La odisea de alquilar habitaci¨®n: ¡°Es como buscar trabajo¡±

Habitaci¨®n con ba?o compartido en la mism¨ªsima Puerta del Sol de Madrid: 875 euros al mes. La habitaci¨®n, anunciada en el portal pisocompartido.com, es una de las seis que tiene el apartamento. Si todas se alquilan por el mismo precio, la renta mensual que se lleva el propietario sale a 5.250 euros, m¨¢s del doble de lo que, seg¨²n el portal Idealista, cuesta de media el alquiler convencional en esa zona, y casi 2,5 veces m¨¢s que el salario medio de la comunidad. La propietaria, adem¨¢s, especifica que no vive en el piso: lo alquila por habitaciones. Contactada por este peri¨®dico, no contesta ni por qu¨¦ ha optado por esta f¨®rmula, ni qu¨¦ tipo de contrato usa con los inquilinos. Otro anuncio de una habitaci¨®n, en Chamart¨ªn, lo pone directamente un agente inmobiliario: 600 euros incluyendo gastos, un mes de fianza y ¡°gastos administrativos¡± de 250 euros. Eso s¨ª, el propietario proporciona la cuenta de Netflix.

Los portales inmobiliarios alertan de que cada vez hay m¨¢s anuncios de habitaciones, y de que su precio se ha disparado: el alquiler medio de una habitaci¨®n en Espa?a es de 405 euros al mes, seg¨²n Pisos.com, casi un 6% m¨¢s que el trimestre anterior. Barcelona es la ciudad donde son m¨¢s caras (631 euros de media), seguida de Madrid (477 euros), Palma (473) y Vitoria-Gasteiz (448).

Ante estos precios, quienes buscan habitaci¨®n acuden primero al boca oreja y a las redes sociales, especialmente ahora, con el nuevo curso universitario a punto de empezar. ¡°En este tipo de anuncios suelen caer m¨¢s los extranjeros, que se lo pueden permitir. Pero s¨ª que es cierto que al pagar estos precios contribuyen a crear un mercado de la vivienda que la gente no puede pagar¡±, dice Igone Franco, de 25 a?os. Es de Bilbao, pero desde hace varios cursos se traslada en septiembre a Barcelona y busca piso o habitaci¨®n. ¡°Este verano no quer¨ªa buscar un piso entero y prefer¨ª buscar una habitaci¨®n. La busqu¨¦ por Instagram. Puede ser bastante violento, es como buscar trabajo, se crean din¨¢micas un poco raras¡±. Al final encontr¨® una habitaci¨®n por 330 euros con gastos incluidos. ¡°De precio est¨¢ bien, pero no es muy grande y es un entresuelo¡±, dice.

Gonzalo Bernal, de 21 a?os, tambi¨¦n tuvo suerte al encontrar una habitaci¨®n en la capital catalana por 240 euros, porque el piso era de la familia de un compa?ero de carrera. Pero este septiembre alojar¨¢ a un amigo en una especie de trastero porque no encuentra ning¨²n sitio decente y barato: ¡°Este a?o se ha notado mucho, la gente ha tenido que irse a barrios alejados, ya que en algunos sitios los precios han crecido mucho. Todo el mundo tiene alguna mala experiencia: revisiones de contrato cuando no toca o problemas para recuperar la fianza¡±.

En ciudades como M¨¢laga los precios tambi¨¦n se han disparado. Marta Beltr¨¢n, de 22 a?os, busca una habitaci¨®n por un m¨¢ximo de 350 euros, ya que vivir¨¢ en la ciudad para trabajar en un empleo mileurista. Ha preguntado por Twitter e Instagram, porque a estas alturas ¡°ya est¨¢ todo alquilado, y lo que queda es muy caro¡±. Desde 2019, cada curso busca habitaci¨®n en M¨¢laga, y reconoce que en este tiempo los alquileres han ido subiendo. ¡°Una vez pagu¨¦ mucho dinero para entrar en una habitaci¨®n que encontr¨¦ por una inmobiliaria, y era una habitaci¨®n en muy malas condiciones. Los caseros se han vuelto unos aprovechados¡±, afirma.

