Ciudades que piensan

Ser una smart city ¨Cciudad inteligente¨C es el t¨ªtulo que muchas urbes anhelan porque implica estar en consonancia con los avances tecnol¨®gicos, a la vez que se crea un espacio para y por el ciudadano. Un lugar donde el individuo vive en armon¨ªa con las comunicaciones y las infraestructuras en un entorno sostenible, desde el punto de vista econ¨®mico y ecol¨®gico. Una meta necesaria debido al aumento precipitado de la poblaci¨®n mundial, que crecer¨¢ en las ciudades un 75% en las pr¨®ximas cuatro d¨¦cadas, seg¨²n datos de Naciones Unidas, y que ya est¨¢ provocando que en muchas de ellas la vida sea lo contrario: insostenible.

Lugares donde los atascos obligan a las autoridades a reducir progresivamente la superficie dedicada a espacios abiertos, de forma que la calidad de vida de los ciudadanos merme un poco m¨¢s cada d¨ªa. Ante esta situaci¨®n, son muchos los que se est¨¢n planteando si el individuo dispone de herramientas suficientes para cambiarla, o tal vez lo puedan hacer las propias ciudades: urbes al servicio de las personas, comprometidas con el medio ambiente y con los elementos culturales e hist¨®ricos. En definitiva, conseguir que las ciudades sean inteligentes.

Esa es la filosof¨ªa fundamental de la Red Espa?ola de Ciudades Inteligentes que cuenta 53 miembros", dice de la Serna

¡°El concepto de smart city no es, en mi opini¨®n, sin¨®nimo de ciudad inteligente, sino de una gesti¨®n inteligente de la ciudad, de un espacio urbano que se organiza utilizando los medios que la innovaci¨®n tecnol¨®gica pone a su alcance para conseguir que los servicios que ofrece a sus ciudadanos sean cada vez mejores, m¨¢s eficientes y con un menor coste para la Administraci¨®n¡±, explica I?igo de la Serna, presidente de la Red Espa?ola de Ciudades Inteligentes (RECI) y alcalde de Santander.

Las ciudades piensan y ayudan a la persona en muchos de los aspectos sociales, como son la educaci¨®n, el transporte, la sanidad y la vivienda, entre otros. Aplicaciones inteligentes creadas para facilitar las tareas cotidianas, como saber cu¨¢ndo llega el pr¨®ximo autob¨²s, qu¨¦ farmacia est¨¢ de guardia en un momento concreto y ofrecer una herramienta que alerte a un hospital, mediante un bot¨®n, de que una persona mayor, que vive sola, empieza a encontrarse mal y necesita atenci¨®n, entre otras.

Espa?a, hacia las ciudades inteligente

- M¨¢laga: Veh¨ªculos libres de humos

En su apuesta por los coches el¨¦ctricos, la ciudad prepara un carril de recarga de bater¨ªas en movimiento, sin cables. Adem¨¢s: es posible encontrar aparcamiento con ayuda de una aplicaci¨®n inteligente

-Santander: Pisando ¡°ecoasfalto¡±

Ciudad pionera en emplear suelo fabricado en un 90% con productos reciclados, lo que reduce la contaminaci¨®n. Adem¨¢s: la gesti¨®n de los servicios p¨²blicos est¨¢ informatizada, facilitando la vida del ciudadano

- Barcelona: Contenedores que avisan si est¨¢n llenos

Los sensores instalados en los contenedores de basura de la ciudad detectan cuando est¨¢n llenos, optimizando as¨ª la recogida. Adem¨¢s: nuevos contadores de gas y agua smart permiten su lectura remota

- Madrid: Luces que se encienden al detectar personas

Farolas y sem¨¢foros funcionan con leds y en algunas ¨¢reas las luces se encienden al percibir al individuo. Adem¨¢s: el consumo de agua se hace con sensores que controlan su suministro

¡°Pero los beneficios que una smart city puede ofrecer van a¨²n m¨¢s all¨¢, y se extienden al ¨¢mbito econ¨®mico, puesto que el sector de la innovaci¨®n tecnol¨®gica tiene una enorme capacidad de crecimiento y de generaci¨®n de empleo. Tambi¨¦n implica una mayor transparencia en la gesti¨®n y m¨¢s participaci¨®n de los individuos en la vida de sus ciudades¡±, puntualiza el alcalde.

