"No voy a andar con un sello nacionalsocialista en el coche"

"No voy a andar con un sello nacionalsocialista en el coche". En la sala de la Audiencia Provincial donde se juzga a 15 supuestos miembros de la organizaci¨®n neonazi Hammerskin Espa?a, se han podido escuchar esta ma?ana algunas de las conversaciones que, hace cinco a?os, impulsaron la investigaci¨®n policial del caso. Hoy se iban a reproducir las cintas de las escuchas telef¨®nicas que hizo la Guardia Civil durante sus pesquisas. Finalmente, s¨®lo se han podido o¨ªr unos cuantos fragmentos. El juicio quedar¨¢ visto para sentencia ma?ana.

En la primera de las grabaciones, uno de los acusados, conocido por el apodo P¨ªo y al que se le atribuye ser aspirante a Hammerskin o prospect (en su terminolog¨ªa), habla con otro compa?ero de algunos aspectos que podr¨ªan ser relevantes para probar la existencia de asociaci¨®n il¨ªcita, delito del cual se acusa a los integrantes de la banda, y que los acusados han negado durante el juicio. Que ten¨ªan financiaci¨®n, que celebraban reuniones o que exist¨ªa una estructura con cargos diferenciados:

"-El viernes hay reuni¨®n y fiesta

-El viernes antes, ?no?

-S¨ª

-Y a la cual nosotros iremos, supongo

-A la cual nosotros vamos (...) No s¨¦ si al final pagaremos o no. Porque se hab¨ªa acordado que se iba a cobrar a todo el mundo la cena y que la parte de aqu¨ª (...) se pondr¨ªa con dinero de la caja (...) Vamos nosotros, los otros, luego est¨¢n los grupos, los Hammer que vengan de fuera y ya est¨¢."

En las siguientes conversaciones se escuchan afirmaciones relacionadas con la parafernalia neonazi: "No voy a andar con un sello nacionalsocialista en el coche", le advierte uno de ellos a otro que le ped¨ªa que lo llevara a una cita. Y tambi¨¦n alguna de car¨¢cter racista. En un momento, uno de ellos alaba el f¨ªsico de una camarera a la que conoce. "Pero lo que pasa es que es colombiana", a?ade. "Que la den por culo entonces", zanja su interlocutor.

No se pudo escuchar mucho m¨¢s. La juez consider¨® que quedaba probado con esta peque?a muestra que las transcripciones que se hab¨ªan hecho de las cintas eran fieles a la realidad (cosa que negaban los abogados de la defensa). A pesar de la petici¨®n de la acusaci¨®n popular de que se escucharan los fragmentos m¨¢s relevantes, estos no han podido ser escuchados en la vista p¨²blica. El proceso ha continuado con las conclusiones de las partes. "Esas conversaciones ponen de manifiesto claramente las estrategias de la organizaci¨®n", ha afirmado en las suyas el fiscal.