St¨¦phane Vigneault: ¡°El origen de la segregaci¨®n escolar est¨¢ en las cuotas de la concertada¡±
El activista quebequ¨¦s pide a los gobiernos m¨¢s control sobre las escuelas privadas para acabar con la selecci¨®n de los alumnos seg¨²n su capacidad econ¨®mica
Cuando St¨¦phane Vigneault (47 a?os) se encontr¨® en la tesitura de tener que elegir escuela para sus hijas, descubri¨® un sistema educativo, el de Quebec, totalmente selectivo y unos padres angustiados porque sus hijos deben pasar un examen para acceder a las mejores escuelas del pa¨ªs, las privadas concertadas, para evitar las p¨²blicas, convertidas en guetos. Viendo que no estaba solo en su indignaci¨®n, este licenciado en Ciencias Pol¨ªticas fund¨® en 2017 la entidad ?cole Ensemble, que trabaja para presionar al Gobierno para conseguir un sistema m¨¢s equitativo. Vigneault recibe a este diario en la Fundaci¨®n Jaume Bofill, aprovechando su participaci¨®n en el Congreso Europeo sobre Segregaci¨®n Escolar ECASS, celebrado en Barcelona a mediados de diciembre.
Pregunta. ?Tiene soluci¨®n la segregaci¨®n escolar?
Respuesta. S¨ª, por supuesto.
P. ?Hay soluciones comunes que se puedan aplicar en los diferentes pa¨ªses?
R. Es una buena pregunta porque creo que las soluciones deben dise?arse a medida, seg¨²n cada sistema educativo. Pero s¨ª creo que hay elementos comunes. Lo primero es que el Estado considere el sistema educativo como uno, incluyendo p¨²blicas y privadas. Y segundo, si el centro recibe dinero p¨²blico, este debe velar por el inter¨¦s p¨²blico. El Gobierno no puede inyectar dinero y despu¨¦s desentenderse de lo que pasa en la privada.
P. ?C¨®mo deben trabajar por el inter¨¦s p¨²blico?
R. No seleccionando a los alumnos.
P. ?Las cuotas deber¨ªan desaparecer?
R. S¨ª. En todos los pa¨ªses pasa igual, si hay selecci¨®n de alumnos, hay segregaci¨®n.
P. Entonces, ?el problema son las concertadas?
R. S¨ª, el origen de la segregaci¨®n escolar est¨¢ en las concertadas y sus cuotas.
En Quebec los padres no eligen la escuela, es la escuela la que elige a los alumnos
P. ?Cu¨¢l es la situaci¨®n en Quebec?
R. En Canad¨¢ hay un sistema federal, y ni el Gobierno estatal ni los municipios tienen competencias. Toda la regulaci¨®n en educaci¨®n depende de las provincias, y cada una tiene una normativa diferente. En Quebec tenemos escuelas p¨²blicas y privadas subvencionadas. Estas ¨²ltimas reciben fondos p¨²blicos, que pueden representar el 75% de los ingresos. Las cuotas que pagan las familias son obligatorias y pueden ascender a unos 3.500 euros anuales. Estos centros seleccionan a los estudiantes de dos maneras: con las cuotas y con el examen de acceso. Los padres no eligen la escuela, es la escuela la que elige a los alumnos. Los mejores alumnos van a la concertada y los que no se pueden pagar la cuota se quedan en la p¨²blica.
El problema es que algunas p¨²blicas se percataron de esto y hacia los a?os noventa decidieron competir con las subvencionadas y crearon las escuelas p¨²blicas selectas, que pon¨ªan su punto fuerte en el deporte, el arte o el ¨¢mbito internacional. Y empezaron a seleccionar a los alumnos tambi¨¦n con cuotas y con ex¨¢menes de ingreso. As¨ª, actualmente tenemos privadas subvencionadas, p¨²blicas selectas y p¨²blicas normales, y aqu¨ª se concentran los alumnos con dificultades, inmigrantes¡
P. ?En qu¨¦ consiste la propuesta de ?cole Ensemble?
R. Proponemos dos modelos de escuelas privadas: uno ser¨ªa con financiaci¨®n al 100% por el Gobierno, como las p¨²blicas. Aqu¨ª las privadas podr¨ªan seguir siendo privadas, pero siguiendo las mismas reglas que las p¨²blicas: sin selecci¨®n de alumnos ni cuotas. Es lo que bautizamos como escuelas contratadas. Esto es lo que hizo Finlandia. Y el segundo modelo ser¨ªan privadas no contratadas, sin ning¨²n tipo de financiaci¨®n p¨²blica para las que quieran seguir seleccionando los alumnos.