Seg¨²n De la Serna, la calificaci¨®n de ciudad inteligente depende del criterio particular de cada urbe: ¡°Cada uno est¨¢ aplicando su propia filosof¨ªa y todas son buenas¡±. La Secretar¨ªa de Estado de Telecomunicaciones junto a otras organizaciones est¨¢ intentando fijar unos est¨¢ndares. ¡°Se trata de llegar a una definici¨®n de smart city, precisando los atributos que la identifican, y los que sean capaces de determinar los ¨ªndices de inteligencia de cada ciudad¡±.

Entre las ciudades europeas a la vanguardia a este respecto, la reina, por segundo a?o consecutivo, es Copenhague, debido a que tiene una de las m¨¢s bajas emisiones de CO2 per c¨¢pita en el mundo y porque posee el plan de reducci¨®n de carbono m¨¢s ambicioso de todas las grandes capitales. En cuarto lugar est¨¢ Barcelona, seg¨²n un informe publicado en diciembre de 2013 y elaborado por el estratega clim¨¢tico Boyd Cohen.

¡°A nivel internacional hay ejemplos significativos en ¨¢reas sectoriales, como puede ser el trabajo que est¨¢ haciendo Estocolmo en la gesti¨®n del tr¨¢fico ¨Csistema de peajes urbanos sobre el concepto econ¨®mico de tarifas de congesti¨®n¨C; el de Singapur, respecto a los sistemas energ¨¦ticos inteligentes ¨Cinstalaci¨®n de miles de contadores en ubicaciones residenciales, comerciales e industriales para realizar pruebas y evaluar la viabilidad de posibles soluciones¨C, o el de R¨ªo de Janeiro, con la creaci¨®n de un Centro Inteligente de Operaciones ¨Cdonde se anticipa y se responde a distintas crisis¨C, ante el Mundial de F¨²tbol y los Juegos Ol¨ªmpicos¡±, a?ade de la Serna.

Para los expertos, el viejo continente es el referente mundial de estas urbes y en esto, Espa?a no est¨¢ a la cola. Barcelona cuenta con el Distrito 22 @ de Innovaci¨®n, una mezcla de planificaci¨®n urbana inteligente e innovaci¨®n empresarial. Este distrito de la ciudad se ha convertido en un polo de atracci¨®n para que empresarios locales e internacionales instalen sus negocios. Seg¨²n Boyd, la Ciudad Condal gana en Europa, aunque un estudio elaborado por Endesa declara a M¨¢laga la m¨¢s inteligente de Espa?a, tras la puesta en marcha por su ayuntamiento del proyecto Smartcity en 2009.

En tan solo cinco a?os, M¨¢laga ha reducido sus niveles de CO2 en 4.500 toneladas, lo que supone un ahorro energ¨¦tico del 20%. En el informe, tambi¨¦n se concluy¨® que entre las peores est¨¢n Jerez de la Frontera, Sabadell o Salamanca y que, entre las mejores, tambi¨¦n est¨¢n Madrid y Santander. Espa?a est¨¢ dando pasos de gigante en este aspecto, seg¨²n de la Serna. ¡°Y lo est¨¢ haciendo por una v¨ªa que no ha experimentado ning¨²n otro pa¨ªs, como es la de compartir experiencias entre ciudades. Esa es la filosof¨ªa fundamental de la Red Espa?ola de Ciudades Inteligentes que cuenta 53 miembros. Dicho esto, creo que a¨²n no hay ninguna ciudad que haya completado el proceso de ser una smart city. Son a¨²n muchos los retos y descubriremos nuevos objetivos y desaf¨ªos a medida que vayamos avanzando¡±, concluye.

Europa, en la cima de las 'smart cities'

Amsterdam: La bicicleta como m¨¦todo de transporte

El 67% de los viajes se hacen en bicicleta o a pie. Adem¨¢s: ?msterdam est¨¢ intentando ser un ejemplo de ciudad inteligente y asociaciones como Amsterdam Smart City dan prueba de ello

Estocolmo: 'Ciudad verde de Europa'

Alrededor del 40% de su superficie est¨¢ dedicada a espacios verdes. Adem¨¢s: en el Parque Real Nacional Urbano educan a los ciudadanos en temas relacionados con la ecolog¨ªa

Par¨ªs: Movilidad Compartida

El mayor avance de la capital francesa es la movilidad compartida basada en coches el¨¦ctricos y bicis. Adem¨¢s: esto ha reducido en un 5% la congesti¨®n de veh¨ªculos en la ciudad

Viena: Apuesta absoluta por las energ¨ªas renovables

Tiene el objetivo de obtener el 50% de su energ¨ªa de fuentes renovables para el 2030. Adem¨¢s: se asoci¨® con el proveedor local de energ¨ªa, Wien Energie, con el que desarrollan un modelo de crowdfunding