¡°De no resolver los problemas de la gente, Latinoam¨¦rica ser¨¢ otra vez un paciente¡±

Desde su hogar en Bogot¨¢, Mauricio C¨¢rdenas (Bogot¨¢, 1962) responde al llamado de EL PA?S para charlar sobre el momento de oportunidad y descontento que atraviesa Am¨¦rica Latina. El economista e investigador en el Centro sobre Pol¨ªtica Energ¨¦tica Global de la Universidad de Columbia, SIPA, en Nueva York, escribi¨® a inicios de a?o una columna muy compartida entre chats y grupos de quienes observan la econom¨ªa pol¨ªtica global. Su tesis es sencilla: Latinoam¨¦rica tiene mucho qu¨¦ ofrecer al mundo en un momento de mucha autonom¨ªa pol¨ªtica. Las complicaciones empiezan con las presiones a la gobernabilidad.

Los discursos nacionalistas que prohiben la miner¨ªa o la inversi¨®n privada en energ¨ªa ¡°les dan a los l¨ªderes gobernabilidad en el corto plazo pero no le est¨¢ resolviendo los problemas a la gente¡±, dice C¨¢rdenas, quien fue ministro de Hacienda de Colombia de 2012 a 2018, con Juan Manuel Santos. Ofrecer ingreso, empleo y educaci¨®n es m¨¢s dif¨ªcil, pero es, al final, la ¨²nica estrategia de largo plazo.

Pregunta. Sostienes que Am¨¦rica Latina est¨¢ actualmente sola en un mundo distra¨ªdo. ?Esto quiere decir que la regi¨®n ser¨¢ irrelevante o que es una mejor opci¨®n para el capital extranjero que busca relativa estabilidad?

Respuesta. El mundo est¨¢ concentrado en otros problemas y no est¨¢ mirando a Am¨¦rica Latina, por lo que la regi¨®n est¨¢, en cierto sentido, sola. Es m¨¢s libre, tiene m¨¢s autonom¨ªa que hace 30 o 40 a?os cuando ten¨ªamos los problemas en Centroam¨¦rica. O hace inlcuso m¨¢s, cuando los problemas de Chile con Allende. Antes, un cambio de orientaci¨®n pol¨ªtica o ideolog¨ªa generaba reacciones, especialmente de Estados Unidos. El pensamiento era ¡®esto no puede pasar, es nuestro patio, nuestro jard¨ªn trasero¡¯ y al final acababan tumbando gobiernos. Esto, afortunadamente, ya no pasa y Am¨¦rica Latina est¨¢ haciendo sus transiciones, sus cambios, mientras EE UU est¨¢ preocupado con Rusia, con China. Eso es un primer punto. Un segundo punto responde a tu pregunta ?es esto un reflejo de que Am¨¦rica Latina es irrelevante? No, porque casualmente el mundo se ha movido en una direcci¨®n donde cada d¨ªa necesita m¨¢s de lo que Am¨¦rica Latina puede ofrecer. Tiene la biodiversidad, entonces pudiera ofrecer la soluci¨®n al cambio clim¨¢tico. Tiene los alimentos, tiene los minerales estrat¨¦gicos que se requieren para migrar a energ¨ªas limpias y salir de los combustibles f¨®siles. Tiene petr¨®leo, el cual tiene su rol en la transici¨®n energ¨¦tica y del cual se pueden beneficiar particularmente Brasil y Guyana. Estos son dos datos, dos realidades. El mundo est¨¢ preocupado en otras cosas, pero eso est¨¢ ocurriendo justo en el momento en que Am¨¦rica Latina es m¨¢s relevante.

P. Considerando el descontento social tan fuerte de los ¨²ltimos a?os, ?tienen los Gobiernos el margen de maniobra para atender las exigencias econ¨®micas de sus ciudadanos y al mismo tiempo aprovechar este momento tan particular?

R. Es un buen punto y me hace pensar que esto es m¨¢s bien una triada, que conjuga estas tres, no dos, realidades: primero, lo que tiene qu¨¦ ofrecer es cada d¨ªa m¨¢s relevante; segundo, que es cada d¨ªa m¨¢s aut¨®noma; y tercero, que el margen error de los Gobiernos es cada d¨ªa m¨¢s limitado porque las sociedades son muy impacientes. Hacer mal las cosas puede salir muy costoso y los gobernantes tienen m¨¢s presiones por las que a veces terminan tomando malas decisiones. Puede que los l¨ªderes latinoamericanos tengan m¨¢s independencia frente a las potencias, puede que hoy en d¨ªa puedan ser jugadores m¨¢s relevantes en el mundo, pero puede que sus poblaciones insatisfechas no los dejen hacer lo correcto porque ejercen presiones enormes. Los eligen con muchas expectativas y si no da resultado, los tumban. El ejemplo de Per¨² es perfecto.

