?Puede EE UU sobrevivir a un partido de saboteadores?

Han pasado casi cuatro a?os desde que el Congreso aprob¨®, y Donald Trump firm¨®, una enorme ley de ayuda destinada a limitar el sufrimiento econ¨®mico provocado por la covid-19. La Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Econ¨®mica por Coronavirus (CARES, por sus siglas en ingl¨¦s) cumpli¨® su funci¨®n. Aunque alrededor de 25 millones de estadounidenses perdieron temporalmente sus empleos ¨Clas p¨¦rdidas de empleo estuvieron causadas principalmente por el miedo a los contagios y no por los cierres decretados oficialmente¨C hubo mucho menos dolor monetario de lo que se podr¨ªa haber esperado, dada la magnitud de la crisis de salud p¨²blica.

De hecho, seg¨²n una encuesta de la Reserva Federal, el porcentaje de estadounidenses a los que ¡°al menos les iba bien econ¨®micamente¡± era en realidad mayor en julio de 2020 que antes de la pandemia, presumiblemente porque para muchas personas las ayudas del Gobierno, incluidos los cheques ¨²nicos y las prestaciones por desempleo muy mejoradas, compensaron con creces la p¨¦rdida de empleos y negocios.

Es m¨¢s, los temores de que las generosas subvenciones durante la pandemia socavaran la ¨¦tica laboral de Estados Unidos ¡ªde que los adultos abandonaran la poblaci¨®n activa y no se reincorporaran nunca m¨¢s¡ª resultaron totalmente infundados. Un nuevo documento de la Reserva Federal de San Francisco se titula ?Por qu¨¦ es tan alta la participaci¨®n de la poblaci¨®n activa en la edad m¨¢s productiva?. En ¨¦l se se?ala que los estadounidenses de la franja entre 25 y 54 a?os tienen m¨¢s probabilidades de formar parte de la poblaci¨®n activa ahora que en cualquier otro momento desde principios de siglo. As¨ª que la Ley CARES fue un gran ¨¦xito de la pol¨ªtica. Pero teniendo en cuenta los ¨²ltimos acontecimientos pol¨ªticos, me he puesto a pensar: ?qu¨¦ habr¨ªa pasado si los dem¨®cratas en 2020 se hubieran comportado como los republicanos en 2024?

Imaginemos un relato alternativo en el que Joe Biden, quien por entonces ya era el gran favorito para ser el candidato dem¨®crata a la presidencia, hubiera instado a los dem¨®cratas en el Congreso a no aprobar un proyecto de ley de ayuda ¡ªde la misma manera que Trump ha intimidado a los republicanos para que voten en contra de un proyecto de ley de seguridad fronteriza¡ª en la creencia de que reducir la miseria de los estadounidenses podr¨ªa ayudar a Trump a ser reelegido.

Imaginemos un relato en el que Nancy Pelosi, la presidenta dem¨®crata de la C¨¢mara en aquel momento, se hubiera comportado como Mike Johnson, el actual presidente republicano, y hubiera impedido que llegara al pleno un proyecto de ley que intentaba abordar una prioridad nacional urgente.

Parece claro que la Ley CARES, en efecto, ayud¨® pol¨ªticamente a los republicanos. Es cierto que perdieron la Casa Blanca en 2020, pero por un margen menos decisivo de lo que muchos esperaban, y que, aunque los dem¨®cratas ganaron el control del Senado, lo hicieron por un m¨ªnimo margen. A los republicanos les habr¨ªa ido mucho peor si Trump hubiera estado presidiendo una depresi¨®n a gran escala inducida por la covid.

Y el Partido Republicano sigue benefici¨¢ndose de ese paquete de ayudas covid. Los republicanos se jactan constantemente de lo bien que iba la econom¨ªa con Trump, lo cual resulta curioso si tenemos en cuenta que Trump fue el primer presidente desde Herbert Hoover en dejar la Casa Blanca con menos estadounidenses con empleo que cuando se mud¨® a ella. El truco aqu¨ª es que fingen que 2020 nunca sucedi¨®, un juego de manos que solo funciona porque la ayuda federal permiti¨® a tantos estadounidenses salir de la recesi¨®n provocada por la pandemia en buena forma financiera.

Ahora bien, mi relato imaginario no sucedi¨® y no podr¨ªa haber sucedido. Para empezar, Pelosi no es esa clase de pol¨ªtica. Es partidista, por supuesto, pero nunca, que yo sepa, se ha dedicado a la extorsi¨®n pol¨ªtica tomando como reh¨¦n el bienestar de la naci¨®n. Por ejemplo, en 2019, encauz¨® un acuerdo bipartidista para suspender el techo de la deuda, evitando una posible crisis financiera, con un acuerdo que hasta el propio Trump reconoci¨® que no conten¨ªa ¡°ninguna p¨ªldora venenosa¡±. E incluso si Pelosi hubiera querido dedicarse al sabotaje econ¨®mico, sus compa?eros casi seguro que se habr¨ªan negado a seguirle la corriente.

Pero los republicanos de Trump (y los ¨²ltimos acontecimientos han confirmado que Trump es realmente el due?o del Partido Republicano) son todo lo que los dem¨®cratas de 2020 no eran. Han rechazado un proyecto de ley de seguridad fronteriza y ayuda exterior que ellos mismos exigieron y posteriormente negociaron, uno que era mucho m¨¢s duro de lo que a los dem¨®cratas les hubiera gustado. Y ni siquiera tratan de ocultar su cinismo descarado. Quieren bloquear un acuerdo fronterizo, aunque sea uno que les da casi todo lo que quieren, porque cualquier acuerdo podr¨ªa limitar su capacidad de atacar a Biden por este tema. Ah, y una fracci¨®n significativa de los republicanos, Trump incluido, preferir¨ªan bloquear la ayuda a Ucrania porque Vladimir Putin es, a todas luces, su tipo de hombre y se alegran de verle aplastar a su vecino democr¨¢tico.

Est¨¢ claro que Biden tiene intenci¨®n de convertir el sabotaje republicano en un tema importante en la campa?a de 2024 ¡ªcomo cuando Harry Truman se present¨® contra el ¡°Congreso que no hace nada¡± en 1948¡ª, con la ventaja adicional de que, esta vez, los republicanos intentan m¨¢s o menos abiertamente socavar los intereses estadounidenses para obtener r¨¦dito pol¨ªtico. Queda por ver si esta estrategia funcionar¨¢. Pero incluso si funciona, y Biden gana, incluso si los dem¨®cratas recuperan el control total del Congreso, me preocupa el futuro. Uno de los dos principales partidos pol¨ªticos de Estados Unidos se dedica ahora a tratar de alcanzar el poder a toda costa e intentar¨¢ hacer ingobernable la naci¨®n si un dem¨®crata se sienta en la Casa Blanca. ?Cu¨¢nto tiempo podr¨¢ sobrevivir nuestra democracia en estas condiciones?

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