Los sindicatos protestan ante las patronales de toda Espa?a por el bloqueo de la negociaci¨®n para reducir la jornada
Sordo y ?lvarez admiten que la entrada en vigor de un posible recorte de jornada m¨¢xima legal tendr¨¢ que aplicarse ya en 2025
Los sindicatos CC OO y UGT consideran que la negociaci¨®n con los empresarios y el Gobierno para dise?ar una ley que reduzca la jornada m¨¢xima de 40 a 37,5 horas semanales est¨¢ en v¨ªa muerta. Y esto es as¨ª, seg¨²n las centrales sindicales, debido a la negativa patronal a que dicho recorte se plasme en una norma legal. Por ello, han protagonizado este jueves concentraciones y protestas ante las sedes patronales de la mayor¨ªa de capitales de provincia, exigiendo a los empresarios que desbloqueen las conversaciones de la mesa de di¨¢logo social que se ocupa de este asunto y que, tras diez meses de reuniones, a¨²n no cuenta con una propuesta en firme y por escrito sobre la que discutir.
En Madrid, m¨¢s de 1.000 delegados de CC OO y UGT capitaneados por los secretarios generales de ambas organizaciones, Unai Sordo y Pepe ?lvarez, respectivamente, han terminado cortando la calle Diego de Le¨®n a la altura del n¨²mero 50, donde se ubica la sede de la gran patronal espa?ola CEOE-Cepyme. Entre gritos en los que reclamaban ¡°?reducci¨®n, reducci¨®n!¡±, han exigido a los dirigentes empresariales que acepten discutir una ley. Hasta ahora, los empresarios consideran que la reducci¨®n de jornada debe realizarse principalmente en el marco de la negociaci¨®n colectiva, como ya sucede. La de este jueves ha sido la primera de otras posibles movilizaciones si la negociaci¨®n no se desatasca, han recordado desde el entorno sindical.
¡°Lo que est¨¢ haciendo CEOE no es negociar, sino dilatar para boicotear cualquier consenso¡±, porque los empresarios entienden que sin el respaldo de un acuerdo social, una ley no saldar¨¢ adelante en el Parlamento, ha explicado Pepe ?lvarez. Por ello, Sordo ha a?adido que a esta negociaci¨®n ¡°le quedan dos telediarios, a lo sumo tres¡±. Si en las pr¨®ximas reuniones de la mesa (la siguiente est¨¢ prevista para el 11 de octubre) ¡°la patronal no resuelve la principal inc¨®gnita¡±, que seg¨²n ha dicho el l¨ªder de CC OO es si se aviene o no a recortar la jornada con una ley, los sindicatos pedir¨¢n al Ejecutivo ¡°que sea valiente¡±. Es decir, que lleve una ley al Parlamento con la reducci¨®n de jornada m¨¢xima que recoge como compromiso el acuerdo de Gobierno de coalici¨®n entre el PSOE y Sumar.
Pero en este punto ambos l¨ªderes sindicales han dejado ver que, junto a la posible decisi¨®n del Ejecutivo de llevar una ley sin acuerdo social, existe otro flanco imprescindible para el recorte de jornada: el voto favorable de los partidos, sobre todo de los socios de Gobierno, sin los cuales no se podr¨ªa aprobar un proyecto de ley.
En este punto, tanto Sordo como ?lvarez han reiterado en varias ocasiones que exigir¨¢n tambi¨¦n a todas las fuerzas pol¨ªticas ¡°que tomen posiciones¡± sobre la reducci¨®n de jornada. ¡°Se est¨¢n acostumbrando a debatir de cuestiones que no importan a los ciudadanos¡±, ha dicho el l¨ªder de UGT. Y en id¨¦ntica l¨ªnea se ha manifestado el m¨¢ximo responsable de CC OO: ¡°Sabemos qu¨¦ opinan los partidos de Venezuela, de M¨¦xico y del sursuncorda, pero no sabemos qu¨¦ opinan de una reducci¨®n de jornada que beneficiar¨ªa a 13 millones de trabajadores¡±, ha indicado.
