Una ¡®Renaulition¡¯ verde y digital para subir en Bolsa
Luca de Meo conf¨ªa en que la apuesta por el coche el¨¦ctrico y la tecnolog¨ªa devuelva el atractivo a Renault entre los inversores
La industria de la automoci¨®n entra de lleno en una nueva era. Y lo hace a toda velocidad. Ni m¨¢s ni menos que la imprimida por las revoluciones verde y digital. El coche de un futuro que ya no resulta tan lejano toma forma: no emitir¨¢ di¨®xido de carbono, su valor se concentrar¨¢ en su oferta tecnol¨®gica y ser¨¢ necesariamente m¨¢s seguro. Renault enfila ya ese camino con la puesta de largo esta semana en Par¨ªs de su nuevo Sc¨¦nic Vision, con el que la marca f...
La industria de la automoci¨®n entra de lleno en una nueva era. Y lo hace a toda velocidad. Ni m¨¢s ni menos que la imprimida por las revoluciones verde y digital. El coche de un futuro que ya no resulta tan lejano toma forma: no emitir¨¢ di¨®xido de carbono, su valor se concentrar¨¢ en su oferta tecnol¨®gica y ser¨¢ necesariamente m¨¢s seguro. Renault enfila ya ese camino con la puesta de largo esta semana en Par¨ªs de su nuevo Sc¨¦nic Vision, con el que la marca francesa apuesta por el hidr¨®geno para llegar a sus objetivos de descarbonizaci¨®n. Tras la venta de todos sus activos en Rusia, el grupo franc¨¦s quiere centrarse en el despliegue de su plan estrat¨¦gico, que prev¨¦ hacer de la transformaci¨®n verde una de las bazas que deben llevarle a remontar con creces el valor accionarial perdido por el impacto de la guerra en Ucrania.
El director general de Renault, Luca de Meo, pudo sacar pecho a comienzos de a?o al rescatar al grupo de los n¨²meros rojos y, pese a la crisis de los semiconductores, cerrar 2021 con un beneficio de 888 millones de euros. Solo un a?o antes, el grupo hab¨ªa acabado con un r¨¦cord de p¨¦rdidas de 8.000 millones. Sin embargo, 2022 no arranc¨® del mejor modo. La guerra en Ucrania supuso que las participaciones de la compa?¨ªa se despe?asen m¨¢s de un 40% por la exposici¨®n al mercado ruso. Esta semana, el consejo de administraci¨®n del grupo ha decidido deshacerse de todos sus activos en Rusia por un precio simb¨®lico.
De Meo afirma que la decisi¨®n ¡°no fue f¨¢cil¡±, sobre todo por sus 45.000 trabajadores en este mercado. Sin embargo, las sanciones hac¨ªan imposible mantener las operaciones. Y aunque la guerra termine pronto, todo indica que Occidente no levantar¨¢ esos castigos tan r¨¢pidamente. De cualquier modo, el l¨ªder de Renault s¨ª cree que la compa?¨ªa est¨¢ ¡°extremadamente infravalorada¡± por los mercados. Algo que, seg¨²n dice, no le preocupa de inmediato, al menos hasta 2025. Pero s¨ª a largo plazo, puesto que ir¨¢ requiriendo de financiaci¨®n para afrontar todas las transformaciones en marcha. Por ello, dice haber asumido como reto convertir a Renault en un grupo m¨¢s ¡°atractivo¡± para que los inversores tambi¨¦n apuesten por su revoluci¨®n, bautizada como Renaulition.
¡°Construimos nuestra estrategia sobre tres elementos. Uno es la inclusi¨®n, otro es el medio ambiente y el tercero es la seguridad¡±, afirm¨® De Meo en un encuentro con periodistas con motivo de la presentaci¨®n del nuevo Sc¨¦nic Vision en el marco del congreso parisino ChangeNOW, al que fue invitado EL PA?S. La sostenibilidad es, sin duda, el gran eje que la empresa exhibe en el sal¨®n. La compa?¨ªa se ha propuesto reducir a cero las emisiones de CO2 en Europa en 2040 y hacerlo en todo el mundo en 2050. Este coche familiar totalmente el¨¦ctrico es un primer salto. Seg¨²n explica el vicepresidente de Dise?o de la compa?¨ªa, Gilles Vidal, incorpora alrededor de un 70% de materiales reciclados y el 95% del modelo es reciclable.
