Los residuos no se eternizar¨¢n en las centrales nucleares

Las nucleares espa?olas no podr¨¢n guardar de forma permanente el combustible usado y radiactivo que ahora acumulan en las piscinas ubicadas en recintos instalados junto al reactor. Es la medida pionera y m¨¢s significativa adoptada hasta ahora por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), m¨¢xima autoridad en materia at¨®mica del pa¨ªs, para extremar la seguridad de las plantas tras el accidente nuclear de la central japonesa de Fukushima. El organismo ha decidido, por este motivo, fijar un l¨ªmite al tiempo que el combustible -principalmente uranio, que posee alta actividad radiactiva durante miles de a?os- pueda permanecer en las instalaciones, seg¨²n aprob¨® el pleno del CSN del pasado octubre y que se comunic¨® ayer.

La medida, que dividi¨® la opini¨®n del pleno y se aprob¨® con tres votos a favor y los dos votos en contra de una consejera y de la presidenta del CSN, Carmen Mart¨ªnez Ten, razona que cuanto menos material radiactivo acumulen las centrales menor ser¨¢ la radiactividad que puedan emitir en caso de accidente. La diferencia de criterios fue tal que Ten incluso elabor¨® un voto particular, junto a la consejera Rosario Velasco, donde lamenta la falta de previsi¨®n y de rigor t¨¦cnico para tomar esta decisi¨®n. "Compartimos la preocupaci¨®n, pero antes de decidir es necesario definir criterios t¨¦cnicos contrastados, y ello supone un tiempo de reflexi¨®n", se?alan. Los partidarios de la medida, el vicepresidente, Luis G¨¢mir; y los consejeros Antonio Colino y Antoni Gurgui, defendieron, por su parte, que garantizar la seguridad de las plantas no tiene por qu¨¦ esperar m¨¢s tiempo, detallaron fuentes del CSN.

Esta limitaci¨®n supone una iniciativa sin precedentes, seg¨²n los expertos del organismo, aunque otros Estados europeos est¨¢n estudiando aprobar medidas similares tambi¨¦n a cuenta del accidente de Fukushima. En esa planta, que emiti¨® radiactividad tras sufrir un terremoto seguido de un tsunami, el material acumulado en las piscinas no tuvo un papel relevante, pero podr¨ªa haber empeorado la situaci¨®n si la fuga hubiese seguido descontrol¨¢ndose. "Fue un toque de atenci¨®n: debemos preguntarnos si es seguro seguir acumulando residuos en instalaciones que no han estado dise?adas para este fin", detallaron fuentes del CSN.

La decisi¨®n del Consejo pone de relieve la imprevisi¨®n del Gobierno en este aspecto: el almac¨¦n centralizado que deb¨ªa acoger estos residuos deber¨ªa haberse construido en 2010, seg¨²n las previsiones iniciales. El retraso forz¨® que en ese a?o se aspirara al menos a designar la localidad que acoger¨¢ el almac¨¦n, pero el Ministerio de Industria mantiene paralizada esa decisi¨®n despu¨¦s de que los t¨¦cnicos seleccionaran al municipio de Zarra (Valencia) seguido del de Asc¨® (Tarragona).

La direcci¨®n t¨¦cnica del CSN precisar¨¢, en el plazo de un a?o, cu¨¢l debe ser el tiempo m¨¢ximo que las centrales pueden acumular un determinado combustible. Una vez el material almacenado cumpla el l¨ªmite que se fije, deber¨¢ ser trasladado a otro recinto alejado del reactor. Mientras tanto, cada uno de los ocho reactores que emplea piscinas va incrementando el n¨²mero de barras de combustible que guardan junto al reactor: las plantas acumulan ya unos 11.500 bloques radiactivos -cada tipo de distinto tama?o y cantidad- y cada a?o suponen unas 150 toneladas m¨¢s, seg¨²n datos del CSN. Los dos reactores de Asc¨® ya est¨¢n construyendo un almac¨¦n propio alejado de las piscinas, a punto de saturarse, mientras la nuclear de Jos¨¦ Cabrera (Guadalajara) ya emplea un almac¨¦n. En este caso, el CSN tambi¨¦n analizar¨¢ que el material radiactivo de esta planta pueda manipularse con rapidez para responder a cualquier accidente.