Con la estrategia de alquilar por habitaciones, algunos propietarios persiguen una rentabilidad a¨²n mayor que la del alquiler de pisos enteros, aunque estos tambi¨¦n est¨¢n en precios muy elevados, especialmente en las ciudades. Los alquileres se encarecieron un 20% entre 2016 y 2021, seg¨²n los datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. En Barcelona, seg¨²n los datos extra¨ªdos por la Generalitat de las fianzas depositadas, cuesta 1.087 euros al mes de media.

Ferran Font, director de estudios de Pisos.com, cree que esta tendencia de alquilar por habitaciones no busca solo una mayor rentabilidad, sino esquivar la Ley de Vivienda, que entr¨® en vigor en mayo. Aunque una parte de las medidas de esta norma depende de su aplicaci¨®n por parte de las comunidades aut¨®nomas (sobre todo, el control de los precios), la ley s¨ª establece un tope al aumento de los alquileres para los pr¨®ximos a?os, normas para grandes tenedores y la obligaci¨®n de que los honorarios de las agencias inmobiliarias los pague el arrendador y no el inquilino.

Falta de regulaci¨®n

¡°Los propietarios se ven indefensos e intentan esquivar la ley sacando su inmueble del alquiler convencional de larga duraci¨®n. As¨ª ha surgido el alquiler de corta duraci¨®n y el alquiler por habitaciones, f¨®rmulas que no est¨¢n previstas en ninguna ley¡±, resume Font, que piensa que estas casu¨ªsticas deber¨ªan tener una regulaci¨®n m¨¢s homog¨¦nea. El precio del alquiler de habitaciones sol¨ªa crecer entre un 1% y un 2% cada a?o, pero ahora est¨¢ disparado, explica Font: ¡°Sobre todo en Madrid y Barcelona, pero tambi¨¦n en ciudades como Valencia, M¨¢laga o Granada. Hist¨®ricamente, era un mercado muy relacionado con la actividad estudiantil, pero ya no es solo este colectivo el que lo necesita¡±.

De hecho, seg¨²n un estudio de Fotocasa, el 44% de los espa?oles que comparte piso lo hace no por gusto, sino porque no puede pagar uno completo. Y adem¨¢s, es el grupo m¨¢s desprotegido: un estudio de mayo del Instituto de Investigaci¨®n Urbana de Barcelona (instituci¨®n vinculada al Sindicato de Inquilinos) apuntaba que casi el 70% de las personas que no tienen contrato formal de alquiler en realidad lo que alquilan es una habitaci¨®n.

¡°Ya advertimos que la Ley de Vivienda est¨¢ incompleta y tiene demasiados agujeros¡±, explica Jaime Palomera, cofundador del Sindicato. Palomera recuerda que el alquiler de habitaciones ¡°no es nuevo, pero crecer¨¢, como todas las f¨®rmulas que no est¨¢n reguladas¡±, y resalta las dificultades de no tener contrato: ¡°Implica que ser¨¢ m¨¢s complicado recuperar la fianza o evitar que te obliguen a pagar los honorarios. Si el mercado de alquiler ya es una jungla, el de habitaciones a¨²n lo es m¨¢s¡±.

Palomera define de una manera distinta lo que Font califica de ¡°indefensi¨®n¡± de los propietarios: ¡°El legislador era consciente de estos agujeros, pero no los quiso regular. Hab¨ªa gente que dec¨ªa que hab¨ªa que dar una v¨ªa de escape al sector. Hay actores en el mercado inmobiliario que esperan sacar una rentabilidad del alquiler muy superior a la de muchos productos financieros, y ahora esto se sistematiza en aplicaciones m¨®viles en las que puedes invertir comprando habitaciones¡±.

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