Claver Carone denuncia represalias contra los que colaboraron con ¨¦l en el BID

Las aguas siguen revueltas en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Tras el cese de Mauricio Claver Carone como presidente, un foro con empleados celebrado la semana pasada por el organismo reflej¨® las inquietudes de los empleados sobre la situaci¨®n del banco. Muchas preguntas quedaron sin resolver, incluida la que por m¨¢s veces se repiti¨®, seg¨²n el listado al que ha tenido acceso este diario: ?qu¨¦ va a pasar con la jefa de gabinete y estrategia de Claver Carone? Mientras, el anterior presidente denuncia en una conversaci¨®n con EL PA?S que se est¨¢n tomando represalias contra quienes colaboraron con ¨¦l en el banco y defiende su gesti¨®n.

Las preguntas de los empleados recogen el descontento de parte de la plantilla del banco con la gesti¨®n de Recursos Humanos, la falta de suficientes controles y transparencia y la carencia de una pol¨ªtica de nombramientos en relaci¨®n con el m¨¦rito. La gran mayor¨ªa de las preguntas eran an¨®nimas, pero recib¨ªan votos de los participantes y m¨¢s de 200 pidieron explicaciones sobre la continuidad de la jefa de gabinete de Claver Carone, Jessica Bedoya. Muchas reflejan el estado de opini¨®n que describ¨ªan recientemente actuales y antiguos empleados de la entidad, de miedo a las represalias.

Claver Carone, sin embargo, defiende su gesti¨®n. ¡°El banco ha tenido siempre una historia de funcionamiento en silos, de pocos resultados y un historial de corrupci¨®n y yo quer¨ªa acabar con eso. Cuando llegu¨¦ al banco dej¨¦ claro desde el principio que mantener el status quo no era una opci¨®n¡±, explica a EL PA?S. ¡°Yo tengo una manera directa de hacer las cosas, y un estilo directo a veces puede interpretarse como agresivo porque yo no me callaba. Durante muchos a?os el banco hab¨ªa sido la peor instituci¨®n financiera del mundo, incluso estuvo expuesta a las subprime. Mi objetivo era fomentar la innovaci¨®n y los resultados, y esa cultura de resultados y de satisfacci¨®n al cliente choca con personas que han estado ah¨ª 20 o 30 a?os¡±.

¡°Yo no tengo la hipocres¨ªa que dominaba el banco, es una cultura diferente, puede que haya habido con eso algunos malentendidos culturales porque yo he sido directo y honesto y ahora veo que personas que han estado vinculadas a casos de corrupci¨®n se permiten criticarme¡±, contin¨²a.

Se defiende tambi¨¦n de las cr¨ªticas por haber prescindido de personas con mucha experiencia en el banco y haber promovido a otras que, seg¨²n exempleados del banco, eran m¨¢s f¨¢ciles de controlar y manipular: ¡°Cambiamos a personas porque los ministros de los pa¨ªses para los que trabajaban lo pidieron. Los clientes no estaban satisfechos y yo traje al banco la idea de la satisfacci¨®n al cliente. Adem¨¢s, esos cambios han permitido ascender a mujeres talentosas que ten¨ªan un techo de cristal. Las personas que salieron lo hicieron con paquetes sumamente generosos para el resto de su vida. No son v¨ªctimas. En ninguna empresa ni Gobierno se les hubiese dado lo que recibieron. Yo no he tomado represalias, he cambiado a gente para tener mejores resultados. Pero ahora est¨¢ habiendo represalias contra los que trabajaron conmigo en el banco¡±.

Algunos directores y gobernadores del banco tambi¨¦n se?alan que la situaci¨®n en los ¨®rganos de la entidad era insostenible. ¡°En el directorio hab¨ªa un ambiente tenso porque yo no me callaba y desafiaba el poder hist¨®rico del banco y cuotas de capital que no reflejan ya el verdadero peso econ¨®mico de los pa¨ªses, yo quer¨ªa reformar el banco y la gobernanza, pero ahora nunca m¨¢s se va a poder modernizar¡±, responde.