En esa direcci¨®n se trabaja a destajo en la llamada Refactory de Flins, cerca de Par¨ªs. Ese centro, inaugurado en 1952, dio a luz emblem¨¢ticos modelos como el Renault 4, el Renault 5, el Dauphine o el Clio. Ahora cuenta con 2.600 trabajadores que se dedican a la econom¨ªa circular dentro de la movilidad. Entre otras actividades, en la factor¨ªa se lleva a cabo el reacondicionamiento de veh¨ªculos usados para reincorporarlos al mercado, el tratamiento de bater¨ªas para darles una segunda vida, el reciclaje, la innovaci¨®n o los sistemas para usar hidr¨®geno, que se ha convertido en una de las grandes apuestas de la Uni¨®n Europea. Renault planea llevar ese modelo de f¨¢brica a otros pa¨ªses, entre ellos, Espa?a. La planta de Sevilla albergar¨¢ a finales de a?o este proyecto.
Otra clave de la transformaci¨®n est¨¢ en la tecnolog¨ªa y, en concreto, el software, que la compa?¨ªa calcula que supondr¨¢ el 60% del valor de los autom¨®viles en 2030. Se trata, por ejemplo, de desplegar desde sistemas para reducir la accidentalidad, como el frenazo autom¨¢tico cuando hay un obst¨¢culo o la minoraci¨®n de la velocidad en funci¨®n de la v¨ªa y el tr¨¢fico. O de la disposici¨®n de mejores sistemas de gu¨ªa o de m¨¢s aplicaciones a bordo. Poco tiene que ver ese producto con el que Renault fabricaba hasta hace pocos a?os. ¡°Jugamos un deporte diferente. No se juega f¨²tbol y f¨²tbol americano de la misma manera¡±, a?ade Luca de Meo.
Gesti¨®n de datos
Todo ese plan que ha puesto en marcha Renault requiere una exhaustiva gesti¨®n de datos. Desmenuzarlos, estudiarlos y cruzarlos permite tanto conocer mejor al conductor como el entorno. Y ah¨ª Renault se ha hecho la misma reflexi¨®n que ¡ªa instancias de Francia y Alemania¡ª se ha planteado en Bruselas: solo el 4% de los datos generados en el mundo occidental est¨¢n en manos europeas, mientras que el 92% est¨¢n en la nube de Estados Unidos. Y esa es una de las razones que han llevado al grupo a lanzar el proyecto Software R¨¦publique, que reivindica precisamente esa ¡°soberan¨ªa europea¡± de los datos. Se trata de una alianza entre empresas francesas punteras para desarrollar software orientado a la movilidad. Adem¨¢s de Renault, est¨¢n Atos, Dassault Systemes, Orange, ST o Thales.
De Meo explica que, cuando lleg¨® al cargo en 2020, se plante¨® esa plataforma como una f¨®rmula para fortalecer las relaciones de la compa?¨ªa con las principales compa?¨ªas del ecosistema y la posici¨®n del grupo en el entorno empresarial franc¨¦s. ¡°Francia es un pa¨ªs cuya cadena de valor es muy profunda: hay compa?¨ªas de defensa, tecnol¨®gicas¡ As¨ª que era obvia la oportunidad de crear un enfoque horizontal entre compa?¨ªas y crear una conexi¨®n¡±, sostiene De Meo. El primer ejecutivo del grupo franc¨¦s no descarta ahora dar entrada a otros grupos europeos para integrar a empresas de sectores como el energ¨¦tico.
El futuro de Nissan
Los mercados especulan ahora con la posibilidad de que Renault pueda acabar desprendiéndose del 43,5% de las acciones que tiene de en el fabricante japonés Nissan. Luca De Meo, el director general de la marca del rombo, zajó ante la prensa esta semana cualquier rumor: ni habrá una venta de esa participación ni tampoco se producirá la fusión por la que los mercados han abogado en algunos momentos. “Ese asunto ya no está en la mesa. Creo que ya no tiene sentido”, añadió De Meo. El primer ejecutivo del grupo francés se ha propuesto rebajar tensiones entre los dos grupos y reconstruir la alianza. Y centrarse en lo que aporta rentabilidad al grupo. “Mi prioridad es hacer una compañía competitiva, probablemente la número uno”, remachó.