Renfe se prepara para la liberalizaci¨®n del servicio de cercan¨ªas, que ser¨¢ asumido por las comunidades aut¨®nomas en 10 a?os
La empresa p¨²blica quiere evitar el peligro de desmembraci¨®n ante la amenaza de las nuevas compa?¨ªas regionales y otros competidores en los servicios p¨²blicos
Renfe se prepara para la mayor de sus revoluciones cuando en 10 a?os las comunidades aut¨®nomas que lo deseen puedan licitar sus propios servicios de cercan¨ªas y media distancia, de acuerdo con la normativa europea de liberalizaci¨®n de los servicios p¨²blicos ferroviarios. Para ello, la compa?¨ªa ha iniciado una completa reordenaci¨®n administrativa, que afecta no solo al organigrama, sino tambi¨¦n a la pol¨ªtica de recursos (trenes) y personal. Con estos cambios, la empresa p¨²blica quiere evitar el peligro de desmembraci¨®n cuando aparezcan los nuevos operadores regionales de cercan¨ªas que, junto a cualquier otra compa?¨ªa de transporte ferroviario ¡ªnacional o extranjera¡ª, compitan por un servicio p¨²blico que ahora presta Renfe en exclusiva, informaron a este diario fuentes del consejo de administraci¨®n de la empresa ferroviaria que se reuni¨® el lunes.
El asunto es de tal calado que ha obligado a modificar el actual contrato-programa que tiene Renfe con el Estado 2018-2027, (con opci¨®n a cinco a?os adicionales), que contempla en primer lugar que las autoridades competentes (el Estado o las comunidades aut¨®nomas con competencias en materia de transporte por ferrocarril) podr¨¢n licitar un 3% de los servicios y l¨ªneas, medidos en t¨¦rminos de facturaci¨®n econ¨®mica sobre el total a partir de 2026. Tambi¨¦n prev¨¦ que la totalidad de los servicios p¨²blicos se licitar¨¢n para su prestaci¨®n a partir del 1 de enero de 2033, de acuerdo con la normativa de la UE.
La remodelaci¨®n, que protagoniz¨® la reuni¨®n del consejo de administraci¨®n, pretende hacer frente a un escenario incierto, puesto que no se conoce el modelo de las nuevas licitaciones forzadas por el derecho comunitario de liberalizaci¨®n, ni las transferencias de activos (como trenes) que llevar¨¢n aparejadas. De acuerdo a la nueva normativa, la Generalitat catalana o el Gobierno vasco tendr¨¢n la potestad de licitar a partir de 2033 todo el servicio de Cercan¨ªas en su territorio, en un concurso al que podr¨¢n presentarse tanto Renfe como los operadores p¨²blicos regionales como, por ejemplo, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya o empresas p¨²blicas (como la SNCF francesa) o privadas. ¡°En cualquier caso, el objetivo de Renfe es concurrir a todas las licitaciones y ganarlas, porque somos el operador de referencia y queremos seguir si¨¦ndolo¡±, se?alan fuentes del consejo.
Para operar en 2026, estas nuevas licitaciones, que son muy complejas y nunca se han realizado en Espa?a, deber¨ªan iniciar su proceso el a?o que viene, en 2024, aunque no se esperan grandes cambios hasta la liberalizaci¨®n completa en 2033. La liberalizaci¨®n de cercan¨ªas es continuaci¨®n de la de los servicios comerciales (AVE y larga distancia), donde ya existe competencia en Espa?a desde 2021, y en la que operan en competencia con Renfe otras empresas como Ouigo (SNCF) e Iryo.
En Espa?a, la Administraci¨®n General del Estado tiene actualmente competencias en la mayor parte del Estado. Pero tambi¨¦n tiene competencias hoy la Generalitat de Catalu?a (el traspaso de Rodalies aunque el servicio lo siga prestando Renfe) y est¨¢n negociando las transferencias al Gobierno vasco y la Generalitat Valenciana. La Junta de Andaluc¨ªa tambi¨¦n ha mostrado su inter¨¦s por crear nuevos servicios ferroviarios OSP (obligaciones de servicio p¨²blico) que unan las principales ciudades de la regi¨®n. Las autonom¨ªas hist¨®ricas como Catalu?a y el Pa¨ªs Vasco no se limitan a pedir la competencia sobre las licitaciones para la prestaci¨®n del servicio que reconoce la legislaci¨®n comunitaria, sino que exigen al Gobierno central adem¨¢s el traspaso de activos tanto de las infraestructuras, como v¨ªas y estaciones, ahora en manos de la sociedad p¨²blica Adif, como de los trenes propiedad de Renfe.