Los l¨ªderes sindicales han valorado que el PP, a trav¨¦s de su presidente, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, se haya abierto a hablar sobre la reducci¨®n de la jornada de trabajo. De hecho, las centrales ya est¨¢n en conversaciones con los responsables del partido para celebrar un encuentro en el que abordar esta cuesti¨®n. Dicho esto, ambos han coincidido tambi¨¦n en que la propuesta del l¨ªder popular al respecto es ¡°confusa¡± cuanto menos, ya que se centra m¨¢s en la ordenaci¨®n del tiempo de trabajo que en su reducci¨®n legal.
En este sentido, Sordo y ?lvarez tambi¨¦n han insistido en que junto al recorte de la jornada, los sindicatos no renunciar¨¢n a la parte de la negociaci¨®n en la que el control horario sea obligatoriamente digital, para que la Inspecci¨®n de Trabajo tenga acceso remoto a estos registros de todas las empresas. Esta exigencia tambi¨¦n ha sido rechazada en mayor o menor medida por los empresarios a lo largo de las conversaciones mantenidas en el proceso.
El problema de los plazos
En cualquier caso, ambos l¨ªderes sindicales han reconocido que las conversaciones est¨¢n muy retrasadas y, con toda seguridad, se incumplir¨¢ el compromiso recogido en el acuerdo de Gobierno de reducir la jornada m¨¢xima legal de 40 a 38,5 horas semanales en 2024 y a 37,5 horas en 2025. ¡°Habr¨¢ recorte de la jornada, si no es este a?o, ser¨¢ el que viene¡± ha dicho Sordo en La Sexta tras la manifestaci¨®n. Mientras que ?lvarez ha admitido que ¡°es dif¨ªcil¡± que dicho recorte arranque ya en 2024 ¡°porque estamos en septiembre¡±. Pero el pr¨®ximo a?o ¡°se recortar¨¢ la jornada s¨ª o s¨ª¡±, ha indicado en la misma cadena el l¨ªder de UGT.
Con esta precisi¨®n, ambos l¨ªderes sindicales se refer¨ªan impl¨ªcitamente a la confusi¨®n generada tras la ¨²ltima reuni¨®n de la mesa de negociaci¨®n, cuando se conoci¨® que el retraso en la aplicaci¨®n de esta reducci¨®n de la jornada pod¨ªa ser una baza del Ministerio de Trabajo para atraer a los empresarios al acuerdo, algo que posteriormente negaron taxativamente desde este departamento. No obstante, otras partes de la negociaci¨®n siguen manteniendo que s¨ª se baraj¨® esa posibilidad, ¡°por cuestiones obvias, ya que est¨¢ a punto de acabarse el a?o sin visos siquiera de acuerdo¡±, han se?alado fuentes de la negociaci¨®n.
En cualquier caso, ?lvarez ha dicho si la estrategia de dilaci¨®n de la que acusan los sindicatos a la patronal contin¨²a, ¡°lo razonable ser¨ªa levantar la mesa¡± pero acto seguido ha dicho que las centrales ¡°no se van a levantar, ni cerrar un plazo¡± para que eso no pueda usarse de excusa por nadie para que la negociaci¨®n salte por los aires.
La concentraci¨®n de este jueves en Madrid no ha estado exenta de pol¨¦mica desde su inicio, ya que pese a que las organizaciones sindicales ten¨ªan el permiso de la Delegaci¨®n del Gobierno para manifestarse en la acera opuesta a la entrada de la sede patronal, a las 9.00 de la ma?ana el Ayuntamiento (gobernado por el PP) ha modificado ese permiso obligando a que el estrado de los discursos se ubicara en la acera contraria y, adem¨¢s, ha prohibido el uso de megafon¨ªa, una prohibici¨®n que los sindicatos no han cumplido.
Igualmente, al final de la concentraci¨®n y debido a que el consistorio madrile?o ha obligado a dividir la concentraci¨®n en dos aceras opuestas, los manifestantes han terminado por invadir la cazada y cortar la calle Diego de Le¨®n, una importante arteria de la capital. Fuentes sindicales, han culpado al Ayuntamiento de Madrid de haber provocado esta situaci¨®n con el ¨²nico objetivo de que los sindicatos sean multados por ello.
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