consumidor, que las vacaciones de verano est¨¦n m¨¢s caras que nunca. El dinero se derrite como el hielo.
Juan Ignacio Pulido, profesor de Econom¨ªa Aplicada al Turismo en la Universidad de Ja¨¦n, explica por qu¨¦, a pesar de las circunstancias, la clase media espa?ola apenas ha renunciado a sus vacaciones. ¡°Es un gasto incorporado ya a la cesta de la compra¡±, afirma. Es decir, buena parte de la poblaci¨®n ya incluye los viajes en el presupuesto familiar. Seg¨²n el experto, es una prioridad solo superada por alimentaci¨®n, salud, educaci¨®n y vivienda. Es lo que ha permitido al sector, seg¨²n la Encuesta de Poblaci¨®n Activa del Instituto Nacional de Estad¨ªstica, volver a los 2,7 millones de trabajadores que ten¨ªa en 2019, un a?o r¨¦cord para el turismo en Espa?a. Entonces llegaron al pa¨ªs 83,7 millones de personas y el volumen de facturaci¨®n super¨® los 154.000 millones de euros ¡ªel 12% del PIB nacional¡ª, seg¨²n los datos de Exceltur.
Esa es la referencia que se usa como base para medir c¨®mo va 2022. El volumen de junio se aproxima pero sigue siendo algo inferior: un 15% por debajo de las cifras precovid. Pero el gasto es casi el mismo que hace tres a?os por el efecto de la inflaci¨®n. Es precisamente el aspecto que m¨¢s influye en estas vacaciones veraniegas ¡ªseg¨²n Hosteltur, para la mitad de los espa?oles es el factor esencial¡ª que se deja notar en estancias y destino. Cancelaciones, apenas hay. ¡°Este a?o viajamos menos d¨ªas y lo hacemos m¨¢s cerca, pero nos vamos¡±, subraya Pulido mientras pasa sus vacaciones en Roquetas de Mar (Almer¨ªa).
El sector lo confirma. En Destinia subrayan que en 2019 eran cinco las noches que, de media, se pasaban fuera de casa en verano. Ahora son entre tres y cuatro. Lo achacan a que el precio medio de una habitaci¨®n por persona y noche ha pasado de 48 euros en 2019 a 58 en 2022, un 21% m¨¢s, con subidas de hasta el 60% en ciudades como Sant Antoni de Portmany (Ibiza). El incremento afecta principalmente a quienes mantienen la tendencia pand¨¦mica de reservar a ¨²ltima hora: el 45% de los espa?oles. Quienes lo hicieron con antelaci¨®n ¡ªunos 45 d¨ªas de media¡ª consiguieron precios que hoy se antojan baratos.
Esa previsi¨®n o no a la hora de organizar las vacaciones ha marcado a las familias. Quienes han querido irse a ¨²ltima hora se han encontrado precios disparados. Es el caso de Vanesa S¨¢nchez, de 42 a?os, que pidi¨® presupuesto a principios de julio para pasar una semana en Tenerife, destino cuyos precios hoteleros han subido un 50% respecto a 2019. Quer¨ªa viajar ese mismo mes junto a su marido y sus tres hijos desde M¨¢laga. Y la respuesta le sorprendi¨®: 5.290 euros por el alojamiento en media pensi¨®n, traslados y vuelos incluidos. ¡°Me qued¨¦ muerta¡±, subraya. Comprob¨® entonces el hotel Riu Chiclana (C¨¢diz), donde en 2017 pasaron una semana en pensi¨®n completa por 1.400 euros, pero este le ped¨ªan 1.760. ¡°Muy solicitado¡±, indica la web del establecimiento, con 20 reservas en las ¨²ltimas 24 horas. La familia ha acabado tambi¨¦n en Roquetas de Mar en septiembre y en un apartahotel por cerca de 500 euros el fin de semana.
En la situaci¨®n contraria est¨¢ Miguel Guti¨¦rrez, de 40 a?os. ¡°Siempre reservo de un a?o para el otro¡±, cuenta desde Suecia, un viaje que organiz¨® en 2021 con precios de entonces. A finales de verano har¨¢ una escapada a la Costa Brava en coche desde la Costa del Sol. Para compensar el mayor coste de la gasolina compartir¨¢ veh¨ªculo. ¡°Apenas he tenido variaci¨®n de precios respecto a otros a?os¡±, destaca.
Miedo al oto?o
Como el combustible, el torbellino econ¨®mico afecta a cada minuto de las vacaciones, ya sea el alquiler de un coche ¡ªcasi imposible y car¨ªsimo a ¨²ltima hora¡ª o el precio del billete de avi¨®n. Tambi¨¦n el men¨² del chiringuito. Es justo el gasto en destino m¨¢s perjudicado. ¡°Nos est¨¢n asustando con el mensaje de que se nos viene en oto?o complicado, por ejemplo con las hipotecas, y las familias prefieren controlar los extras¡±, se?ala Bruno Hall¨¦, socio de Cushman & Wakefield Hospitality, consultora especializada en el sector inmobiliario tur¨ªstico. Evitar imprevistos y precios desbocados es lo que ha impulsado la contrataci¨®n de paquetes con todo incluido y la elecci¨®n de apartamentos vacacionales. Mejor cenar en casa que fuera.
