Giorgo Moroder: El abuelo del disco

"Se?iorrrrr Guillerrrrrrrrmo!, ?c¨®mo essst¨¢ usssted?¡±. El hombre al otro lado de la l¨ªnea puede que no suene como un joven de 24, como reza uno de sus temas recientes, pero la vitalidad de su voz tampoco se corresponde con alguien que ha pasado la frontera de los 75. Hace apenas tres a?os, Giorgio Moroder disfrutaba de la vida jugando al golf y haciendo crucigramas, un retiro dorado solo accesible a los pocos privilegiados que han creado algunas de las canciones m¨¢s famosas de las d¨¦cadas de los 70 y 80. Porque, si hace falta decirlo, estamos ante el cerebro detr¨¢s de cl¨¢sicos como I feel love o Love to love you baby, el tipo con bigote que ayud¨® a de? nir la m¨²sica disco, y el creador de bandas sonoras para El precio del poder o El expreso de medianoche.

Ahora, convertido en un venerable abuelo, ha regresado a la m¨²sica, y la culpa, como con muchas otras cosas, hay que atribu¨ªrsela a Daft Punk. ¡°No ten¨ªa ni idea de qu¨¦ iban a hacer con mi voz¡±, cuenta este italiano de los Dolomitas. Habla de Giorgio by Moroder, la canci¨®n en la que el d¨²o franc¨¦s le invit¨® a contar su historia y que acab¨® formando parte de Random access memories. ¡°Cuando lo escuch¨¦ pens¨¦, ¡®dios, esto es muy bueno¡¯. Tambi¨¦n fue muy emocionante escucharme a m¨ª mismo¡±. El timing no pudo ser mejor: poco antes le hab¨ªan invitado a ejercer como pinchadiscos en varios actos, descubri¨¦ndole una nueva faceta.

¡°No, nunca pens¨¦ que volver¨ªa a publicar un disco, y menos que empezar¨ªa una carrera de DJ¡±, concede. ¡°Pero, a mi edad, ya nada me sorprende¡±. Ni siquiera actuar ante miles de j¨®venes que podr¨ªan ser sus nietos, a la manera de una estrella de la EDM, la corriente de electr¨®nica de masas. ¡°Esa es una de las razones por las que he empezado a pinchar¡±, explica. ¡°Me encanta estar delante de 20.000 o 30.000 personas, es algo extraordinario. Poco a poco, yo mismo me estoy convirtiendo en una peque?a estrella¡±. Por supuesto, est¨¢ siendo modesto. Puede que solo la bola de espejos pueda competir con su e? gie con mostacho y gafas gigantes como icono de la m¨²sica de baile de los 70, cuando su alianza con Donna Summer ¨Cy Pete Belotte, colaborador de ambos y coautor de Hot Stuff¨C se convirti¨® en leyenda. Ahora, casi cuarenta a?os despu¨¦s, recurre a otro tipo de divas en D¨¦j¨¤ Vu: Britney Spears, Kylie Minogue, Sia, Charli XCX o Kelis. Solo Matthew Koma y Mikky Ekko rompen su idilio con las voces femeninas en este nuevo disco. ¡°Dir¨ªa que las voces de mujer funcionan mejor en el dance, le aportan sensualidad¡±, explica. ¡°Si piensas en la m¨²sica disco, las canciones m¨¢s famosas est¨¢n cantadas por mujeres: Donna Summer, Diana Ross, Gloria Gaynor¡­ Para m¨ª una chica siempre ser¨¢ mucho m¨¢s sexy que el m¨¢s sexy de los hombres. En el dance ellas siempre a?aden algo que los hombres no pueden aportar¡±.

Lo que s¨ª ha cambiado desde los 70 hasta ahora es la manera de producir m¨²sica pensada para la pista de baile. ¡°S¨ª, ahora es radicalmente distinto¡±, cuenta. ¡°En el pasado, cuando trabajaba con Donna Summer o David Bowie, estaba con varios m¨²sicos en el estudio y ten¨ªamos todo all¨ª: bater¨ªas, teclado, guitarras... En la actualidad casi siempre es una sola persona, o dos, quien hace el tema en un ordenador. Supongo que as¨ª es como son las cosas ahora. Y funciona: algunas cosas de la EDM est¨¢n muy bien hechas¡±. Esta nueva mec¨¢nica de trabajo ha provocado que Moroder no haya coincidido en el estudio con sus estrellas invitadas. ¡°En el mundo actual, los cantantes siempre est¨¢n ocupados¡±, se excusa. ¡°Creo que se sienten m¨¢s a gusto si est¨¢n con su propia gente y simplemente mandan una pista de voz. As¨ª hay mucho menos estr¨¦s: pueden grabar cuando quieran y te env¨ªan su parte terminada. Sia, por ejemplo, me mand¨® unas melod¨ªas, y supe inmediatamente que me gustaban¡±. Tambi¨¦n trabaj¨® de esta forma con Britney Spears, quien propuso una versi¨®n de Tom¡¯s diner, de Suzanne Vega. Moroder solo le a?adi¨® unos toques de vocoder. ¡°Me invit¨® al estudio el d¨ªa que grab¨® las voces¡±, cuenta, ¡°pero yo estaba en Europa¡±. El Moroder de 2015 tambi¨¦n ha abrazado los adelantos t¨¦cnicos sin mirar atr¨¢s. ¡°Utilic¨¦ tanto los sintetizadores en el pasado que ya estoy cansado de ellos¡±, con?esa.

