Anna Wintour viste los premios Tony

El nombre de Anna Wintour se asocia autom¨¢ticamente a la clase alta de la moda internacional. Y quiz¨¢ a la gran mayor¨ªa se le escapaba que la poderosa editora de Vogue USA tiene, adem¨¢s, una segunda pasi¨®n: el teatro.

Pero sus amigos de Broadway s¨ª lo sab¨ªan. Por eso, cuando el a?o pasado el productor teatral Jordan Lorth y el dise?ador de vestuario y actual presidente de la American Theater Wing, William Ivey Long, decidieron que deb¨ªan convertir la alfombra roja de los premios de Broadway en un evento que atrajera tanta atenci¨®n medi¨¢tica como la de los Oscar o los Globos solo se les ocurri¨® un nombre: Anna Wintour.

Contratada como asesora (seg¨²n Page Six, sin sueldo), lo primero que hizo fue ir a la gala de 2014. Sali¨® espantada. ¡°Acabo de estar en los premios Tony en Nueva York, y, dios, necesitan vuestra ayuda¡±, les dijo a unos futuros estilistas. Su primera sugerencia fue entonces contratar a Ed Filipowski, presidente de la agencia de relaciones publicaciones de moda KCD; y, como Wintour, un gran aficionado al teatro, e incluso productor de alguna obra.

Entre los dos, Wintour y Filipowski, consiguieron el domingo darle una vuelta de glamour a la alfombra del Radio City Music Hall que tuvo m¨¢s atenci¨®n en redes sociales que nunca. La decoraci¨®n fue uno de los primeros cambios que se vieron: transformaron la habitual peque?a carpa mal iluminada y fondo blanco en un elegante photocall de jard¨ªn vertical.

Adem¨¢s, organizaron la llegada de los actores y actrices dosificando los nombres conocidos a lo largo de las dos horas que dur¨® el pase¨ªllo y, como es habitual en los Oscar, dejaron a las grandes estrellas para el final. As¨ª, de los ¨²ltimos en llegar fueron Carey Mulligan, nominada por Skylight y vestida con un Balenciaga que disimulaba su reci¨¦n confirmado embarazo; Bradley Cooper, nominado por El hombre elefante y acompa?ado por su madre y su hermana (y no por su novia Irina Shayk, como se esperaba); Amanda Seyfried, que acaba de debutar en Off-Broadway, y eligi¨® un vestido corto de Oscar de la Renta; y Jennifer Lopez, la encargada de cerrar la alfombra, con un estilismo mucho m¨¢s sofisticado y moderado de lo habitual, firmado por Valentino Couture.

Pero m¨¢s all¨¢ de la organizaci¨®n y decorados, la verdadera funci¨®n de Wintour y Filipowski fue vestir a nominados e invitados. Ambos se encargaron de poner en contacto a las casas de moda con los actores, una pr¨¢ctica obvia en cualquier otro evento que no era habitual en la celebraci¨®n de los premios Tony. ¡°Hay dise?adores a los que les encanta el teatro e ir al teatro y lo respetan, pero no estoy segura de que hayan tenido una conexi¨®n con este mundo, as¨ª que nos alegr¨® poder facilitarlo y ayudar¡±, dijo la directora de Vogue el domingo, asegurando que el resultado no era solo responsabilidad suya.

Michael Kors, Vera Wang, Marc Jacobs, Zac Posen y Oscar de la Renta fueron algunos de los dise?adores que cedieron sus vestidos para la gala tanto a los actores de clase A como a los poco conocidos fuera de Broadway. Kristin Chenoweth, nominada y presentadora de la ceremonia, eligi¨® a Posen; como la ganadora del Tony a mejor actriz de reparto en una obra, Annaleigh Ashford; mientras otras candidatas e invitadas se decantaban por De la Renta (Elisabeth Moss), Ralph Lauren (Ruth Wilson), Naeem Khan (Vanessa Hudgens) o Delpozo (Rose Byrne).

En la lista de invitados tambi¨¦n se not¨® la influencia de la directora de Vogue. Decidida a que el evento fuera recogido por los medios especializados en moda, adem¨¢s de actrices y figuras como Jennifer Lopez o Ashley Tisdale que ya estaban invitadas por los propios Tony; pasearon tambi¨¦n por la alfombra las modelos Kendall Jenner, Amber Valletta, Bella Hadid o Constance Jablonski.

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