Espa?a rechaza la propuesta de Orb¨¢n sobre la directiva de pr¨¢cticas laborales

Espa?a va a mostrar su rechazo frontal a la propuesta de la presidencia h¨²ngara del Consejo de la Uni¨®n Europea (UE) para la directiva de pr¨¢cticas laborales en la reuni¨®n de ministros de Trabajo que se celebra este lunes. Adem¨¢s, la vicepresidenta segunda del Gobierno espa?ol, Yolanda D¨ªaz, va a tratar de bloquear la iniciativa del Gobierno del ultraconservador populista Viktor Orb¨¢n reuniendo un grupo m¨ªnimo de pa¨ªses que impidan que se alcance la fumata blanca en el Consejo. Defienden que el texto que promueven los h¨²ngaros para negociar con el Parlamento Europeo la redacci¨®n definitiva de la directiva fuerza ¡°una peor calidad de las condiciones laborales de las personas en pr¨¢cticas con contrato de trabajo¡±, seg¨²n fuentes del Ministerio de Trabajo espa?ol.

Para frenar este lunes la posici¨®n de Hungr¨ªa, D¨ªaz necesita que al menos otros tres Estados rechacen la propuesta. Si al final cuatro pa¨ªses votan que no, dar¨¢ igual que Budapest logre la mayor¨ªa cualificada en el Consejo (el voto afirmativo del 55% de los Estados que representen al menos el 65% de la poblaci¨®n de la UE) porque se habr¨¢ armado lo que se llama una minor¨ªa de bloqueo.

La Comisi¨®n Europea present¨® en marzo de este a?o una directiva ¡°para la mejora y control del cumplimiento de los trabajadores en pr¨¢cticas¡±. Despu¨¦s llegaron las elecciones europeas y ahora el Parlamento y el Consejo est¨¢n tratando de fijar su posici¨®n, cada uno por su lado, para despu¨¦s pasar a negociar entre ambos colegisladores comunitarios la versi¨®n definitiva del texto legal, que posteriormente deber¨¢ trasponerse a la legislaci¨®n estatal. La directiva planteada por el Ejecutivo de la UE pretende, al menos, fijar un suelo legal para distinguir con m¨¢s claridad las pr¨¢cticas formativas de las relaciones laborales formales. Las competencias comunitarias en regulaci¨®n laboral son escasas, su capacidad de aprobar directivas y reglamentos en este campo est¨¢ muy limitada, de ah¨ª que en el tema de los becarios, por ejemplo, la directiva propuesta haga, m¨¢s bien, una definici¨®n de qu¨¦ no son las pr¨¢cticas para becarios.

Para Trabajo, lo que ha puesto sobre la mesa Hungr¨ªa, que preside el Consejo de la UE durante la segunda mitad de este a?o, supone ¡°pasos atr¨¢s¡± y desvirtuar el objetivo final de la directiva que, a solicitud de la Euroc¨¢mara, buscaba una regulaci¨®n para unas pr¨¢cticas con m¨¢s calidad. ¡°El objetivo inicial se ha diluido y no acaba de ser una relaci¨®n laboral con una formaci¨®n. No se tiene en cuenta calidad, horas o tipo de formaci¨®n, a diferencia de lo que ocurre en Espa?a, que en el denominado Estatuto del Becario regul¨® estos aspectos¡±, se?alan en el ministerio de D¨ªaz.

Trabajo conf¨ªa en lograr el respaldo de otros pa¨ªses para que la propuesta h¨²ngara no avance. Si tiene ¨¦xito, lo m¨¢s probable es que sea Polonia, el siguiente Estado que asume la presidencia semestral del Consejo de la UE, el que tenga que hacerse cargo del expediente y de buscar una posici¨®n com¨²n entre las capitales para llegar a la negociaci¨®n con el Parlamento.

Lo que busca Espa?a, seg¨²n apuntan en Trabajo, es que no se diluyan aspectos como los incluidos en la legaci¨®n nacional, como que estos contratos formativos solo puedan celebrarse cuando hay unos estudios oficiales detr¨¢s, y cuando obedecen a un plan de estudios en el que se incluye una tutor¨ªa sobre el trabajador en pr¨¢cticas.

Concluye D¨ªaz que con la propuesta de Orb¨¢n los trabajadores contratados para hacer pr¨¢cticas laborales ¡°pueden sustituir a personas trabajadoras a trav¨¦s de una regulaci¨®n clara, que adem¨¢s permita actuar a las inspecciones de trabajo en este ¨¢rea¡± y el objetivo es evitarlo.

No es esta la primera vez que D¨ªaz choca con una de las propuestas de la presidencia del Consejo de la UE. La ministra de Trabajo espa?ola ya fren¨® hace un par de a?os la posici¨®n que plante¨® la Rep¨²blica Checa, entonces al frente del Consejo, sobre la propuesta de directiva de los trabajadores de plataformas digitales. Finalmente, se arm¨® una posici¨®n acerca de la que Espa?a mantuvo una postura cr¨ªtica. Al final le toc¨® negociar la norma con el Parlamento Europeo, ya que se cerr¨® a finales de 2023, cuando era el Gobierno espa?ol quien presid¨ªa el semestre.