Claver Carone se queja tambi¨¦n de lo que considera que ha sido un proceso sin reglas. ¡°Me han querido vilipendiar y difamar y al final me han sacado del banco sin causa. Yo no tuve una relaci¨®n, nadie puede decir que he incumplido las reglas del banco y la resoluci¨®n de mi cese no lo dice¡±. EL PA?S ha tenido acceso a esa resoluci¨®n en la que efectivamente no se cita una causa. En la propuesta de resoluci¨®n se menciona el informe realizado por la firma de abogados Davis Polk, aunque sin entrar en sus conclusiones.

El expresidente defiende las subidas de sueldo a su jefa de gabinete. Se?ala que le ocultaron el sueldo del anterior jefe de gabinete y de los anteriores vicepresidentes y que cuando supo que sus cargos estaban cobrando mucho menos que sus predecesores les subi¨® el sueldo. Pese a ello, asegura, ahorr¨® 1,5 millones en salarios de la oficina de presidencia frente a su antecesor. Y destaca que su jefa de gabinete ten¨ªa una ¡°experiencia nunca vista en esa posici¨®n, por su paso previo por la CIA, el Departmento de Estado, la Casa Blanca y el Development Finance Corporation¡±. Considera que el hecho de que los ataques se centren en ella es ¡°puro machismo y discriminaci¨®n¡±. ¡°Desafortunadamente, estamos viendo en el banco el mismo machismo que plaga la regi¨®n¡±, se?ala a EL PA?S.

La carta de despedida

En su carta de despedida a los gobernadores del banco, a la que ha tenido acceso EL PA?S, Claver Carone se quejaba de no haberse podido defender adecuadamente: ¡°Seg¨²n todos los par¨¢metros, el 2021 demostr¨® ser el a?o m¨¢s exitoso desde la fundaci¨®n del Banco hace 63 a?os. Desgraciadamente, no tuve la oportunidad de presentar mi caso a los 48 miembros del Directorio Ejecutivo ni a ustedes, la Asamblea de Gobernadores¡±. Y hac¨ªa una defensa cerrada de su gesti¨®n: ¡°Optimizamos nuestros balances para lograr un financiamiento r¨¦cord de 23.500 millones de d¨®lares, al mismo tiempo que implementamos un ahorro de costos sin precedentes; construimos confianza en el sector privado para lograr r¨¦cords de cofinanciaci¨®n y movilizaci¨®n; obtuvimos los mayores avances en un solo a?o en los indicadores de transparencia y en las encuestas de satisfacci¨®n de las partes interesadas; luchamos contra el sexismo al nombrar a la mayor cantidad de mujeres en puestos de toma de decisiones en la historia del Banco; rechazamos la extorsi¨®n y el clientelismo, asegurando que por primera vez los pa¨ªses peque?os estuvieran representados en los puestos m¨¢s altos; conseguimos el apoyo que anteriormente se hab¨ªa perdido de los l¨ªderes del Congreso de Estados Unidos y de las organizaciones no gubernamentales, y corregimos el favoritismo err¨®neo del Banco hacia China durante la ¨²ltima d¨¦cada¡±.

El ya expresidente tambi¨¦n lanzaba una andanada de cr¨ªticas: ¡°En la regi¨®n muchos se han quedado estancados en el statu quo. Las burocracias de la vieja guardia est¨¢n altamente arraigadas en sus propios intereses, y su sentido de privilegio es demasiado pronunciado. En lugar de trabajar por el progreso, est¨¢n atascadas en un ciclo de ideolog¨ªas populistas y clientelismo pol¨ªtico. Mientras tanto, en Estados Unidos, la Administraci¨®n Biden sufre de miop¨ªa partidista y de la falta de una estrategia cohesionada¡±, dec¨ªa. Se quejaba tambi¨¦n de ¡°arbitrariedad¡±, de la ¡°falta de un debido proceso¡± y de desprecio de los procedimientos en su destituci¨®n.

La presentaci¨®n de candidaturas para la presidencia est¨¢ abierta hasta el 11 de septiembre y la votaci¨®n est¨¢ agendada para el d¨ªa 20 de ese mes. En el banco, el ambiente contin¨²a enrarecido, como mostraron las preguntas planteadas a la presidenta en funciones, Reina Irene Mej¨ªa, que en su mayor¨ªa quedaron sin respuesta.

