Sargadelos: los ¡°cacharri?os¡± de porcelana que esquivaron la quiebra y ahora buscan crecer en el exterior

Desde la f¨¢brica de Sargadelos en la peque?a aldea lucense que le da nombre (de apenas 80 habitantes) no se ve el mar ni se escucha su rugido rompiendo contra los acantilados. Sin embargo, en sus ¡°cacharri?os¡±, como llamaba a sus creaciones Isaac D¨ªaz Pardo, impulsor de la recuperaci¨®n de la centenaria firma cer¨¢mica, las olas est¨¢n muy presentes y sus caracter¨ªsticos dise?os blanco y azul cobalto son una de las se?as de identidad de Galicia. Imagen del dise?o y la cultura de la tierra, dice su propietario actual, Segismundo Garc¨ªa (A Pontenova, Lugo, 73 a?os).

Con casi el 93% del capital de las empresas que dan forma al grupo Sargadelos (F¨¢brica de Cer¨¢mica del Castro, F¨¢brica de Cer¨¢mica de Sargadelos y Porcelana de Sargadelos), Garc¨ªa presume de que ¡°es una gran empresa y bien gestionada¡±. ?l entr¨® poco a poco en el accionariado. ¡°Invert¨ª algo de capital cuando los anteriores gestores intentaron montar un medio de comunicaci¨®n y contactaron conmigo. Posteriormente, compr¨¦ la participaci¨®n de un socio no conforme con la gesti¨®n; compr¨¦ un poco m¨¢s y entr¨¦ en el consejo de administraci¨®n y segu¨ª comprando¡±, relata. En 2014, tras la presentaci¨®n del concurso de acreedores por parte de la anterior direcci¨®n, el empresario se puso al frente de la empresa como administrador ¨²nico (acumulaba cuatro ejercicios en p¨¦rdidas y una deuda cercana a los siete millones de euros), ¡°y desde mi primer a?o como consejero delegado ganamos dinero¡±, asegura. Se refiere a beneficios contables, porque no ser¨ªa hasta 2018 cuando las tres empresas del grupo registrar¨ªan n¨²meros negros.

Hoy Sargadelos es una compa?¨ªa saneada (¡°no tenemos deuda¡±, resalta Segismundo Garc¨ªa) y en proceso de crecimiento. ¡°En estos ¨²ltimos a?os facturamos entre 12 y 14 millones de euros y obtenemos unos beneficios de unos 500.000 euros. Jam¨¢s repartimos beneficios, los reinvertimos y dedicamos a actividades culturales, a nuestros dos museos o a la expansi¨®n de la marca¡±, sostiene. El propietario de la famosa firma gallega de porcelana se encuentra satisfecho con la situaci¨®n financiera. ¡°No nos quejamos¡±, dice.

Durante 2024, el grupo creci¨® un 12% y este a?o planea abrir una segunda tienda en Madrid, cerca del estadio Santiago Bernab¨¦u, para aquilatar su presencia en la capital. ¡°En Galicia somos muy representativos del alma gallega. Pero a nivel popular no somos muy conocidos. Queremos ganar notoriedad a trav¨¦s de Madrid, donde llevaremos tambi¨¦n nuestro concepto de taberna para explorarlo¡±, avanza.

En las dos f¨¢bricas que la marca posee en Lugo y A Coru?a (en Cervo, donde las instalaciones ideadas por el marqu¨¦s de Sargadelos en 1806 y las dise?adas por Isaac D¨ªaz Pardo en 1968 son bien de inter¨¦s cultural, y en Sada, localidad en la que el museo tiene esa misma consideraci¨®n) la producci¨®n convive en el espacio con los museos, las tiendas y las tabernas en las que poder comer tras la visita a las factor¨ªas (que son gratuitas) o a los espacios de exposici¨®n (con coste). ¡°En verano es como una romer¨ªa¡±, admite el administrador ¨²nico.

Pero la asignatura pendiente, reconoce, es la internacionalizaci¨®n. Poco m¨¢s de un mill¨®n de euros de la cifra de negocio procede de las ventas en otros pa¨ªses. Fundamentalmente de M¨¦xico, Estados Unidos e Italia, explica Garc¨ªa. ¡°Estamos en M¨¦xico y Argentina y vamos a entrar en Panam¨¢, Per¨² y Emiratos ?rabes Unidos. Tenemos proposiciones para abrir fuera¡±, agrega. Aunque les gustar¨ªa que fuese a trav¨¦s de tiendas propias, el propietario del grupo lo descarta: ¡°Buscamos masterfranquicias o entrar como distribuidores¡±. ¡°Pero no nos estresamos ni nos ponemos metas¡±, afirma.

Piezas hechas a mano

La porcelana, claro, es el producto estrella de Sargadelos. Fundamentalmente sus vajillas (cuyo precio oscila de los 464 euros de alguna de 6 servicios a los 2.473 euros de las m¨¢s caras de 12 servicios, un precio que, seg¨²n Garc¨ªa, ¡°no es caro cuando uno ve el proceso artesanal con que se fabrican; los objetos no salen como churros y se tratan y pintan a mano como si fueran ¨²nicos¡±). Tienen tambi¨¦n l¨ªnea decorativa (con jarrones, figuras¡­) y una tercera dedicada a pedidos especiales (en general, piezas simb¨®licas que encargan empresas). Sus otros productos: joyer¨ªa, marroquiner¨ªa, textil, cristaler¨ªas¡­, nacidos de la diversificaci¨®n con la que consiguieron sortear el concurso de acreedores (adem¨¢s de la venta de inmuebles y los expedientes de regulaci¨®n de empleo y posteriores despidos que les llevaron a los tribunales y tuvieron que readmitir al personal), a¨²n no llegan al 20% de la facturaci¨®n.

Aunque, como buen gallego, Segismundo Garc¨ªa asegura: ¡°No aspiramos a nada y aspiramos a todo¡±, el grupo en el que trabajan 242 personas, el 80% mujeres, se ha embarcado en un nuevo proyecto. Desde hace seis meses ha creado con un socio la empresa Cer¨¢micas Industriales Sargadelos, dedicada a la fabricaci¨®n de productos industriales para procesos donde se demanda cer¨¢mica: como boquillas y piezas de aluminio para el sector metal¨²rgico. ¡°Vimos la oportunidad del momento y nos gusta innovar¡±, justifica.

A Segismundo Garc¨ªa no le preocupan algunas denuncias que todav¨ªa colean de los descendientes de D¨ªaz Pardo. Es consciente de su edad y de su modelo de direcci¨®n: ¡°La gente vieja, a veces equivocadamente, somos muy personalistas, queremos estar en todas las cosas¡±. Y no pretende jubilarse y tampoco ocuparse de la sucesi¨®n: ¡°La Fundaci¨®n Sargadelos, que presido, se encargar¨¢ de ella¡±, zanja.