M¨¢s de dos millones de viajeros
Renfe es consciente de que el cambio supondr¨¢ una completa transformaci¨®n de la compa?¨ªa, desde todos los ¨¢mbitos: en el social, m¨¢s de dos millones de viajeros usan cada d¨ªa los trenes de cercan¨ªas y media distancia; en el econ¨®mico, la compa?¨ªa ingresa anualmente por venta de billetes y por las subvenciones que recibe de las Administraciones (en este momento, la Administraci¨®n General del Estado) m¨¢s de 2.000 millones de euros; y en el laboral, ya que casi la mitad de la plantilla de Renfe est¨¢ empleada directa o indirectamente en la prestaci¨®n de estos servicios p¨²blicos.
Por eso, la compa?¨ªa ya aprob¨® el d¨ªa 10 una nueva organizaci¨®n administrativa, de recursos y de personal del ?rea de los Servicios P¨²blicos, con el objetivo de mejorar en la interlocuci¨®n con las Administraciones regionales y locales y con la del Estado. Con el nuevo modelo, todos los ¨¢mbitos territoriales de cercan¨ªas y media distancia tendr¨¢n departamentos de prestaci¨®n de servicios, operaciones, recursos humanos, control de gesti¨®n e instalaciones. La principal novedad es precisamente la creaci¨®n de este departamento de instalaciones en todos los ¨¢mbitos territoriales, que posibilitar¨¢ la descentralizaci¨®n de una funci¨®n, la contrataci¨®n de mejoras de car¨¢cter local, que se realiza en la actualidad a nivel central.
Con la reordenaci¨®n, se concede m¨¢s autonom¨ªa a los responsables locales para que puedan dar soluciones r¨¢pidas a problemas concretos de cada uno de los 11 n¨²cleos de cercan¨ªas, 6 de cercan¨ªas de ancho m¨¦trico (la antigua Feve), 5 ¨¢reas de media distancia convencional y otras 5 ¨¢reas de alta velocidad de media distancia-Avant.
La liberalizaci¨®n de los servicios p¨²blicos ferroviarios est¨¢ en marcha en toda Europa, aunque su avance es muy diferente seg¨²n los pa¨ªses, destacando el Reino Unido y Suecia en la avanzadilla. Renfe quiere estar presente en el proceso con operaciones como la adquisici¨®n del 50% del operador checo Leo Express, que le permite tener actividad en tres pa¨ªses europeos m¨¢s (Rep¨²blica Checa, Eslovaquia y Polonia) y disponer de los recursos y licencias para acceder al mercado alem¨¢n. Adem¨¢s, ha anunciado que va a operar una l¨ªnea de cercan¨ªas en Francia.
P¨¦rdidas de 108 millones en 2022
Renfe perdió 108,6 millones de euros a lo largo del 2022, un resultado que la compañía ha atribuido al impacto de la subida de los precios de energía y al descenso del tráfico de viajeros durante el primer trimestre del año como consecuencia del repunte de casos ocasionado por la variante Ómicron, según ha destacado la empresa durante la presentación del informe de resultados provisionales ante el consejo de administración.
Los gastos en energía de tracción han alcanzado los 630,1 millones de euros, una cifra que refleja un incremento de 277,4 millones en comparación con el año anterior y, consecuentemente, un aumento en la partida de gasto del 78,6%. Si bien en 2021, la energía ya representaba el 11% de los gastos de explotación del principal consumidor de energía eléctrica en el país, el gasto correspondiente a esta partida ascendió en 2022 hasta el 16,4%. De esta manera, la energía ocupa la tercera posición entre los gastos más importantes de la compañía, por detrás de los vinculados a cánones y personal.
Otro factor que ha lastrado la cuenta de resultados de la compañía fue la propagación de la variante Ómicron, que tuvo lugar a lo largo de los tres primeros meses del año pasado. En ese momento, los ingresos por venta de billetes se situaron en un 21,3% por debajo de las previsiones, lo que produjo unas pérdidas durante el primer trimestre del año de 95 millones de euros, mientras que en el resto de trimestres las pérdidas fueron de 13 millones de euros.
Los ingresos por tráficos fueron de 3.788 millones de euros, lo que supone un incremento del 28,7%. En la parte de viajeros crecieron un 43,5% y en la de mercancías un 15,7%. Para compensar el impacto de los precios de la energía, Renfe puso en marcha un plan de contención de gasto que le permitió reducir en 368,1 millones de euros sus costes ajenos a la electricidad, lo que incluye personal, cánones, mantenimiento de trenes, servicios a bordo, consumos de materiales o proyectos, entre otras partidas. El resultado bruto de explotación (Ebitda) se multiplicó por más de cuatro veces, hasta los 292 millones de euros, frente a los 67 millones del año anterior.
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