La mayor¨ªa de espa?oles ¡ªun 90% seg¨²n Destinia¡ª ha elegido destinos nacionales para el verano. Estos ofrecen m¨¢s margen para reservas de ¨²ltima hora, son m¨¢s accesibles porque basta subirse al coche y, adem¨¢s, se evitan incertidumbres en el aeropuerto ante huelgas como la de Ryanair. Lo cl¨¢sico triunfa. Salou, Pe?¨ªscola, Roquetas, Cambrils o Benidorm concentran las reservas. ¡°Tenemos cifras ya muy similares a 2019¡å, se?ala Nuria Montes, secretaria general de la asociaci¨®n empresarial hotelera y tur¨ªstica de la Comunidad Valenciana, quien destaca que en ciudades como Benidorm, con 42.000 camas hoteleras, hay fines de semana donde muchos hoteles cuelgan el cartel de completo.
Las Islas Baleares son fieles a sus buenas cifras con el turista internacional: solo en junio recibieron a uno de cada cuatro que viaj¨® a Espa?a. ¡°Tal y como va el verano, las noticias son positivas¡±, afirma Jorge Marichal, presidente de la Confederaci¨®n Espa?ola de Hoteles (CEHAT).
Mayores costes para los hoteles
Otro de los destinos favoritos es Torremolinos. Pionero del turismo en la Costa del Sol, vivi¨® su etapa m¨¢s oscura en el verano de 2020. ¡°Pens¨¦ que nos ¨ªbamos a pique¡±, recuerda Miguel S¨¢nchez, director general de MS Hoteles, grupo que tiene 1.700 habitaciones y 400 empleados en seis establecimientos. Su buque insignia es el hotel Amaragua, donde las s¨¢banas cubr¨ªan el mobiliario y el silencio reinaba en todo el edificio hace dos veranos. Hoy la piscina est¨¢ repleta, como sus habitaciones. En julio roz¨® el 88% de ocupaci¨®n y en agosto espera superar esa cifra con el apoyo del turismo brit¨¢nico y alem¨¢n. Los n¨²meros son mejores que en 2019, pero los beneficios se han recortado por los costes de explotaci¨®n, que el sector calcula un 30% m¨¢s altos que antes de la pandemia. El mayor precio de las materias primas y la factura energ¨¦tica son claves. ¡°Hemos subido los precios porque hay m¨¢s gastos, pero no se ha trasladado al cliente todo el aumento y este solo afecta a las b¨²squedas online, porque los contratos con los turoperadores se firmaron en 2021 con cifras inamovibles¡±, explica S¨¢nchez.
M¨¢s all¨¢ del verano, el sector tur¨ªstico apenas se atreve a opinar sobre c¨®mo ser¨¢ el oto?o. No hay certezas, salvo que la pandemia ha quedado atr¨¢s ¡°y ahora los factores que influyen en la marcha del sector son otros como la inflaci¨®n o la geopol¨ªtica¡±, como explica C¨¦sar Escribano en el bar¨®metro hotelero publicado estos d¨ªas por STR y Cushman & Wakefield. Cualquier previsi¨®n se acompa?a de m¨²ltiples asteriscos en un contexto que puede cambiar casi de la noche a la ma?ana.
Nadie sabe tampoco c¨®mo se solucionar¨¢ la fricci¨®n entre los precios crecientes y la alta demanda. Lo que s¨ª parece claro es que esta seguir¨¢ creciendo, puesto que mercados como el asi¨¢tico empiezan a abrirse a viajar y, seg¨²n la OMT, en mayo ¡ª¨²ltimo dato disponible¡ª el flujo tur¨ªstico mundial todav¨ªa estaba un 54% por debajo que en 2019. Hay margen para crecer con el viajero internacional.
Por eso, el profesor Juan Ignacio Pulido advierte de que es el momento de repensar el modelo tur¨ªstico y plantear un modelo cuyo ¨¦xito no solo radique en aumentar el volumen de viajeros. ¡°Siempre pongo el mismo ejemplo a mis alumnos: prefiero un turista que gaste 1.000 euros a 1.000 que gasten uno. El consumo es el mismo, pero no es lo mismo la gesti¨®n ni el impacto sobre el territorio¡±, subraya Pulido, que subraya que a largo plazo lo ser¨¢ la crisis clim¨¢tica la que afectar¨¢ la posibilidad de viajar o la preferencia por los destinos. Al corto, los precios marcar¨¢n el paso.