Ha llegado el momento de blindar la econom¨ªa europea contra el cambio clim¨¢tico
Para seguir siendo competitiva en el mundo, Europa debe impulsar la transici¨®n ecol¨®gica. Pero para tener ¨¦xito, esta debe ser justa e inclusiva.
El cambio clim¨¢tico se est¨¢ acelerando. Estamos agotando el tiempo de que disponemos para limitar el calentamiento global a 1,5¡ãC. Podemos contribuir en el marco de nuestros mandatos o sufrir las nefastas consecuencias de nuestra pasividad.
Mientras las autoridades, los l¨ªderes empresariales y la sociedad civil se preparan para las negociaciones sobre el clima en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Clim¨¢tico (COP28) que se celebrar¨¢ la semana que viene en Dubai, 2023 parece seguro que ser¨¢ el a?o m¨¢s caluroso desde que existen registros. Los incendios forestales, las sequ¨ªas y las inundaciones extremas est¨¢n teniendo un gran coste humano y econ¨®mico en todo el mundo. Los datos son claros: el an¨¢lisis del Banco Central Europeo muestra que cuanto m¨¢s tiempo esperemos para reducir nuestras emisiones y realizar la transici¨®n a una econom¨ªa m¨¢s ecol¨®gica, mayor ser¨¢ el coste. Y la encuesta sobre inversi¨®n de 2023 del Banco Europeo de Inversiones revela que dos de cada tres empresas europeas ya est¨¢n sufriendo da?os y p¨¦rdidas debido al cambio clim¨¢tico.
Al mismo tiempo, las fuentes de energ¨ªa en que se basan nuestras econom¨ªas est¨¢n cambiando y la transici¨®n energ¨¦tica est¨¢ avanzando r¨¢pidamente. Una combinaci¨®n de pol¨ªticas, innovaci¨®n, tarificaci¨®n del carbono y financiaci¨®n privada y p¨²blica ¡ªtambi¨¦n a trav¨¦s del Pacto Verde Europeo¡ª est¨¢ acelerando la inversi¨®n en tecnolog¨ªas que contribuir¨¢n a mitigar la degradaci¨®n causada por la utilizaci¨®n constante de combustibles f¨®siles y el calentamiento global.
El gasto en energ¨ªas limpias a escala mundial est¨¢ batiendo r¨¦cords, como muestra el informe World Energy Outlook de la Agencia Internacional de la Energ¨ªa. Este cambio hacia una energ¨ªa m¨¢s limpia no est¨¢ motivado ¨²nicamente por la buena voluntad, sino que tambi¨¦n tiene sentido desde el punto de vista econ¨®mico. Ahora es m¨¢s barato y r¨¢pido implantar energ¨ªas renovables que construir nuevas infraestructuras para los combustibles f¨®siles. En un mundo de creciente incertidumbre geopol¨ªtica, las tecnolog¨ªas de energ¨ªas limpias contribuyen a impulsar la seguridad y la independencia energ¨¦ticas de los pa¨ªses.
La transici¨®n ecol¨®gica no s¨®lo es importante para proteger nuestro medio ambiente, sino tambi¨¦n nuestra econom¨ªa. No tiene sentido, desde el punto de vista econ¨®mico, invertir en fuentes de energ¨ªa cada vez menos competitivas y no aprovechar los avances tecnol¨®gicos que configurar¨¢n la combinaci¨®n energ¨¦tica del futuro. Si Europa no se une a la revoluci¨®n energ¨¦tica mundial, su competitividad se ver¨¢ perjudicada irremediablemente.
Europa tiene que ser previsora, ambiciosa y decidida si queremos evitar este desenlace. Tiene que crear un entorno normativo estable y favorable, con objetivos estrat¨¦gicos bien definidos, en el que el capital privado se oriente firmemente hacia las tecnolog¨ªas verdes. Para que prospere la innovaci¨®n, tambi¨¦n se necesitan unas condiciones equitativas a escala mundial.
Instrumentos financieros como los bonos verdes emitidos por la Uni¨®n Europea (UE) ayudar¨¢n a financiar los avances en tecnolog¨ªas limpias, y tendr¨ªan a¨²n m¨¢s fuerza en una uni¨®n de mercados de capitales plenamente concluida. Soluciones de financiaci¨®n ?a medida? o garant¨ªas para mitigar el riesgo asociado a inversiones privadas altamente innovadoras ¡ªcomo los parques e¨®licos flotantes, el hidr¨®geno verde o las nuevas tecnolog¨ªas de bater¨ªas¡ª ayudar¨¢n a implantar la infraestructura que Europa necesita para alcanzar la neutralidad de carbono. A escala mundial, la tarificaci¨®n del carbono aportar¨ªa transparencia para animar a consumidores e inversores a optar por productos y activos sostenibles y energ¨¦ticamente eficientes.
Pero la actuaci¨®n de Europa, por s¨ª sola, no ser¨¢ suficiente: a menos que otros tambi¨¦n tomen medidas, todos fracasaremos. Iniciativas como el Pacto Verde Europeo deben ir acompa?adas de pol¨ªticas ambiciosas que ayuden a las regiones en desarrollo de fuera de Europa a adoptar fuentes de energ¨ªa limpias. Las inversiones en tecnolog¨ªas europeas de vanguardia pueden marcar, y marcar¨¢n, la diferencia.
En el trabajo para transformar nuestra econom¨ªa, debemos asegurarnos de que nadie se quede atr¨¢s. Europa debe esforzarse por lograr una transici¨®n justa, inclusiva y equitativa. Las pol¨ªticas relacionadas con el cambio clim¨¢tico y la transici¨®n pueden afectar m¨¢s gravemente a las empresas y los hogares m¨¢s vulnerables. Necesitamos medidas fiscales temporales bien orientadas e iniciativas de reciclaje profesional para distribuir equitativamente la carga de la transici¨®n.
Ante los retos econ¨®micos, las pol¨ªticas clim¨¢ticas se consideran con demasiada frecuencia un chivo expiatorio. Pero las consecuencias de la inacci¨®n ser¨ªan mucho peores. La respuesta no est¨¢ en rebajar nuestra ambici¨®n, sino en liberar todo el potencial de quien innova, haciendo que la econom¨ªa europea sea m¨¢s competitiva y resistente y garantizando un futuro m¨¢s justo y sostenible para todos.
La COP28 es una oportunidad para que la UE y los pa¨ªses de todo el mundo demuestren su compromiso para liderar la lucha contra el cambio clim¨¢tico y respaldar esa determinaci¨®n con medidas concretas. En el marco de nuestros mandatos, participaremos en este esfuerzo colectivo.
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