Los espa?oles cobran 18 euros por cada hora de trabajo, seis menos que la media europea y 13 menos que Alemania

Los espa?oles cobraron 18,2 euros por hora de trabajo en 2023, seg¨²n cifras de Eurostat difundidas este mi¨¦rcoles. Como suele pasar en la comparaci¨®n laboral respecto a Europa, el dato nacional es peor que la media continental. La media de los Veintisiete es de 24 euros, seis m¨¢s que Espa?a. La cifra tambi¨¦n es peor que la del resto de grandes pa¨ªses europeos: las retribuciones son mejores en Italia (21,5), Francia (28,7) o Alemania (31,6).

Espa?a est¨¢ lej¨ªsimos de los pa¨ªses con mejores datos: Luxemburgo (47,2), Dinamarca (42) y Noruega (41,7). Estos trabajadores cobran m¨¢s del doble que los espa?oles. Y lo m¨¢s posible es que la distancia sea a¨²n mayor, ya que los datos de Eurostat describen a empleados en empresas con 10 trabajadores o m¨¢s, cuando Espa?a es uno de los pa¨ªses con mayor concentraci¨®n de pymes, precisamente donde se acumulan los peores salarios.

Los sueldos tambi¨¦n fueron mejores que en Espa?a en B¨¦lgica (36,3), Pa¨ªses Bajos (33) o Suecia (26,3). La cifra espa?ola s¨ª supera a la notificada por Portugal (13,7), Grecia (12,6) o Polonia (11,9), y ampliamente a los peores datos. Son los de Letonia (10,7), Ruman¨ªa (10,4) y Bulgaria (8,1).

Aunque los salarios espa?oles sigan lejos de los europeos, al menos s¨ª crecieron al mismo ritmo en 2023. La hora de trabajo se retribuy¨® un 5,2% m¨¢s en Espa?a que en 2022, en l¨ªnea con el incremento europeo (5,3%). Estos datos son coherentes con los que tambi¨¦n aport¨® la semana pasada Eurostat, que analizaban la evoluci¨®n trimestral de las retribuciones. Sobre a base de esa informaci¨®n, los salarios crecieron un 4,2% en Espa?a en el cuarto trimestre de 2023, tomando como referencia el mismo periodo del a?o anterior. Fue una subida mayor a la que notific¨® la Uni¨®n Europea, de un 3,8%. Es la primera vez desde el inicio del hurac¨¢n inflacionista que los salarios espa?oles crecieron a un mayor ritmo interanual que los europeos.

Sin embargo, en una comparaci¨®n m¨¢s amplia, queda claro que las n¨®minas espa?olas crecen a un ritmo muy inferior al de los pa¨ªses vecinos. Si se toma como referencia 2020, los salarios espa?oles solo han crecido un 7,1%, frente al 11,6% de la media de los Veintisiete. En el mismo periodo, la retribuci¨®n de la hora trabajada creci¨® un 9,1% en Francia, un 10,5% en Alemania y un 11,4% en Portugal. Respecto al a?o de la pandemia, el registro espa?ol al menos s¨ª supera al de Italia (2,4%).

Viajando m¨¢s al pasado, el resultado es a¨²n m¨¢s negativo. La hora de trabajo se retribuye en Espa?a un 27,3% m¨¢s que en 2008, mientras que el promedio europeo es del 49,1%. En Alemania, un 45%, en Polonia un 88,9%, en Portugal un 38,4%... Los mayores incrementos se concentran en los pa¨ªses del este, de hasta un 285,7% en Bulgaria.

Menos poder adquisitivo

Los expertos siempre insisten en que carece de sentido hablar de la evoluci¨®n de los salarios sin tomar en cuenta la senda de los precios. Y con esa variable encima de la mesa y en t¨¦rminos anuales, Espa?a no ha recuperado una pizca de ese poder adquisitivo perdido. Los precios empezaron a despegar en 2021, con un aumento del 3,1%, un periodo en el que los salarios recogidos en convenio crecieron un 1,5% (seg¨²n los datos del Ministerio de Trabajo). Ese punto y medio es una minucia en comparaci¨®n con el que se fue al sumidero en 2022, cuando el IPC medio del a?o cerr¨® en un 8,4% y los salarios recogidos en convenio se incrementaron un 3%.

En 2023 los precios se moderaron much¨ªsimo (3,6%) y los salarios crecieron algo m¨¢s (3,5%). Ambas variables pr¨¢cticamente empataron. Esto quiere decir que, en promedio, los trabajadores dejaron de perder poder adquisitivo el a?o pasado, pero no recuperaron lo que se dejaron por el camino en los dos a?os previos.

La moderaci¨®n de la inflaci¨®n en los ¨²ltimos meses (el ¨²ltimo dato es de un 3,2%) tambi¨¦n ha apagado las subidas salariales, que rondan el 2,8% en el inicio del a?o (seg¨²n los datos de Trabajo). Esta cifra no es incompatible con la de Eurostat, ya que los datos del ministerio alcanzan hasta febrero y la de la oficina estad¨ªstica europea se adscribe al a?o pasado. De mantenerse esta din¨¢mica, la buena noticia es que los trabajadores seguir¨¢n sin perder capacidad de compra, pero se aleja la posibilidad de recuperar el poder adquisitivo perdido.

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