Sri Lanka: el canario en la mina que avisa de lo que se viene encima de los pa¨ªses emergentes

Dirigir el Ministerio de Econom¨ªa de Sri Lanka podr¨ªa ser ahora mismo el empleo menos codiciado del mundo. El Gobierno de la isla incumpli¨® un pago de deuda p¨²blica por 12.000 millones de d¨®lares en abril, registr¨® una inflaci¨®n interanual del 54,6% en junio, y sufre apagones constantes por la falta de divisas para importar hidrocarburos. Por si no era suficiente, la ¨²ltima cosecha de arroz se ha derrumbado este a?o tras una inoportuna prohibici¨®n (luego levantada) del uso de fertilizantes qu¨ªmicos.

Una combinaci¨®n de carencias que preocupa a Unicef por el riesgo para la nutrici¨®n de los ni?os ceilandeses. Seg¨²n estimaciones del organismo de las Naciones Unidas para la infancia, en lo que va de 2022 dos de cada tres familias se han visto obligadas a reducir su consumo de alimentos en este pa¨ªs de 22 millones de habitantes donde escasea el gas para cocinar. Una crisis econ¨®mica que inevitablemente se ha hecho pol¨ªtica: tras una primera dimisi¨®n en bloque de ministros en abril (entre ellos, el responsable de Econom¨ªa), y en medio de protestas multitudinarias por todo el pa¨ªs, su presidente Gotabaya Rajapaksa anunci¨® el pasado domingo que ¨¦l tambi¨¦n se marchaba.

Seg¨²n Mick Moore, del centro de estudios brit¨¢nico International Centre for Tax and Development, uno de los principales factores por los que la econom¨ªa de Sri Lanka est¨¢ hoy contra las cuerdas es la gigantesca reducci¨®n de impuestos aprobada en noviembre de 2019 por Rajapaksa, su hermano menor Basil Rajapaksa (era el ministro de Econom¨ªa), y su hermano mayor Mahinda Rajapaksa (era el primer ministro). ¡°Cuando Sri Lanka decidi¨® recortar en un 30% los impuestos ya era un pa¨ªs de muy baja fiscalidad, recaudaba aproximadamente el 10% del PIB, cuando lo normal para una econom¨ªa de ese tama?o es el 20%¡±, dice el experto del centro de estudios brit¨¢nico.

De esos d¨ªas Moore recuerda la inmediata reacci¨®n a la baja del mercado de bonos, que ¡°entendi¨® que no se podr¨ªa cumplir con los pr¨¦stamos¡±. ¡°Cuando a los pocos meses lleg¨® la pandemia, el Gobierno pod¨ªa haber recuperado el nivel de imposici¨®n anterior, reducido las inversiones p¨²blicas, o admitido la imposibilidad de pagar sus deudas, pero no hizo ninguna de las tres¡±, dice Moore, que achaca la mala gesti¨®n a la incompetencia y soberbia de los Rajapaksa tras d¨¦cadas reparti¨¦ndose los altos cargos del Gobierno.

Entre la ca¨ªda de turistas por la covid, una recaudaci¨®n insuficiente, y el encarecimiento de las materias primas tras la invasi¨®n rusa a Ucrania, las reservas de libre disponibilidad de Sri Lanka se desplomaron desde 7.600 millones de d¨®lares a finales de 2019 hasta unos insignificantes 50 millones en mayo de 2022 (el Estado a¨²n debe 50.000 millones de d¨®lares).

Seg¨²n Ahilan Kadirgamar, especialista en econom¨ªa pol¨ªtica de la ceilandesa Universidad de Jaffna, en los ¨²ltimos cap¨ªtulos de la crisis tambi¨¦n hay responsabilidad del FMI. ¡°La crisis se ha visto agravada por una serie de recomendaciones informales que hizo este organismo antes de llegar a un acuerdo de rescate, como la de no intervenir en el mercado de tipos de cambio, lo que dispar¨® el precio del d¨®lar de 200 a 360 rupias, con el consecuente traspaso a los precios de los consumidores¡±, dice.

Kadirgamar tambi¨¦n atribuye al FMI la decisi¨®n del banco central ceiland¨¦s de aumentar el tipo de inter¨¦s de referencia, estrangulando a peque?as empresas con costes de financiaci¨®n que pasaban del 20% al 30%, as¨ª como el corte abrupto del gasto p¨²blico en construcci¨®n, ¡°la ¨²nica manera, en una econom¨ªa informal, de obtener ingresos para los que tienen trabajos estacionales en el campo¡±. Seg¨²n Kadirgamar, una subida de intereses no ten¨ªa ning¨²n sentido con una inflaci¨®n ¡°importada¡± y cuando nadie espera la llegada de capitales extranjeros a un pa¨ªs en crisis. En su opini¨®n, una crisis como la actual exige que el Gobierno se atribuya funciones de emergencia para acopiar materias primas con las que garantizar el funcionamiento de sectores exportadores, como la producci¨®n de ropa y de t¨¦, y para distribuir la comida y los combustibles esenciales para la supervivencia de los ciudadanos. ¡°En los a?os 70 hab¨ªa un sistema de distribuci¨®n p¨²blica que ya no existe pero Sri Lanka tiene muchas cooperativas que podr¨ªan ayudar haciendo llegar estos productos b¨¢sicos a los que, de otra manera, las personas m¨¢s vulnerables no van a acceder¡±.

El papel del FMI

Moore no est¨¢ de acuerdo con responsabilizar al organismo multilateral. En primer lugar, porque los programas del FMI no se presentan como un remedio general para la econom¨ªa sino como una soluci¨®n de emergencia ante una escasez grave. En segundo t¨¦rmino, porque el paquete de ayuda de 3.000 millones de d¨®lares que se est¨¢ negociando ¡°es muy diferente al tipo de programa que desde la izquierda se suele atribuir al FMI¡±. ¡°Adem¨¢s de exigir m¨¢s recaudaci¨®n impositiva, incluye pedirle al Gobierno la implementaci¨®n de un sistema de subsidios para proteger a los m¨¢s pobres y mejorar la calidad del gasto p¨²blico pero no recortarlo¡±, argumenta.

Pero antes de llegar a ese acuerdo con el FMI, que se producir¨ªa con la presentaci¨®n de un plan de reestructuraci¨®n de deuda a finales de agosto (el objetivo es una reducci¨®n de un 33%, como m¨ªnimo), hay que resolver un obst¨¢culo llamado China. Pek¨ªn acumulaba en abril de 2021 un 10% de la deuda en moneda extranjera de Sri Lanka y, por el momento, no ha dado signos de aceptar ninguna quita. Algo que, seg¨²n el premio Nobel de Econom¨ªa de 2019, Abhijit Banerjee, podr¨ªa explicar la tardanza del FMI en resolver la crisis. En su opini¨®n, entra dentro de lo posible que el FMI no quiera recompensar con su dinero la pol¨ªtica china de inundar a Sri Lanka con pr¨¦stamos que ning¨²n otro pa¨ªs le quer¨ªa dar para obras de infraestructura. ¡°Tengo la impresi¨®n de que el FMI podr¨ªa estar mandando un mensaje a otros pa¨ªses que se han endeudado con China, haciendo esto doloroso para que otros sepan que, aunque terminen siendo rescatados, el gobierno puede caer¡±, dice Banerjee.