Las abogadas espa?olas conquistan los bufetes anglosajones
Cinco mujeres lideran los despachos de EE UU y el Reino Unido. Su presencia en puestos de mando ha crecido

Las mujeres abogadas est¨¢n conquistando poco a poco espacios internacionales de poder, hasta ahora reservados a sus colegas hombres. Pilar Menor (DLA Piper), Nieves Briz (Dentons), Iria Calvi?o (Herbert Smith Freehills), Marta Gonz¨¢lez (Eversheds Sutherland) y Mar¨ªa Pilar Garc¨ªa Guijarro (Watson Farley & Williams) son ejemplo de ello. Estas cinco socias espa?olas de grandes despachos anglosajones ocupan cargos internacionales dentro de sus firmas. Todas ellas reconocen que alcanzar puestos directivos en sus bufetes implica sacrificios, especialmente un aumento del tiempo de dedicaci¨®n, pero aseguran que el peaje vale la pena si, como en su caso, hay pasi¨®n por el trabajo.
Pilar Menor accedi¨® al puesto de global co-chair of employment de DLA Piper (corresponsable global del ¨¢rea de empleo) en pleno confinamiento en mayo de 2020. Gracias a la tecnolog¨ªa pudo conectar con su nuevo equipo de m¨¢s de 300 abogados repartidos en 40 pa¨ªses. Fue la primera abogada no anglosajona en asumir una responsabilidad internacional en la firma. ¡°Me cost¨® tomar la decisi¨®n pues mis mellizos ten¨ªan cinco a?os y pensaba que un puesto internacional requerir¨ªa muchos viajes, aunque al principio no fue as¨ª por el coronavirus¡±, confiesa. La conciliaci¨®n no fue el ¨²nico desaf¨ªo que le supuso su nueva posici¨®n, tambi¨¦n fue complicado combinar las responsabilidades de gesti¨®n con su trabajo con clientes.
Por su parte, Nieves Briz comenta que aceptar el puesto de codirectora del grupo de productos y servicios de consumo de Dentons en Europa, en septiembre de 2022, fue una decisi¨®n que asumi¨® con entusiasmo y compromiso. El punto de inflexi¨®n en su carrera, cuenta, fue cuando la nombraron socia de equity (renta variable) del bufete con 32 a?os y se convirti¨® en la primera socia mujer, adem¨¢s de la m¨¢s joven. ¡°Sent¨ª que romp¨ªa barreras, no solo por el reconocimiento dentro del despacho, sino porque representaba un cambio en la percepci¨®n del liderazgo femenino en el sector legal¡±.
Iria Calvi?o admite que no pretend¨ªa postularse para la direcci¨®n de ESG (medioambiente, social y gobernanza por sus siglas en ingl¨¦s) en Europa, Oriente Medio y ?frica de Herbert Smith Freehills, pero que una llamada de la directora global del ¨¢rea pregunt¨¢ndole por qu¨¦ no lo hab¨ªa hecho le hizo replante¨¢rselo. Finalmente, present¨® una candidatura conjunta con Heike Schmitz, socia de la oficina de Fr¨¢ncfort, que fue la escogida. Calvi?o reconoce que la presi¨®n mental fue una barrera que la condicionaba hasta que consigui¨® derribarla. ¡°Me di cuenta de que no hac¨ªa falta actuar, pensar, trabajar y relacionarse exactamente igual que el resto de los socios del despacho, en su gran mayor¨ªa hombres. Ese mismo a?o tambi¨¦n decid¨ª que no quer¨ªa ser una super woman, simplemente aspiraba a ser socia del despacho¡±.
Marta Gonz¨¢lez acept¨® el puesto de codirectora del grupo de salud de Eversheds Sutherland la segunda vez que se lo propusieron. ¡°La primera ocasi¨®n coincidi¨® con mi nombramiento como socia de equity de la firma en Espa?a y en ese momento sent¨ª que, aunque era una magn¨ªfica oportunidad que quer¨ªa, necesitaba invertir todo mi esfuerzo en consolidar primero mi nueva situaci¨®n¡±, explica. El apoyo de sus socios, se?ala Gonz¨¢lez, en particular, de Kiko Carri¨®n y Jacobo Mart¨ªnez, fue fundamental en el proceso.
Desde el pasado mes de enero Mar¨ªa Pilar Garc¨ªa Guijarro combina la direcci¨®n de la oficina madrile?a de Watson Farley & Williams (WFW) con el liderazgo de la pr¨¢ctica de energ¨ªa de la firma en Europa y Am¨¦rica. ¡°Decid¨ª asumir este puesto convencida de que, con esfuerzo, humildad y dedicaci¨®n, puedo seguir contribuyendo al crecimiento y ¨¦xito de WFW¡±. Su carrera dio un giro cuando le propusieron ser socia directora, a pesar de que el contexto no era el m¨¢s id¨®neo. ¡°Surgi¨® sin que yo aspirara a esta posici¨®n, en un momento muy complicado del mercado en general y del sector energ¨¦tico en particular; adem¨¢s, estaba a punto de dar a luz a mi segunda hija y quer¨ªa poder disfrutar de ella¡±, cuenta. Tras meditarlo mucho, dio el paso porque sinti¨® que se lo deb¨ªa a la gente de la oficina.
S¨ªndrome de la impostora
Las cinco abogadas consultadas coinciden en que el camino al ¨¦xito no ha estado exento de obst¨¢culos, muchas veces autoimpuestos, como el s¨ªndrome de la impostora que sufrieron Pilar Menor o Marta Gonz¨¢lez. Precisamente, esta ¨²ltima apunta que esta sensaci¨®n siempre coincid¨ªa con los cambios de rol en su vida profesional. Con el tiempo aprendi¨® que las habilidades que adquir¨ªa en cada nueva etapa no anulaban lo anterior, sino que todas ellas le han permitido llegar donde est¨¢ ahora. Para luchar contra esta falta de confianza, Pilar Menor aconseja formarse en liderazgo y compartir experiencia con otras mujeres que puedan sentir lo mismo.
Estas mujeres en la cumbre de sus despachos afirman que conseguir un equilibrio entre vida personal y profesional es otro de los principales retos que conllevan sus cargos. Para superarlo explican que han tenido que aprender a priorizar, organizarse mejor y delegar m¨¢s. El sentimiento de culpa siempre est¨¢ al acecho, reconoce Garc¨ªa Guijarro, especialmente cuando se es madre. Con tres hijos, Iria Calvi?o recalca que no poder controlar siempre los horarios de antemano le ha permitido desarrollar mucha capacidad de reacci¨®n e improvisaci¨®n, pero reconoce que no todo el m¨¦rito es suyo y presume de tener ¡°un marido 10¡å.
Ellas est¨¢n abriendo un camino a las nuevas generaciones de abogadas, a las que Nieves Briz les recomienda enfocarse en construir su propio camino con persistencia y sin miedo a pedir ayuda porque, sostiene, ¡°sin duda, el talento no tiene g¨¦nero¡±.
Cuotas y mentor¨ªa
Las cinco abogadas entrevistadas consideran que las cuotas son una herramienta útil para acelerar el cambio hacia una mayor representación femenina en posiciones de liderazgo, aunque coinciden en que deben ser temporales y no pueden ser la única medida. Son conscientes de que los sistemas de cuotas sirven para corregir desigualdades heredadas y defienden que mérito y capacidad deben ser los únicos criterios para acceder a los puestos. Asimismo, abogan por los programas de mentoría (muchas han participado), la formación en liderazgo y una cultura más inclusiva en los bufetes para promocionar el talento femenino.
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