El instructivo taller de masculinidad que no han cursado los colegiales del El¨ªas Ahuja

Este lunes se cumple un a?o de los c¨¢nticos machistas de los inscritos en el colegio mayor madrile?o El¨ªas Ahuja que escandalizaron a la sociedad espa?ola: ¡±?Putas, salid de vuestras madrigueras como conejas, sois unas putas ninf¨®manas, os prometo que vais a follar todas en la capea!¡±. Hubo entonces mucho prop¨®sito de enmienda, el cabecilla fue expulsado unas semanas (no para siempre, como se anunci¨®), pero los cambios est¨¢n siendo muy lentos. Muchos de los veteranos que participaron en La Granja ¨Das¨ª se llamaba el ¡°rito¡±¨D se han ido del colegio con la sola reprimenda del equipo directivo y los psic¨®logos, pero sin la ¡°participaci¨®n obligatoria en un ciclo de conferencias¡±, como se comprometi¨® el El¨ªas Ahuja en un comunicado. No han recibido formaci¨®n en ¡°novatadas, respeto, igualdad e identidad¡±. El pasado curso se baraj¨® la posibilidad de que acudiesen a uno de los talleres de la Unidad de Igualdad de la Universidad Complutense, a la que el centro est¨¢ adscrito. No fragu¨®. Este diario ha asistido a dos de las seis jornadas del titulado Masculinidades: hombres ante la igualdad, que parece un traje cortado para los ahujos. Atrapa.

El primer d¨ªa del taller de 18 horas en la UCM, casi todos los participantes reconocen haberse matriculado por el cr¨¦dito que se logra si se asiste ¨Dla carrera est¨¢ organizada generalmente en 240 cr¨¦ditos¨D, pero tambi¨¦n se percibe en la quincena de chicos y chicas una sensibilidad especial por la igualdad de g¨¦nero. Vienen le¨ªdos de casa. Quiz¨¢s no son, por tanto, la audiencia ideal. El psic¨®logo Manuel Rodr¨ªguez, que dinamiza varios de los d¨ªas del taller ¨Dapenas hay teor¨ªa, los inscritos interact¨²an¨D, lo reconoce: ¡°S¨ª, claro, eso pasa cuando es algo optativo. Pero siempre hay despistados que no saben a qu¨¦ se apuntan y cuando termina se replantean muchas cosas¡±.

¡°La gran lucha es ir captando a personas que no tienen sensibilidad hacia estos temas. Y eso es muy dif¨ªcil porque t¨² no puedes obligar a la gente a hacer un curso. Por eso es tan importante que se introduzca la perspectiva de g¨¦nero en todas las asignaturas de la carrera¡±, explica Isabel Tajahuerce, delegada del rector para la Igualdad de la Complutense. Mientras no se d¨¦ ese paso, la unidad ofrece un enorme cat¨¢logo de cursos ¨Dprevenci¨®n del acoso, plan de igualdad, autocuidados...¨D, unos presenciales y otros no, divididos por colectivos (estudiantes, profesores y personal de administraci¨®n y servicio) o por sexos para que est¨¦n m¨¢s c¨®modos.

Entre diciembre de 2022 y febrero de 2023, los equipos directivos del Ahuja y el Santa M¨®nica ¨Del colegio femenino al que profirieron los insultos, tambi¨¦n de los padres Agustinos¨D asistieron a un curso de mediaci¨®n en conflictos de la Delegaci¨®n de Igualdad. En ocasiones la UCM organiza cursos para los colegiales, pero el Ahuja, muy conservador ¨Dha acogido conferencias de l¨ªderes de Vox¨D, ha optado por cumplir su compromiso p¨²blico con el respaldo por ahora de dos profesores de Psicolog¨ªa de la Universidad Francisco de Vitoria, ¡°administrada¡± por los Legionarios de Cristo, y de agentes tutores de la Polic¨ªa Municipal. Los novatos han sido los primeros en escuchar y se sumar¨¢n los colegiales protagonistas a su pesar el a?o pasado.

Rodr¨ªguez, que trabaja en su tesis de masculinidades y violencia, recibe a los alumnos en el s¨®tano de la facultad de Ciencias Biol¨®gicas y Geol¨®gicas con una enorme sonrisa y un cuadernillo ilustrado escrito por ¨¦l y el profesor de otras sesiones, Pablo Ram¨ªrez. En ¨¦l se repasa en pocas p¨¢ginas conceptos b¨¢sicos del tema, se incluye un cat¨¢logo de datos sorprendentes ¨Dlas mujeres solo protagonizan el 5% de las noticias deportivas o los hombres tienen entre tres y seis veces m¨¢s posibilidades de suicidarse¨D y el colof¨®n son 50 situaciones en las que se identifica bien a un machista.

