La inteligencia artificial choca con los directivos

La inteligencia artificial [IA] se ha convertido en un eslogan¡±, seg¨²n Dar¨ªo Gil, vicepresidente de IBM y director del laboratorio de investigaci¨®n m¨¢s grande del planeta, IBM Research, con m¨¢s de 3.000 empleados. Todo el mundo lo utiliza, pero muy pocos saben realmente lo que es. ¡°Cualquier soft?ware es tildado de IA¡±, a?ade. Aunque data de 1956, las grandes redes neuronales que hacen a los ordenadores capaces de pensar y aprender a reaccionar en funci¨®n de los datos procesados no tuvieron ¨¦xito hasta 2012. En la actualidad, pese a su notable impacto sobre la productividad de las compa?¨ªas, ¡°la principal barrera para su expansi¨®n son los directivos, que la tienen que entender¡±, explicaba este ejecutivo durante la Reuni¨®n Anual de Antiguos Alumnos de ?IESE, celebrada la semana pasada en M¨²nich. ¡°E integrarla en el d¨ªa a d¨ªa del trabajo, lo que requiere cambiar los procesos y nuestra forma de trabajar¡±.

¡°Una amenaza para la inteligencia artificial es la falta de entendimiento por parte de los l¨ªderes sobre c¨®mo utilizarla para resolver los problemas de sus empresas y hacerlas m¨¢s competitivas¡±, coincid¨ªa Mar¨ªa Marced, presidenta de TSMC Europa, el mayor suministrador de chips del mundo. ¡°En Espa?a, los ministerios y las autoridades locales han le¨ªdo a McKinsey y conocen algunas palabras como algoritmos verdes, que nos piden. Pero yo no s¨¦ qu¨¦ son los algoritmos verdes¡±, ilustraba jocosamente Inma Mart¨ªnez, experta en digitalizaci¨®n y asesora en materia de IA a gobiernos como el brit¨¢nico, el espa?ol o el europeo. ¡°Necesitamos ayudar a los l¨ªderes para que usen esta tecnolog¨ªa¡±. ¡°Y explicarles la seguridad de los modelos de IA¡±, agregaba Gil.

La falta de conocimiento de empresas y gobiernos es el motivo por el que la cita de los antiguos alumnos de IESE, que ha congregado a casi 2.000 personas y a un grupo de periodistas invitados por la escuela en la ciudad alemana y virtualmente, ha versado sobre la inteligencia artificial, indica Franz Heukamp, su director general. ¡°Los ejecutivos tienen que entender las nuevas tecnolog¨ªas, sus posibles problemas y c¨®mo solventarlos. El reto es conseguir que estos conocimientos se trasladen a los modelos de negocio¡±. Estos algoritmos ayudan a reducir los costes empresariales un 20% y, de acuerdo con el 27% de los directivos consultados por McKinsey, su aplicaci¨®n genera al menos un 5% de los beneficios corporativos.

La expansi¨®n de la IA se ha acelerado. Si hace apenas unos a?os eran el 10% o 15% de las compa?¨ªas mundiales las que la integraban en sus proyectos, hoy son m¨¢s del 50%, seg¨²n Gil. Y la crisis a la que nos enfrentamos no parece que vaya a detener el proceso: ¡°Para poder hacer m¨¢s por menos, el ¨²nico camino es la adopci¨®n de tecnolog¨ªa. Es una fuerza tan potente que la palanca de la inversi¨®n no se puede frenar en un contexto de crisis¡±. Coincide con ¨¦l Alejandro Beltr¨¢n, presidente de McKinsey en Espa?a y Portugal: ¡°Se est¨¢ invirtiendo m¨¢s que antes, la crisis no est¨¢ afectando. Los sectores que m¨¢s dinero est¨¢n desembolsando son el de telecomunicaciones, tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y la banca, sobre todo por los riesgos y el compliance [cumplimiento normativo]¡±.

El uso de los datos inquieta a ciudadanos, empresarios y organismos p¨²blicos. Fiascos como el de Facebook Analytics o el hecho de que Elon Musk se plantee renunciar a la compra de Twitter por sus presuntos errores no han hecho m¨¢s que elevar las reticencias. ¡°Los gobiernos quieren invertir en IA y est¨¢n poniendo presupuestos sobre la mesa, caso del Reino Unido, pero tenemos que asegurar la regulaci¨®n para proteger a las personas¡±, dice Mart¨ªnez.

Los gobiernos se dieron cuenta del vac¨ªo regulatorio existente cuando sus empresas comenzaron a usar los algoritmos y desde hace poco m¨¢s de cinco a?os empezaron a preocuparse por este tema, explica la asesora gubernamental. El Gobierno chino no tiene restricciones al desarrollo de esta tecnolog¨ªa y usa el reconocimiento facial gen¨¦rico, que en pa¨ªses europeos est¨¢ prohibido porque atenta contra las libertades civiles. ¡°Estados Unidos no se centra en proteger a los ciudadanos con sus leyes, pues est¨¢ dominado por el lobby empresarial¡±, aprecia Mart¨ªnez. De hecho, Facebook ten¨ªa tres fugas de datos al a?o que afectaban a 300 millones de personas. ¡°La regulaci¨®n tiene un papel que desempe?ar¡±, afirma. ¡°Si hablamos de desplegar leyes, los gobiernos tienen que unirse a las empresas para saber qu¨¦ hacer¡±, se?ala Marced, una opini¨®n compartida por Gil, cuando el 80% de la tecnolog¨ªa est¨¢ en manos de la industria privada. ¡°Las alianzas geopol¨ªticas del futuro van a tener car¨¢cter tecnol¨®gico¡±, prev¨¦.

Geopol¨ªtica

Pero el ejecutivo de IBM cree que estamos impulsando el ¡°factor miedo¡± en torno a la IA, lo que podr¨ªa terminar limitando su desarrollo. Por primera vez, la tecnolog¨ªa se ha elevado al nivel de la geopol¨ªtica, con la UE y Estados Unidos redactando una Declaraci¨®n de Derechos de IA para guiar y regular el campo, dice. Algo similar ocurri¨® con la reciente ley de chips en EE UU, al tratar la fabricaci¨®n de chips como un problema de seguridad nacional, despu¨¦s de la escasez durante la covid que detuvo la fabricaci¨®n de autom¨®viles, ordenadores, tel¨¦fonos¡­, aprecia Gil, que aboga por que Europa no limite la capacidad de innovaci¨®n con sus leyes. ¡°La regulaci¨®n europea no fomenta la innovaci¨®n y la disrupci¨®n como ocurre en Estados Unidos, est¨¢ enfocada a la protecci¨®n de los derechos¡±, coincide Beltr¨¢n.

En cualquier caso, ¡°la IA es la tecnolog¨ªa m¨¢s importante de nuestra ¨¦poca. Influir¨¢ mucho en el futuro¡±, destaca Florian Deter, director general de Microsoft en Alemania. Para los l¨ªderes, gran parte del desaf¨ªo en los pr¨®ximos a?os ser¨¢ construir un puente entre los aspectos t¨¦cnicos y comerciales, y facilitar la confianza con un p¨²blico que sospecha para qu¨¦ se utilizan sus datos, seg¨²n Philippe Sahli, consejero delegado de la start-up Yokoy.