P. ?Cu¨¢les son las mejores pol¨ªticas p¨²blicas en estas condiciones?

R. Esa triada que nos estamos imaginando te raya la cancha. Es una cancha donde tienes m¨¢s autonom¨ªa y tienes recursos qu¨¦ aportar al mundo. Una poblaci¨®n impaciente que quiere soluciones r¨¢pidas conforma tus restricciones. Un l¨ªder en Latinoam¨¦rica se est¨¢ preguntando ?cu¨¢l es el mejor juego posible? Yo dir¨ªa que para poder aprovechar y capitalizar esa mayor relevancia de Am¨¦rica Latina se necesita una visi¨®n de largo plazo. Estas no son cosas que van a ocurrir de un d¨ªa para otro. Tiene que proteger su biodiversidad. Hay que volverse una gran productora de alimentos, eso requiere producir fertilizante. Al mismo tiempo, le puede producir al mundo estos minerales que se requieren, como el litio. El l¨ªder tiene que manejar su pa¨ªs con una visi¨®n de largo plazo, pero tiene una expresi¨®n de corto plazo en la calle a la que tiene que atender. Los l¨ªderes latinoamericanos tienen que ser muy h¨¢biles en resolverle problemas a la gente, hoy agravados por la pandemia, pero mantener esta visi¨®n de largo plazo. Lo que pasa es que muchas veces para resolverlos, para atender las presiones de corto plazo, agitan unas banderas que le dan a la gente la sensaci¨®n de que se est¨¢ progresando, como el nacionalismo energ¨¦tico, el prohibir las industrias extractivas, o bloquear la inversi¨®n en sectores estrat¨¦gicos, frenar la miner¨ªa. Esto les da gobernabilidad en el corto plazo pero no le est¨¢ resolviendo los problemas a la gente. Tampoco va aumentar la relevancia de Am¨¦rica Latina en el largo plazo. Gobernar eficazmente requiere resolver los problemas a la gente m¨¢s directamente, no con discursos nacionalistas, ni con discursos anti mercado o de que la historia de nuestros pa¨ªses ha sido un fracaso. Se requiere resolver los problemas a la gente d¨¢ndole ingreso, d¨¢ndole empleo, d¨¢ndole educaci¨®n pero no lo est¨¢n haciendo porque eso es dif¨ªcil. De ser as¨ª, Am¨¦rica Latina estar¨ªa perdiendo su oportunidad.

P. Temo ver los resultados de las pol¨ªticas de hoy tan pronto como en tres a?os, considerando la velocidad del mundo.

R. Hoy, nosotros no estamos en el asiento del paciente. Es decir, no estamos en la crisis del peso mexicano en 1995, ni la de Brasil en 1999. Am¨¦rica Latina hoy puede ponerse en la posici¨®n del que deja las soluciones, en el que ayuda, en el que tiene las f¨®rmulas. Pero, de no actuar, en tres a?os podemos acabar en el asiento del paciente otra vez.

P. Has llamado a la nueva oleada de presidentes de izquierda en la regi¨®n una ¡°coalici¨®n de facto¡±. ?Debemos esperar que se coordinen para una mayor integraci¨®n econ¨®mica?

R. Sin duda alguna puede haber m¨¢s coordinaci¨®n ahora, porque hay un grupo que tiene m¨¢s afinidades, que piensan parecido. Si miras c¨®mo interact¨²an entre ellos, por ejemplo, cuando se apoyan entre ellos en redes sociales, es evidente que eso no exist¨ªa hasta hace poco.Hay como una nueva ola de l¨ªderes que quieren trabajar m¨¢s en equipo y eso puede generar una mayor capacidad de que la regi¨®n est¨¦ coordinada y juegue un papel m¨¢s relevante en el escenario internacional. Todo el mundo piensa que Lula puede ejercer ese liderazgo que se necesita, pero pues habr¨¢ que ver si la situaci¨®n pol¨ªtica de Brasil se lo va a permitir, porque el va a tener que gobernar un pa¨ªs muy complejo, mucho m¨¢s dif¨ªcil el que tuvo que gobernar hace 20 a?os. Creo que al final los problemas internos de cada pa¨ªs los van a absorber y quiz¨¢s les van a quitar posibilidades de hacer ese liderazgo coordinado.

P. Mi ¨²ltima pregunta es sobre China, ya que mientras se enfrenta en una guerra comercial con EE UU, el pa¨ªs asi¨¢tico ha ido ampliando sus operaciones comerciales en M¨¦xico y otros pa¨ªses de Am¨¦rica Latina, para formar parte del friendshoring estadounidense. ?Cu¨¢les son las implicaciones?

R. Ese es un cap¨ªtulo muy complejo y muy importante, porque Am¨¦rica Latina va a ser un punto focal de las tensiones entre China y EE UU. Hasta ahora, Am¨¦rica Latina ha resuelto esa tensi¨®n con pragmatismo, ya que en ning¨²n momento ha impedido que lleguen las empresas chinas. Entonces Am¨¦rica Latina est¨¢ diciendo ¡®mire, yo necesito desarrollarme y bienvenido el capital chino¡¯. El margen de maniobra para Am¨¦rica Latina es limitado porque el peso del comercio exterior es grand¨ªsimo. Y s¨ª, EE UU tiene sus preocupaciones pero a la hora de la verdad no tiene mecanismos efectivos para reemplazar a China en Am¨¦rica Latina. La estadounidense es una econom¨ªa de mercado, nadie puede forzar a las empresas a venir a Am¨¦rica Latina. El Estado de EE UU no tiene un brazo financiero que le permita hacer lo que hacen los bancos chinos, entonces est¨¢ en una situaci¨®n de desventaja en ese sentido.

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