El secreto del negocio de Casa Tarradellas est¨¢ en las pizzas

El rey de la pizza fresca y el fuet en Espa?a es una empresa esquiva a comunicar sus tripas contables. Su balance termina en el Registro Mercantil por obligaci¨®n legal, pero apenas traspasa la frontera de la prensa econ¨®mica o especializada. Casa Tarradellas es, sin embargo, un grupo de alimentaci¨®n con una potente marca cocinada a fuego lento que supera los 1.000 millones de facturaci¨®n (2021) al calor de su acuerdo con Mercadona, para quien fabrica fuets y pizzas, y al contrario que otras grandes ense?as, se mantiene en manos de la familia fundadora, guiada por Josep Terradellas Arcarons. Al¨¦rgico a los medios de comunicaci¨®n, la ¨²nica intervenci¨®n que se le recuerda en un foro p¨²blico fue hace 15 a?os, cuando dijo aquello de que produc¨ªan ¡°un mill¨®n de chuminadas¡±, como ¨¦l las llama, cosas que cuestan poco dinero pero que gracias a la innovaci¨®n consigue que sean el motor de todo un complejo industrial.

Nacido en una familia de agricultores, junto a su esposa, Anna Falgueras, mont¨® en 1976 un peque?o restaurante de carretera desde el que vend¨ªan los productos de su granja familiar. Terradellas, un hombre que siempre ha preferido la f¨¢brica a los focos, es una especie de Amancio Ortega del porcino, un gran empresario hecho a s¨ª mismo que tambi¨¦n ha incorporado a sus hijos (Anna, N¨²ria y Josep) al consejo de administraci¨®n donde su esposa es vicepresidenta. Trabajador desde los 13 a?os, no se quiso conformar con ser un pag¨¨s. En otra de sus contadas intervenciones mencion¨® que ¡°para llegar a Roma hay distintos caminos¡±, pero la mayor¨ªa pasan por la concentraci¨®n, por tener ¡°los huevos en la misma cesta y contarlos cada d¨ªa¡±, siempre muy pendiente de perfeccionar los productos que vende para sacarles el m¨¢ximo partido.

Contablemente Casa Tarradellas respira prudencia: en el ¨²ltimo lustro ha conseguido un moderado nivel de beneficios, de poco m¨¢s de un 2% sobre la facturaci¨®n total, que ha destinado a engordar la hucha de reservas voluntarias. No hay reparto de dividendos entre la saga familiar propietaria de las 20.000 acciones que posee la empresa, y s¨ª unos nutridos fondos propios, de 425 millones, de los que casi 400 proceden de ese reparto anual que se auto?asigna la compa?¨ªa. Y habr¨¢ m¨¢s: ¡°Entre los objetivos de la sociedad, debemos destacar que los beneficios que se obtengan en el futuro se destinar¨¢n a capitalizar la empresa y a la realizaci¨®n de nuevas inversiones que aseguren la competitividad a largo plazo¡±, se?ala la sociedad en su ¨²ltimo balance. Con ello, de paso, consigue deducciones fiscales rebajando su base imponible hasta un 10% en el impuesto de Sociedades.

La f¨¢brica central de Tarradellas est¨¢ en Gurb, en la comarca de Osona (Barcelona), en la Plana de Vic, donde desde hace siglos se cultivan cereales. Adem¨¢s de su acuerdo con el rey de la distribuci¨®n espa?ola, en 2020 lleg¨® a un pacto con Nestl¨¦ para comprar por 400 millones una participaci¨®n mayoritaria en las empresas del grupo de charcuter¨ªa y productos c¨¢rnicos Herta, que desarrollan su actividad en Francia, Alemania, B¨¦lgica y el Reino Unido. Hasta ese momento siempre hab¨ªa sido un grupo que no se sent¨ªa tan c¨®modo fuera de Espa?a como dentro, algo que los analistas del mercado tachaban de debilidad.

En Espa?a y con unos 1.200 empleados, la catalana comercializa desde siempre sus famosos espetecs, una especie de fuets atados por un solo extremo elaborados con cerdos propios, y su otro gran pilar son las pizzas frescas, que introdujeron en 1998 con tal ¨¦xito que ha arrastrado a la competencia a desarrollar un completo arsenal de variantes que nutre los lineales. Las bases redondas de pasta coronada con todo tipo de ingredientes llevan un cuarto de siglo en el mercado y ya forman parte de la cesta de la compra habitual. Varias empresas de an¨¢lisis de mercados apuntan a que ese segmento ha madurado, y la ¨²ltima vuelta de tuerca de este producto est¨¢ en el enfoque premium, de modo que no se distinga de una pizza reci¨¦n hecha.

En esa l¨ªnea van sus ¨²ltimos productos, las pizzas con masa de fermentaci¨®n lenta, de hasta 24 horas, para conseguir una base m¨¢s tierna y ligera. Tambi¨¦n ha presentado una pizza de calabaza y queso de cabra para ciertas dietas vegetarianas.

En cuanto a los productos c¨¢rnicos, el precio del porcino, disparado un 23% en el ¨²ltimo a?o seg¨²n los primeros datos trimestrales de 2023 del Ministerio de Agricultura, seguramente pasar¨¢ factura a los costes de explotaci¨®n de la marca este ejercicio. Aunque, como apunta el experto en el sector c¨¢rnico Josep Pujolr¨¤s, podr¨ªa no ser una subida dram¨¢tica para un productor como Tarradellas, porque los elaboradores consolidados consiguen normalmente cierta estabilidad de precios con sus proveedores, y m¨¢s si tienen granjas propias.

Innovaci¨®n

Cuentan en el sector alimentario que la primera aspiraci¨®n de cualquier fabricante es trabajar para Mercadona, y la segunda, no depender de Mercadona. Soplar y sorber, o convertir el cuadrado en un c¨ªrculo es una de las fortalezas que distingue a Casa Tarradellas, que anualmente invierte monta?as de dinero (32 millones de euros en 2021) en modernizar e introducir innovaciones tecnol¨®gicas en sus plantas, pero que tambi¨¦n utiliza una estructura verticalizada en la que hay desde granjas hasta f¨¢bricas de pienso.

¡°Puede parecer sencillo, pero producir miles de pizzas requiere de unas instalaciones hipertecnificadas que consigan una calidad est¨¢ndar¡±, apunta Pujolr¨¤s. Lo mismo pasa con el proceso de secado de los embutidos. La tecnolog¨ªa ha permitido en el sector reducir tiempos de maduraci¨®n y ganar capacidad de elaboraci¨®n a costes m¨¢s bajos.

La marca que ha industrializado el proceso artesanal tambi¨¦n ha sido capaz de conseguir equilibrar la fabricaci¨®n para Hacendado sin perder su propia personalidad en el resto de los productos. Eso ha provocado que invierta fuertemente en campa?as de marketing, aunque sus presupuestos en esta ¨¢rea no se desglosan en su balance. Su cat¨¢logo de productos, no muy amplio, incorpora alimentos que en su momento se consideraron una disrupci¨®n, como los pat¨¦s en tarros, el beicon troceado, con los loncheados de cerdo frente a las piezas enteras.

Terradellas, sin embargo, no se ha librado de tropiezos, como cuando quiso entrar en el mercado de conservas, pero hasta ahora siempre ha hecho valer su m¨¢xima de que todo lo que hace debe gustar al consumidor: ¡°Como espetec casi todos los d¨ªas y el d¨ªa que no lo encuentre bueno no lo fabricar¨¦ m¨¢s¡±.

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