Son colegios, no trincheras
Unas horas antes de que una escuela en Pakist¨¢n se convirtiera en diana de un ataque talib¨¢n, la ONU divulg¨® las nuevas directrices para prevenir el uso militar de los centros educativos y proteger a los menores durante los conflictos
Rifles de combate entre pupitres, municiones al lado de murales de Bob Esponja, alambres y trincheras excavadas en patios de colegios. Y ni?os que ven vetado uno de los derechos m¨¢s b¨¢sicos: poder ir a la escuela sin miedo a ser v¨ªctima, objetivo o testigo de la violencia. Estas son las primeras im¨¢genes del v¨ªdeo de la campa?a de la Coalici¨®n Global para Proteger la Educaci¨®n de Ataques para erradicar el uso militar de las escuelas. El grupo, formado por una docena de ONG y organizaciones internacionales, es el promotor de las Directrices internacionales para proteger a los centros educativos en contextos de guerra, divulgadas este martes por la ONU en Ginebra.
El documento, no vinculante, insta a los Estados a adoptar medidas que eviten que las escuelas se conviertan en campo de batalla. En seis puntos, se resumen las pautas que las partes en conflictos deber¨ªan seguir. Al leerla se puede tener la sensaci¨®n de que sean indicaciones de sentido com¨²n, si no fuera porque, en las situaciones a las que se refieren, la protecci¨®n de los m¨¢s d¨¦biles no prima en las decisiones de los contendientes. Como cuando, habiendo una alternativa, se eligen escuelas o universidades como cuarteles o puntos de apoyo de una acci¨®n armada, obligando a las comunidades a elegir entre compartir las instalaciones con los militares ¡ªexponiendo al riesgo a los estudiantes¡ª o suspender las actividades.
"La aplicaci¨®n de las directrices significar¨ªa que las fuerzas de los Estados y grupos armados no estatales usar¨ªan las leyes internacionales y las buenas pr¨¢cticas para evitar que escuelas sean utilizadas como barracones, bases, campos de entrenamiento o centros de detenci¨®n. Las escuelas ser¨ªan menos expuestas a los ataques de las fuerzas opositoras; los ni?os no tendr¨ªan que convivir con el miedo por ir a una escuela ocupada por soldados. Los progenitores no tendr¨ªan que retener a sus hijas en casa por el riesgo de violencia sexual", explica desde Nueva York Diya Nijhowne, directora de la Coalici¨®n.
A pesar de la dificultad de la aplicaci¨®n sobre el terreno de las ¡°buenas pr¨¢cticas¡± recogidas en las directrices, Nijhowne subraya como positivo el hecho de que varios Estados que han protagonizados conflictos en los ¨²ltimos a?os se han expresado a favor de las directrices: Argelia, Croacia, Costa de Marfil, Liberia, M¨¦xico, Sud¨¢frica, Sud¨¢n del Sur. ¡°Algunos pa¨ªses que han vivido conflictos, como Filipinas o Colombia, ya tienen en su legislaci¨®n la protecci¨®n de las escuelas del uso militar, lo que quiere decir que entienden la importancia de acabar con esta pr¨¢ctica¡±, a?ade.
Una tremenda casualidad ha hecho que la publicaci¨®n de las directrices, resultado de dos a?os de consultas con Gobiernos, fuerzas militares, agencias de la ONU y organizaciones de la sociedad civil, coincida con el ataque talib¨¢n a una escuela en la ciudad de Peshawar, en el noroeste de Pakist¨¢n. En el asalto han muerto al menos 125 personas, de las que 100 eran menores. "No conocemos cu¨¢l era el estatus del colegio atacado, ni si el hecho de que fuera gestionado por el Ej¨¦rcito ha tenido algo que ver con su elecci¨®n como objetivo. Pero es casi seguro que no ha sido una coincidencia. Tendremos que esperar a tener m¨¢s detalles de lo que ha ocurrido", comenta Nijhowne.
La Coalici¨®n Global para Proteger la Educaci¨®n de Ataques (Global Coalition to Protect Education from Attack, GCPEA) es una coalici¨®n de organizaciones de caracter¨ªsticas ¨²nicas, que incluye a: ACNUR, Council for Assisting Refugee Academics (CARA), Geneva Call, Human Rights Watch, Institute International/IIE¡¯s Scholar Rescue Fund, Norwegian Refugee Council, Protect Education in Insecurity and Conflict, SAIH (El Fondo de Asistencia Internacional de los Estudiantes y Acad¨¦micos Noruegos), Save the Children, the Scholars at Risk Network, UNESCO, UNICEF y War Child Holland.
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