Demasiada espuma

Nunca fue m¨¢s cierto que el dinero no compra la felicidad. Ni una vida longeva y apacible. Quien estaba llamada a ser la heredera del imperio farmac¨¦utico Johnson & Johnson muri¨® sola y abandonada a los 30 a?os. Tan abandonada que la polic¨ªa no pudo determinar la hora de su muerte porque llevaba tantos d¨ªas fallecida cuando fue encontrada el pasado lunes por su empleada del hogar que su cad¨¢ver estaba ya en descomposici¨®n. Nadie hab¨ªa echado en falta a la joven Casey Johnson, hija del due?o del equipo de f¨²tbol americano New York Jets y tataranieta del fundador de la fortuna Johnson & Johnson. Nadie. Ni sus padres, ni su hija adoptiva, ni sus amigas del famoseo y reinas del papel cuch¨¦. Absolutamente nadie. Ni tan siquiera la persona que la llamaba "mi mujer", su prometida, Tila Tequila.

Sin oficio conocido m¨¢s all¨¢ de pertenecer a la noche, la heredera era adicta a los focos y los esc¨¢ndalos

Aunque ausente en su muerte, Tequila ha estado muy presente desde entonces. Fue Tequila quien anunci¨® al espacio cibern¨¦tico que su esposa hab¨ªa dejado este mundo. A trav¨¦s de Twitter, la estrella bisexual de la telerrealidad cat¨®dica escribi¨®: "Todos, por favor, rezad por mi esposa Casey Johnson. Ha fallecido. Gracias a todos por vuestro amor y apoyo pero ahora debo desconectar para estar con mi familia"...

El compromiso reciente de Johnson con Tequila -escenificado sobre una cama, ambas en ropa interior y luciendo labios sugerentes, est¨¢ recogido en v¨ªdeo y colgado en internet- pudo ser la gota que colmara el vaso de la rica familia, que cort¨® todos los lazos con su descendiente y borr¨® su nombre de la lista de herederos. En esa ceremonia global, Tequila mostraba a los internautas un inmenso anillo de diamantes. Aunque una ex ¨ªntima amiga despechada de Johnson asegura que es puro cristal.

De momento se ha descartado que la muerte haya sido violenta, ya que el cad¨¢ver no presentaba signos de violencia. Los m¨¦dicos forenses ya han comenzado su trabajo pero los resultados de la autopsia pueden tardar hasta seis semanas. Johnson era diab¨¦tica y necesitaba medicaci¨®n continua. Pero en el pasado tambi¨¦n pas¨® por diversas cl¨ªnicas de rehabilitaci¨®n por su adicci¨®n a las drogas y el alcohol.

Sin oficio conocido m¨¢s all¨¢ de pertenecer a la noche y a la categor¨ªa de animal social, la heredera descarriada era adicta a los focos y los esc¨¢ndalos. Protagoniz¨® varios. Uno le enfrent¨® directamente con su t¨ªa Libet, al frente del imperio cosm¨¦tico. La madura mujer de 56 a?os le robaba el novio de 38 a la sobrina de 26. En una entrevista publicada en Vanity Fair en 2006, la mujer que aspiraba a lucir como la ambici¨®n rubia que fue Marilyn declaraba con desd¨¦n: "Una mujer vieja con mucho dinero puede ser un gran afrodis¨ªaco". En aquel momento se cerr¨® una de las primeras puertas al acceso a la fortuna familiar.

Amiga de otras celebridades a la caza de titulares en los que hablar de su ¨²ltima conquista -l¨¦ase Paris Hilton; Lindsay Lohan; Nicole Ritchie-, Johnson vivi¨® deprisa y muri¨® joven. Nacida en 1979, la joven sinti¨® la llamada de la maternidad en el a?o 2007 y adopt¨® a una ni?a en Kazajst¨¢n: la peque?a Ava, quien no viv¨ªa con su madre sino con su abuela ya que ¨¦sta hab¨ªa solicitado su custodia por los problemas de Casey con las drogas.

Desenga?ada de los hombres, la reina rubia de la nueva noche americana decidi¨® ampliar sus fronteras afectivas. Los tabloides -como siempre- revelaron su nuevo amor: Courtenay Semel, hija del ex consejero delegado de Yahoo. "Las herederas disfrutan de la alegr¨ªa s¨¢fica", titulaba alegremente The New York Post en 2006. Otra reina de la telerrealidad, en este caso brit¨¢nica pero probando suerte en Los ?ngeles, Jasmine Lennard, decidi¨® acoger bajo su ala a la desprotegida Jonhson, que en retorno le pag¨® asaltando su casa cuando ¨¦sta estaba fuera, rob¨¢ndole joyas, ropas y documentos y dej¨¢ndole una extra?a firma del crimen: un vibrador entre las s¨¢banas y una toalla tirada a los pies de la cama.

?C¨®mo descubri¨® Lennard que hab¨ªa sido Johnson la ladrona? Porque Semel, entre ruptura y reencuentro, tuvo una noche de pasi¨®n con Johnson y descubri¨® que llevaba las braguitas de Lennard. Una delicia para el Post. Casey Johnson, rica y famosa, pobre y abandonada, ya descansa en paz.

'Demasiada espuma' es un reportaje del suplemento DOMINGO del 10 de enero de 2010