Entre los matriculados en la UCM nadie pone en duda que la violencia tiene g¨¦nero, pero Rodr¨ªguez detecta muchas reticencias en sus charlas ¨Dde car¨¢cter obligatorio¨D en los institutos. ¡°Cada vez cala m¨¢s esa idea. Los adolescentes preguntan mucho de las denuncias falsas e insisten mucho en que no todos los hombres son malos¡±, relata. Al principio cuesta romper el hielo, pero luego los universitarios se lanzan a hablar y no hay duda de que antes han reflexionado algo sobre la cuesti¨®n.

Las tres horas pasan volando. ¡°Hasta el jueves¡±, se despide el profesor. El segundo d¨ªa lo dedica a referentes masculinos en el cine y el deporte. ¨D¡±?Alguno sabe qu¨¦ es el test de Bechdel?¡±, pregunta. Mayte, que estudia tercero de Derecho, levanta la mano y explica: se cre¨® para medir la desigualdad de g¨¦nero en las pel¨ªculas. En ninguna cinta ganadora del premio Oscar a mejor pel¨ªcula desde 1929, las mujeres hablan m¨¢s que los hombres. Ni remotamente. De nuevo los alumnos reprueban con la cabeza.

La saga de Torrente les suena muy lejana. ¡°La pel¨ªcula m¨¢s casposa de la historia de Espa?a. El estereotipo del cu?ao baboso¡±, reflexiona Ra¨²l, en cuarto de F¨ªsicas. Se sienten m¨¢s c¨®modos hablando de Barbie. Casi todos la han visto. ¡°Mattel la cre¨® una mujer, pero luego la han llevado directivos. En la pel¨ªcula se mofan y eso crea un precedente. ?Qu¨¦ har¨¢n ahora?¡±, expone el docente. Jackson, que cursa Ciencias Pol¨ªticas y Filosof¨ªa, no va a quedarse con la duda y tira de m¨®vil: una mujer y nueve hombres en la c¨²pula. Debate saldado.

¨D¡°?Qu¨¦ diferencia hay entre sexo y g¨¦nero?¡±, lanza el profesor.

Hace no tanto tiempo, los veintea?eros se hubiesen quedado mudos. Hoy, no dudan. ?Por qu¨¦ saben diferenciar? Aseguran que no se lo han ense?ado ni en casa ni en la escuela. ¡°En Internet¡±. El profesor explica someramente los conceptos (masculinidad hegem¨®nica, interseccionalidad...) y les incita a debatir siempre sobre cuestiones pegadas a la actualidad: ¡°?Podr¨ªa ser Bad Bunny un nuevo referente masculino? ?Y Elon Musk?¡±. Los alumnos se organizan en grupos de cuatro para consensuar 10 valores asociados a la masculinidad. Algunos est¨¢n claros ¨Dfuerza, seguridad, practicidad¨D pero en otros casos no. ?Emprendedores? ?Competitivos?

No hay tiempos muertos. En la peque?a pantalla se proyecta el v¨ªdeo m¨¢s visto de Youtube si se escribe la palabra masculinidad. Se titula Los 4 pilares de la masculinidad que todo hombre debe cultivar y atesora 261.000 visitas en 10 meses. La voz resulta rob¨®tica y el mensaje ¨D¡±Soltar las emociones a chorro delante de los dem¨¢s solo te va a perjudicar¡±, dice el gur¨²¨D no convence a ninguno. Hilaridad general.

Las colegialas del Santa M¨®nica disculparon a sus vecinos (¡±Pobrecillos, es una tradici¨®n¡±) y no se contempl¨® que ellas tambi¨¦n recibiesen formaci¨®n en un curso como este de masculinidades. Las p¨¢ginas webs de los colegios hermanados evidencian que nada ha cambiado. Las m¨®nicas, entre sus deberes, tienen que ¡°mantener las habitaciones siempre limpias y ordenadas¡± y ¡°un d¨ªa a la semana se limpiar¨¢ el ba?o¡±; mientras que la vida les sonr¨ªe a los ahujos: ¡°La habitaci¨®n ser¨¢ tu espacio personal, as¨ª que podr¨¢s decorarla (...) de la limpieza y el mantenimiento nos encargamos nosotros dos veces por semana¡±.

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