Ale-hop: as¨ª es la f¨®rmula del ¨¦xito del imperio valenciano del regalo barato

Vicente Grimalt no acababa de verse siguiendo para siempre los pasos de su padre en la era, as¨ª que, despu¨¦s de trabajar con ¨¦l unos a?os tras acabar la escuela a los 12, busc¨® una alternativa al campo. En aquel momento y siendo un adolescente de 17 a?os, encontr¨® un hueco en el almac¨¦n de una empresa en su pueblo natal, el municipio alicantino de Gata de Gorgos. All¨ª comenz¨® un camino que desemboc¨® d¨¦cadas despu¨¦s en un peque?o imperio familiar del regalo: Ale-hop.

Aunque sigue involucrado en el d¨ªa a d¨ªa de la compa?¨ªa, es Dar¨ªo Grimalt, uno de los tres hijos con los que trabaja y consejero de la empresa, el que cuenta su historia. Le atra¨ªa el mundo empresarial y saber hacer cuentas le abri¨® las puertas de la oficina de aquel almac¨¦n. Luego entraron en juego un amigo, una furgoneta y productos artesanales que se hac¨ªan en su localidad, principalmente sombreros mexicanos y capazos. ¡°Se iban por los pueblos, vendiendo¡±, dice Grimalt por videollamada, en la sede central de la compa?¨ªa en Bellreguard, Valencia. Aquella aventura dio paso en 1991 a la apuesta en solitario de su padre.

En una antigua f¨¢brica de juguetes en D¨¦nia, de unos 1.600 metros cuadrados, naci¨® Clave D¨¦nia, SA. En el piso de arriba, las oficinas, y en el de abajo, una tienda, Clave, en la que trabajaba Pepa Monfort, su esposa. ¡°?l ven¨ªa del mundo de la venta al por mayor, pero quer¨ªa hacer la integraci¨®n vertical hacia delante. Quer¨ªa llegar al cliente final porque cre¨ªa que el futuro estaba en eso¡±, comenta el consejero. La apuesta, centrada en muebles, decoraci¨®n, menaje y peque?o regalo, funcion¨® y la vieron como el primer eslab¨®n de una cadena, pero replicarla no era f¨¢cil y requer¨ªa mucha inversi¨®n.

Entonces atendieron al consejo que le dio su padre un a?o de buena cosecha: guardar cuando hay para cuando no haya. ¡°Y mi padre siempre lo ha aplicado a la empresa¡±, dice Grimalt. ¡°Y en ese momento, cuando vio que Clave funcionaba, se dio cuenta de que no ten¨ªa tampoco recursos para ir sin deudas, sin pr¨¦stamos de bancos¡±. Durante 10 a?os siguieron haciendo lo que sab¨ªan, aprendiendo sobre venta al por menor y ahorrando.

Casi reci¨¦n estrenado el nuevo milenio, su hijo mayor termin¨® los estudios en Valencia y fue all¨ª donde se materializ¨® la idea de una tienda m¨¢s peque?a en la que vender los productos de menor tama?o que ten¨ªan mejor salida en Clave. ¡°Abrimos la primera Ale-hop en calle de la Paz¡±, recuerda Grimalt. Fue la primera, pero no la definitiva. De hecho, apunta Grimalt, no funcion¨® muy bien. Les sirvi¨® de laboratorio de pruebas y con la quinta apertura lleg¨® el empuj¨®n definitivo: ¡°La abrimos en Benidorm; aquello fue el ¨¦xito de Ale-hop y cuando nos dimos cuenta del potencial realmente que ten¨ªa¡±. ?La f¨®rmula? Un momento de bonanza econ¨®mica, muy buena ubicaci¨®n, conexi¨®n con el p¨²blico turista, productos originales a precios competitivos y un buen equipo. Actualmente tienen unas 290 tiendas en Espa?a, Portugal, Italia, Croacia y M¨¦xico, el 80% propias y en julio prev¨¦n llegar a los 300 establecimientos.

Sus ventas en 2022 ascendieron a 160 millones de euros, frente a los 100 de 2021 y los 70 de 2020, dos a?os marcados por la pandemia, que los golpe¨® especialmente y redujo su facturaci¨®n de 2019 a la mitad. ¡°Nos pill¨® en un momento donde a¨²n ¨¦ramos peque?itos, tendr¨ªamos unas 40 tiendas, y pudimos maniobrar¡±, dice Grimalt sobre la crisis financiera de 2008. ¡°La que nos pill¨® de pleno y con una estructura m¨¢s grande, con 200 tiendas, fue la del covid. Afect¨® de lleno a nuestro cliente objetivo, que eran turistas tanto nacionales como internacionales¡±.

