EE UU: abuso del privilegio exorbitante

Una vez m¨¢s, se acerca una fecha cr¨ªtica en el calendario fiscal de Estados Unidos. Si el Congreso no aprueba un aumento en el presupuesto del Gobierno federal antes del 30 de septiembre, el poder ejecutivo se ver¨¢ obligado a implementar un cierre de actividades el 1 de octubre, lo que implicar¨ªa la suspensi¨®n de la gran mayor¨ªa de actividades gubernamentales, excepto las consideradas esenciales, como es el caso de la defensa nacional.

La falta de acuerdos no ser¨ªa tan catastr¨®fica como pudo ser en las negociaciones a principios de este verano, cuando el resultado habr¨ªa sido un impago de la deuda soberana del pa¨ªs, lo que habr¨ªa tenido consecuencias negativas para el sistema financiero global. El cierre parcial del Gobierno tendr¨ªa un efecto perjudicial limitado en la actividad econ¨®mica, pero no desestabilizar¨ªa el sistema financiero. Estados Unidos ya ha experimentado episodios de cierres gubernamentales parciales por la falta de acuerdos pol¨ªticos. Sin embargo, situaciones como esta socavan la credibilidad en torno a la fortaleza de la deuda p¨²blica estadounidense. La ¨²ltima amenaza de no aumentar el techo de endeudamiento signific¨® la reducci¨®n de la calificaci¨®n soberana del pa¨ªs por parte de una de las principales calificadoras del mundo.

Lo m¨¢s probable es que en las pr¨®ximas semanas veamos una soluci¨®n temporal a este problema que implica postergar la decisi¨®n, lo cual resultar¨¢ en episodios en los que la pol¨ªtica fiscal se convierta en objeto de negociaci¨®n pol¨ªtica.

Estados Unidos deber¨ªa modificar su dise?o institucional de tal manera que se elimine el proceso redundante de aprobaci¨®n del techo de deuda. El arreglo actual requiere que el Congreso no s¨®lo apruebe el presupuesto del a?o, tambi¨¦n el endeudamiento necesario para cumplir con dicho presupuesto. Esto puede llevar a situaciones en las que, si no se aprueba el techo de endeudamiento, un Gobierno deba decidir entre incumplir con el presupuesto o con el techo de deuda.

Independientemente de lo anterior, es necesario un proceso de consolidaci¨®n fiscal. C¨¢lculos de la Oficina del Presupuesto del Congreso, un ¨®rgano t¨¦cnico y apartidista, indican que, si se contin¨²a por el mismo camino, la deuda gubernamental, que hoy se ubica en el 97% del PIB, ascender¨¢ al 115% en una d¨¦cada y al 192% en 2053. Esto provocar¨ªa aumentos significativos de las tasas de inter¨¦s, lo que encarecer¨ªa el cr¨¦dito para empresas y hogares, y podr¨ªa poner en entredicho la sostenibilidad de la deuda. Estados Unidos ha podido permitirse una pol¨ªtica fiscal laxa gracias a lo que el economista de Berkeley Barry Eichengreen llama el ¡°privilegio exorbitante¡±: contar con la moneda de reserva a nivel global. Pero si contin¨²a por el mismo camino, podr¨ªa poner en entredicho ese privilegio.

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