Las preguntas de los empleados

La que recibi¨® m¨¢s apoyo de los participantes fue esta: ¡°?Por qu¨¦ la otra persona implicada en la investigaci¨®n no ha sido destituida de su cargo? Esto es un insulto a la instituci¨®n y a los empleados. Adem¨¢s, nos merecemos al menos una disculpa de RRHH, mientras luch¨¢bamos contra la inflaci¨®n pidiendo un aumento de sueldo, nos dec¨ªan que dej¨¢ramos de quejarnos, pero autorizaban aumentos salariales obscenos a la jefa de gabinete?¡±. Hubo una decena de preguntas m¨¢s en el mismo sentido y muchos participantes pidieron sin ¨¦xito que se respondiese. En varias intervenciones se citaron las informaciones publicadas por EL PA?S sobre el relevo en el banco.

Esta es una selecci¨®n de algunas de las preguntas planteadas por los empleados del banco durante el foro, casi todas ellas, de forma an¨®nima, lo que seg¨²n uno de los participantes era tambi¨¦n una llamada de atenci¨®n sobre la falta de confianza de los empleados en los l¨ªderes del organismo. En conjunto, muestran una panor¨¢mica de las preocupaciones de la plantilla del banco:

¡ª?C¨®mo planea trabajar el banco para cambiar el clima de miedo a las represalias? ?Solo cambiar el presidente es suficiente?

¡ª?Qu¨¦ niveles de la administraci¨®n ser¨¢n removidos? Por ejemplo, VP, gerentes, representantes o tambi¨¦n las posiciones que han seguido procedimientos competitivos amplios y transparentes. La cultura del terror no es admisible.

¡ªCelebramos que el directorio volvi¨® sobre sus pasos, puesto que fue el mismo directorio quien puso al expresidente a comandar nuestra instituci¨®n y fuimos nosotros los que sufrimos la pol¨ªtica de terror y control. ?C¨®mo puede el staff tener una participaci¨®n en la decisi¨®n del nuevo/a presidente?

¡ªEs importante reconocer que en la administraci¨®n anterior exist¨ªa un miedo generalizado a las represalias de los altos cargos hacia los empleados por denunciar los abusos de poder. Esto debe corregirse y ser una prioridad para la nueva administraci¨®n.

¡ª?Van a cambiar la manera en que las cosas se denuncian? Es obvio que el sistema actual no funciona y que la confianza en Recursos Humanos y ?tica se ha perdido. Por ejemplo, ?tendremos alg¨²n cambio en los procesos o pol¨ªticas de recursos humanos, como en la debida diligencia relacionada con el aumento de salarios a personas con m¨ªnimas experiencia en la instituci¨®n?

¡ª?No deber¨ªan seleccionarse los ejecutivos por su competencia? La pol¨ªtica (incluidas las ¡°cuotas¡± de los pa¨ªses) y los favores juegan un papel demasiado importante.

¡ª?Habr¨¢ una estrategia de Recursos Humanos, con reformas profundas para premiar la meritocracia y no continuar respondiendo a inter¨¦s personales y favoritismos?

¡ª?Van a cambiar la manera en que las cosas se denuncian? Es obvio que el sistema actual no funciona y que la confianza en Recursos Humanos y ?tica se ha perdido.

¡ª?Por qu¨¦ hubo tanto silencio de la alta administraci¨®n ante los atropellos que se cometieron?

¡ªEl expresidente ha emprendido una campa?a de desprestigio del Gupo BID, usando medios de comunicaci¨®n para difundir calumnias y justificar sus actos que van en contra del c¨®digo de ¨¦tica. ?Qu¨¦ est¨¢ haciendo el Banco para mitigar este da?o reputacional ante la opini¨®n p¨²blica?

¡ª?Qu¨¦ cambios en nuestros procesos internos, sistemas de transparencia, y contrapesos (¡°checks and balances¡±) fueron impulsados por este proceso? Por ejemplo, ?tendremos alg¨²n cambio en los procesos o pol¨ªticas de recursos humanos, como en la debida diligencia relacionada con el aumento de salarios a personas con m¨ªnimas experiencia en la instituci¨®n?

¡ª?Habr¨¢ alguna nueva regla para que no se repita que gobernadores que votan por un presidente, luego sean nombrados en la alta administraci¨®n, comprometiendo su independencia?

Y ante la falta de respuesta a muchas de esas cuestiones, hubo tambi¨¦n muchas intervenciones como esta: ¡°?Por qu¨¦ no leen las preguntas m¨¢s votadas? Son las m¨¢s representativas de la gente¡±.