Siguiendo la l¨ªnea del abuelo Grimalt, cuando llegaron las vacas flacas la empresa ten¨ªa dinero para hacer frente a los cierres y la ca¨ªda de los viajes. Desempolvaron las ideas que estaban en el caj¨®n a la espera de tiempo y pusieron en marcha el Sistema de Gesti¨®n de Almac¨¦n y la internacionalizaci¨®n. Hasta entonces solo contaban con tiendas en Portugal y se estrenaron en M¨¦xico y Croacia con franquicias.

Al inicio de su andadura como empresa hab¨ªan decidido probar este modelo como recurso para crecer, pero tras algunos cierres durante la recesi¨®n, perdi¨® protagonismo. ¡°Estuvimos desde 2008, m¨¢s o menos, sin coger nuevos franquiciados¡±, dice Grimalt. Aunque reactivaron esta opci¨®n con las aperturas internacionales durante la covid-19, siguen dando prioridad a las propias, titularidad bajo la que est¨¢n las dos inauguradas recientemente en Italia.

La pandemia trajo de la mano tambi¨¦n una reorganizaci¨®n de la compa?¨ªa y la creaci¨®n de un comit¨¦ de direcci¨®n. ¡°Nos sirvi¨® para profesionalizar un poco m¨¢s la empresa, trabajar por objetivos¡­ Fue un cambio bastante importante para nosotros¡±, apunta el consejero. En 2022 superaron la facturaci¨®n de 2019, pero con m¨¢s locales. En palabras de Grimalt: ¡°A mismas tiendas no estamos mejor, pero a volumen de empresa s¨ª¡±.

6.000 referencias

En su cat¨¢logo hay tazas, paraguas, juegos, peluches, miniventiladores, libretas, huchas, relojes, carteras, bolsos, gafas de sol y de buceo, abanicos, salvamanteles, cargadores, pistolas de agua¡­ y as¨ª hasta 6.000 referencias, con dise?os propios, que van actualizando cada semana. ¡°Para que la gente no se aburra y para crear ese efecto guau¡±, dice Grimalt, que cuenta que muchos de los usuarios van a las tiendas a descubrir cosas, a distraerse. ¡°Y para eso necesitamos esa renovaci¨®n continua de producto¡±, se?ala.

Una de las patas de su estrategia es, precisamente, la innovaci¨®n y mejora de producto, para lo que han creado un nuevo equipo. ¡°Estamos dando cada vez m¨¢s importancia a qu¨¦ se vende, y d¨®nde y c¨®mo se vende. Tambi¨¦n estamos trabajando en atenci¨®n al cliente¡±, apunta Grimalt. Por otro lado, entre otros aspectos, apuestan por la expansi¨®n internacional ante un panorama nacional ya cubierto y la mejora de todos los departamentos, ¡°ser m¨¢s eficientes porque los costes van subiendo¡±, asegura el consejero. Este a?o la compa?¨ªa, con una plantilla media de 1.600 trabajadores, abrir¨¢ un cuarto centro log¨ªstico.

Sobre las previsiones para este 2023, Grimalt prefiere no adelantar una cifra que no sabe si alcanzar¨¢n, haciendo gala de la cautela de la casa. La misma que los lleva a reunirse una vez al a?o y ver cu¨¢nto les costar¨ªa cerrar la empresa sin dejar nada a deber. ¡°Y con eso vemos si tenemos suficiente tesorer¨ªa para pagarlo todo. En caso de que s¨ª, decimos: ¡®Tiramos pa¡¯lante y hacemos los proyectos¡¯. Pero estamos muy centrados en prepararnos para cualquier temporada de vacas flacas, y m¨¢s despu¨¦s de lo que sufrimos en el covid¡±, asegura.

Se r¨ªe cuando antes de acabar la entrevista cae la pregunta sobre la vaca que da la bienvenida en sus establecimientos. Su padre, cuenta, la vio en una feria, con sus colores corporativos, y fue un flechazo. ¡°Y la gente dec¨ªa: ¡®?Mira, la tienda de la vaca!¡¯, ¡®?ay, qu¨¦ vaca¡±, rememora Grimalt. ¡°Mi padre dec¨ªa: ¡®No se acordar¨¢n de Ale-hop, pero mientras se acuerden de forma positiva, content¨ªsimo¡±.

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