La inflaci¨®n frena con fuerza en octubre en la zona euro y cae a su nivel m¨¢s bajo en dos a?os
El PIB en los pa¨ªses de la moneda ¨²nica se contrajo una d¨¦cima entre julio y septiembre
La inflaci¨®n ha frenado en octubre. Los precios en la zona euro han pasado de crecer un 4,3% en septiembre a hacerlo un 2,9% en octubre, seg¨²n Eurostat. Desde agosto de 2021 ¡ªcuando la invasi¨®n de Ucrania solo estaba en el radar de analistas especializados y servicios de informaci¨®n, y la crisis de los precios energ¨¦ticos era un problema para Espa?a y muy pocos pa¨ªses m¨¢s¡ª no se ve¨ªa una cifra tan baja. Que el dato es positivo resulta innegable. Que tiene un lado negativo, tambi¨¦n. Se ve con m¨¢s claridad en otra cifra que este martes divulga la oficina europea de estad¨ªsticas: la actividad econ¨®mica durante el tercer trimestre se ha contra¨ªdo un 0,1%. La conclusi¨®n parece clara: la receta de aceite de ricino en forma de subida de tipos de inter¨¦s que impuso el Banco Central Europeo (BCE) hace ya m¨¢s de un a?o afecta a los precios y al PIB.
Ha sido la energ¨ªa, de nuevo, el factor clave que ha provocado ese frenazo en el ¨ªndice general. Sus precios han bajado un 11,1% respecto al a?o anterior en octubre, cuando en septiembre lo hac¨ªan un 4,3%. Los ¨ªndices en los que no se tienen en cuenta estas cotizaciones han frenado menos y siguen todav¨ªa altos: el que no tiene en cuenta la energ¨ªa y los productos frescos ha quedado en el 5%; y si se resta el tabaco, baja hasta el 4,2%.
Ese comportamiento de los precios energ¨¦ticos es lo que est¨¢ detr¨¢s de la ¡°sorpresa¡±, palabra empleado por Goldman Sachs, en el ¨ªndice general de inflaci¨®n. El dato medio de las diferentes previsiones sobre la inflaci¨®n de octubre que hab¨ªa recopilado este banco de inversi¨®n el d¨ªa anterior arrojaba un pron¨®stico del 3,1% de IPC general en la zona euro. Finalmente ha sido del 2,9%.
Si estos n¨²meros se completan con los de la actividad econ¨®mica, parece evidente que el BCE tiene argumentos de sobra para no subir los tipos de inter¨¦s en sus pr¨®ximas reuniones, como ya anunci¨® la presidenta de instituci¨®n, Christine Lagarde, el pasado jueves, tras la ¨²ltima reuni¨®n del consejo de gobierno. La inflaci¨®n da s¨ªntomas de empezar a estar controlada o, al menos, en proceso de estarlo muy pronto. En cambio, el crecimiento del PIB est¨¢ absolutamente estancado.
En el ¨²ltimo a?o, cada nueva medici¨®n trimestral del producto interior bruto (PIB), en la zona euro y en el conjunto de la UE, muestran una actividad en aton¨ªa. D¨¦cima arriba o abajo ¡ªy siempre con la precauci¨®n de que las revisiones estad¨ªsticas posteriores corrijan las estimaciones iniciales¡ª, la actividad encadena cuatro trimestres varada. El n¨²mero (-0,1% de contracci¨®n trimestral) esconde divergencias dentro de la propia UE: hay dos pa¨ªses (Austria y Estonia) en recesi¨®n; otros cinco, al menos, han entrado en terreno negativo (Rep¨²blica Checa, Alemania, Irlanda, Lituania y Portugal); otros recuperan algo de fuelle (B¨¦lgica o Letonia); est¨¢ el que ha frenado en seco (Francia); y, por ¨²ltimo, Espa?a, con una actividad que crece (0,3%), aunque cada trimestre un poco menos.
Las subidas de tipos de inter¨¦s o la erosi¨®n en el poder adquisitivo de la inflaci¨®n hacen mella. Las encuestas que buscan adelantar por d¨®nde va a ir la econom¨ªa as¨ª lo demuestran. El lunes, la Comisi¨®n Europea divulg¨® su indicador de sentimiento econ¨®mico, que en la zona euro est¨¢ en 93,1 puntos; y todo resultado por debajo de 100 no augura nada bueno. Tampoco la confianza de los consumidores del ¨¢rea monetaria se muestra m¨¢s robusta.
S¨ª que tiene mejores expectativas el empleo, lo que est¨¢ en plena sinton¨ªa con lo que se observa ¡ªy en algunos sitios como Espa?a, sorprende al alza¡ª en el mercado laboral. La crisis de precios y de energ¨ªa no han hecho da?o y, aunque los sueldos han perdido poder adquisitivo ¡ªque solo ahora empieza a recuperar terreno¡ª, no se destruyen puestos de trabajo. Aunque las previsiones apunten a cierta debilidad en el futuro, el ¨ªndice de expectativas de empleo que tambi¨¦n elabora la Comisi¨®n Europea arroja resultados por encima de 100, poco y menos que en el ¨²ltimo a?o largo, pero sigue en el 102,3.
Esta robustez del mercado laboral ha evitado que la econom¨ªa se haya llevado un golpe m¨¢s grande, como se temi¨® en los primeros momentos de la invasi¨®n y de la crisis energ¨¦tica, cuando hab¨ªa pocas dudas de que Europa se adentrar¨ªa en una recesi¨®n profunda. Esto, por ahora, no ha pasado y no hay previsiones en esa l¨ªnea.
Lo que s¨ª apuntan los analistas es que la situaci¨®n de estancamiento continuar¨¢ en el futuro inmediato. Por ejemplo, los economistas del servicio de estudios del banco neerland¨¦s ING apuntan sobre Francia que ¡°es probable¡± que la econom¨ªa de este pa¨ªs ¡ªla segunda de la zona euro¡ª siga enfri¨¢ndose en los pr¨®ximos trimestres. Entretanto, Alemania lleva seis trimestres (es decir, a?o y medio) en terreno negativo o en cero. No ha llegado a la recesi¨®n t¨¦cnica, definida como dos trimestres seguidos en negativo. Pero lleva tiempo flirteando con ella.
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