Mucho ojo con la estafa de las tiendas clonadas: ya hay cientos de personas atrapadas

Cada vez es m¨¢s complicado mantener a salvo nuestro dinero y no caer en la trampa de las p¨¢ginas web clonadas. En los ¨²ltimos meses han crecido de forma considerable las tiendas falsas que imitan a marcas de reconocido prestigio, como Hoff, Lefties, Abercombrie, Adidas, Asics, Billabong, Converse y una extensa lista de ense?as m¨¢s. Estas p¨¢ginas proliferan en ¨¦pocas de alta demanda comercial y, sobre todo, de descuentos, aunque ¡°es una constante durante todo el a?o¡±, reconocen fuentes financieras. Todas ellas tienen algo en com¨²n y es que suelen promocionar productos a precios muy bajos para atraer a las v¨ªctimas.

Solo en las semanas previas al Black Friday de noviembre se contabilizaron m¨¢s de 200 denuncias a la Polic¨ªa Nacional, aunque el organismo admite en una nota que ¡°existen muchos afectados que, por el valor del perjuicio econ¨®mico ocasionado no dan cuenta de los hechos, lo que impide tener una estimaci¨®n real del n¨²mero de afectados¡±. La Polic¨ªa Nacional ha comunicado que ha bloqueado algunas de estas p¨¢ginas, aunque el peligro sigue ah¨ª, sobre todo en los anuncios que los delincuentes cuelan en redes sociales como Facebook e Instagram, que redirigen al usuario a la web fraudulenta en un solo clic.

Loe estafadores copian el dise?o y la interfaz de las tiendas leg¨ªtimas. Utilizan nombres muy similares a los de la marca original, introduciendo o eliminando un car¨¢cter apenas imperceptible, o registrando la p¨¢gina bajo dominios con terminaci¨®n .shop. ¡°Realic¨¦ dos pedidos en la web Leftiess.shop creyendo que era la web original¡­¡±, alerta una de las afectadas en el portal de la Organizaci¨®n de Consumidores y Usuarios (OCU). Adem¨¢s, se sirven de certificados SSL que cifran los datos introducidos y utilizan el protocolo HTTPS, que a su vez muestra un candado en la barra de navegaci¨®n, que hasta ahora se daba como indicador de sitio de confianza.

La ayuda de la inteligencia artificial

¡°La pandemia aceler¨® la adopci¨®n del comercio electr¨®nico, lo que a su vez ha creado nuevas oportunidades para los ciberdelincuentes. Adem¨¢s, prevemos que esta tendencia contin¨²e y que gracias a la ayuda de herramientas que utilizan inteligencia artificial las tiendas falsas creadas aumenten su calidad siendo cada vez m¨¢s dif¨ªcil distinguirlas de las tiendas reales¡±, se?ala Luis Corrons, Security Evangelist de Avast.

Cuando las v¨ªctimas de los comercios falsos caen en la cuenta del fraude deben actuar r¨¢pidamente. ¡°Primero hay que contactar con el banco para informar y detener transacciones futuras y cambiar las contrase?as¡±, advierte Corrons. Una vez se comunica a la entidad, el afectado no tiene que asumir ning¨²n cargo por las operaciones no autorizadas que pudieran producirse a partir de ese momento. Es importante conservar toda la informaci¨®n relacionada con el fraude como pantallazos de la web, emails o mensajes recibidos para acreditar c¨®mo se cometi¨®. Lo siguiente es acudir a interponer la correspondiente denuncia ante las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.

Fuentes financieras recalcan que ¡°la entidad hace todo lo posible para salvaguardar los intereses de los clientes.¡± Sin embargo, no es sencillo recuperar el dinero pagado por el art¨ªculo comprado, aunque se trate de un enga?o. Seg¨²n el Banco de Espa?a, es frecuente que, cuando los cargos se derivan de actos de ciberdelincuencia, en los que, fruto de un enga?o, el titular ha entregado las claves de seguridad de la tarjeta a los ciberdelincuentes que han hecho un uso fraudulento de ellos, las entidades consideren que se trata de cargos formalmente autorizados.

Una orden de pago solo se considera autorizada cuando el ordenante ha dado el consentimiento para su ejecuci¨®n. Es decir, ¡°el cliente tiene que autorizar de forma expresa y consciente la orden de pago, ya sea orden¨¢ndola ¨¦l mismo, ya sea autorizando de forma expresa y consciente a un tercero para que la ordene en su nombre¡±, indican en la Asociaci¨®n para la Defensa de Consumidores y Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae). Esto significa que ¡°si el usuario niega haber autorizado una operaci¨®n, el banco deber¨ªa devolverle de forma inmediata el importe de la operaci¨®n¡±, comentan en la asociaci¨®n. Adem¨¢s, hay que ver si la tarjeta utilizada para el pago lleva asociado alg¨²n tipo de seguro para reclamar una cantidad a la entidad.

Desde el bufete de Leg¨¢litas, donde tambi¨¦n dan constancia del aumento constante de este tipo de fraudes desde la pandemia, insisten en la idea de que ¡°si el consumidor ha sido objeto de una estafa porque ha realizado una operaci¨®n de compra online con una empresa fantasma se podr¨ªa declinar la responsabilidad de la entidad bancaria si esta ha cumplido con todos sus protocolos de seguridad y de autorizaci¨®n de operaciones¡±, dice Araceli Duran, abogada del departamento de Consumo de Leg¨¢litas. La letrada a?ade que ¡°los consumidores tienen la obligaci¨®n de saber la empresa con la que contratan, es decir, si es una empresa de reconocido prestigio que opera en el mercado y si est¨¢ legalmente establecida¡±. No obstante, recomienda poner siempre una denuncia con la copia de los cargos y un justificante de la supuesta empresa con la que ha contratado, para que la Polic¨ªa se dirija, si cabe, a la entidad destinataria del dinero objeto del fraude.

Conviene no bajar la guardia y m¨¢s en la ¨¦poca actual de rebajas. Adem¨¢s de aplicar el sentido com¨²n y no tener prisas para comprar, hay que ¡°desconfiar ante ofertas con descuentos excesivos, analizar los perfiles de los compradores, buscar comentarios sobre la web y revisar que los datos de la compra u operaci¨®n son correctos, especialmente el comercio o la cuenta bancaria de destino y el importe¡±, se?alan fuentes financieras. La Polic¨ªa Nacional aconseja, adem¨¢s, verificar que el nombre de la tienda est¨¢ bien escrito en la URL y fijarse en im¨¢genes de mala calidad, textos mal traducidos o faltas de ortograf¨ªa, el CIF y el domicilio fiscal.

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