P. ?Y los gobiernos tienen suficiente dinero para asumir el 100% de la financiaci¨®n de las privadas?
R. Por un lado, el Gobierno necesitar¨¢ aportar m¨¢s dinero [a las escuelas contratadas]. Pero en el caso de que la privada lo rechace, se pasa del 75% de financiaci¨®n a cero, y esto implica mucho ahorro.
P. Eso depende de cu¨¢ntas privadas renuncien a la financiaci¨®n.
R. Nosotros hicimos una previsi¨®n mirando el Estado de Ontario, con un perfil social parecido, y vimos que all¨ª el 6% de las escuelas son privadas. Extrapolamos los c¨¢lculos y vimos que nuestra propuesta no supone un sobrecoste, sino que el Gobierno se ahorrar¨ªa dinero.
P. En la segregaci¨®n, las familias tienen un papel clave, porque muchas optan por escuelas privadas para no llevar a sus hijos a centros con muchos alumnos vulnerables. ?C¨®mo se cambia esto?
R. A las familias hay que ofrecerles educaci¨®n gratis, proximidad, buenas actividades extracurriculares y diversidad de alumnos. Pero para ello es necesario rehacer las zonas escolares para que barrios de diferente nivel puedan acceder a los mismos centros. Y tambi¨¦n conseguir que todas las escuelas tengan un perfil parecido de alumnos. Y en los casos que no se pueda, como ¨²ltimo recurso, el Gobierno debe aportar m¨¢s recursos en ayudas para los alumnos, material para la escuela¡
A las familias hay que ofrecerles educaci¨®n gratis, proximidad y diversidad de alumnos
P. ?La escuela p¨²blica debe ganar prestigio respecto a la privada?
R. Si a una familia se le asigna una concertada seguramente pensar¨¢ que le ha tocado la loter¨ªa. Pero con nuestro sistema, con el tiempo los resultados de su escuela, que antes eran muy altos, bajar¨¢n por la mayor diversidad de alumnos, mientras que los de la p¨²blica subir¨¢n. Y entonces la mentalidad cambiar¨¢.
P. ?Qu¨¦ consecuencias tiene la segregaci¨®n escolar?
R. A lo mejor el concepto de segregaci¨®n es un poco abstracto, pero es muy importante. Quebec tiene el nivel m¨¢s alto de abandono escolar de Canad¨¢, tanto de alumnos como de profesores. Cuando los docentes salen de la carrera van a parar a las escuelas p¨²blicas con m¨¢s concentraci¨®n de alumnos vulnerables. Se encuentran con muchos problemas en clase, pero no tienen experiencia, as¨ª que se queman r¨¢pidamente. Seg¨²n las estad¨ªsticas que tenemos, una cuarta parte de docentes ha abandonado el trabajo en los ¨²ltimos cinco a?os, y no vuelven a la carrera docente. Y esto tiene consecuencias para el sistema y para la sociedad.
La escuela deber¨ªa ser el sitio donde te encuentras a gente que no es como t¨². Pero si eres un ni?o de origen inmigrante y ves que el resto va a otras escuelas, ?qu¨¦ mensaje le estamos dando? Claramente, que es menos importante y que nunca va a llegar al mismo nivel que los otros. Adem¨¢s, es un grave problema para la cohesi¨®n [social] porque, si no hay una mezcla, no hay conocimiento de los otros. Yo pago impuestos y s¨¦ que es ¨²til porque fui a clase con alumnos menos favorecidos, pero si los ricos no conocen otro tipo de personas pensar¨¢n: ¡°?Por qu¨¦ tengo que pagar impuestos?¡± No se identifican con los pobres, ni los pobres se identifican con los ricos.
P. ?A los gobiernos les falta valent¨ªa para luchar contra la segregaci¨®n?
R. S¨ª, necesitan ser valientes, el status quo es m¨¢s f¨¢cil. Pero tienen que saber que los resultados se notan r¨¢pidamente. En Par¨ªs, hace unos a?os impulsaron una experiencia en dos escuelas, una frente a otra; a una iban los ricos blancos y a la otra, los negros pobres. Lo que hicieron fue esto: un a?o matriculaban todos los alumnos de primero de secundaria en uno de los centros; al a?o siguiente, los de primero se matriculaban en el otro instituto. Al cabo de un tiempo, los dos centros eran iguales, con el mismo perfil de alumnos. Los padres con alto nivel econ¨®mico protestaron mucho, pero el Gobierno se mantuvo firme. Con el tiempo las familias blancas tambi¨¦n vieron que no pasaba nada si se mezclaban, que era la sociedad real, y empatizaron con las otras familias. Al principio se necesita valent¨ªa para empezar, pero funciona.
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