Casi una herej¨ªa en un momento en el que miles de productores j¨®venes buscan el sonido c¨¢lido de los instrumentos anal¨®gicos. A ¨¦l no le afecta la nostalgia: ¡°Los nuevos sonidos son muy buenos, me encanta la limpieza del sonido digital¡±. Sin embargo, fue su estilo de producci¨®n de los 70, esa combinaci¨®n del ritmo marcado four to the ?oor y rotundas l¨ªneas de sintetizador, el que se ha ? ltrado en la historia de la m¨²sica electr¨®nica hasta hacerse omnipresente. Despu¨¦s de ver la escena de la cantina de La guerra de las galaxias se propuso componer algo que se acercase m¨¢s a su idea de la m¨²sica de baile del futuro. No es demasiado exagerado decir que lo consigui¨®. ¡°Bueno, no estoy seguro¡±, dice entre risas. ¡°En aquella ¨¦poca pensaba que as¨ª es como pod¨ªa sonar la m¨²sica en los clubs 20 a?os despu¨¦s, y creo que hay cosas de I Feel Love en la EDM: esa l¨ªnea de bajo que hace dadad¨¢-da-dadadad¨¢, los arpegios... No es exactamente el futuro que me hab¨ªa imaginado, pero no est¨¢ muy lejos¡±. De I feel love, el cr¨ªtico e historiador de la m¨²sica disco Peter Shapiro dice que fue ¡°el arquetipo de toda la electr¨®nica posterior¡±, mientras que su colega Jon Savage la cali?ca como ¡°una de las mejores canciones del siglo XX¡±.

Moroder, sin embargo, asegura que no sospechaba que ese y otros de sus temas se convertir¨ªan en cl¨¢sicos. ¡°Con Love to love you baby incluso me sent¨ªa un poco avergonzado al principio¡±, con? esa. ¡°Pensaba que era demasiado diferente a lo que se estaba haciendo entonces, que nadie iba a querer publicarla. Con I feel love s¨ª cre¨ªa que pod¨ªa funcionar bien, pero nunca pens¨¦ que pudiesen ser tan populares incluso 30 a?os despu¨¦s¡±. Ahora no hay d¨ªa que no reciba una alerta de prensa en el que se le menciona como in? uencia. ¡°Hoy mismo he le¨ªdo dos art¨ªculos as¨ª¡±, dice entre risas. ¡°Y a veces pienso ¡®?pero qu¨¦ dice este t¨ªo?, eso no se parece en nada a m¨ª¡¯¡±.

Otras, la similitud s¨ª es patente: ¡°Hay gente que roba un poco de m¨¢s, que simplemente cambia una nota de una l¨ªnea de bajo¡±. No quiere decir nombres, pero en alguna ocasi¨®n ha se?alado al score de Cliff Mart¨ªnez para Drive como ejemplo de alguien que traspas¨® la l¨ªnea del homenaje a la apropiaci¨®n. Para eso, pre? ere que hagan como Kanye West y que usen un sample: ¡°Mientras paguen, no hay problema¡±.

Ahora que ha regresado a la actividad, no tiene intenci¨®n de parar. Sus planes incluyen volver a uno de sus terrenos favoritos: la m¨²sica para el cine. No hay que olvidar que en los 80 gan¨® tres Oscars, por la banda sonora de El expreso de medianoche y las canciones principales de Flashdance y Top gun. ¡°Estoy negociando para hacer la banda sonora de una pel¨ªcula grande, con presupuesto de unos 80 millones de d¨®lares¡±, cuenta sin querer desvelar m¨¢s. Tambi¨¦n le esperan dos colaboraciones ya prometidas. Una es con Nile Rodgers, de Chic, otro m¨²sico que forj¨® su trayectoria en los 70 y al que Daft Punk tambi¨¦n reivindic¨®. La otra le unir¨¢ a Lady Gaga, quien le reclam¨® para su pr¨®ximo disco. ¡°?bamos a meternos en el estudio pero se pospuso¡±, cuenta. ¡°Luego yo estuve resfriado dos semanas, ahora estoy en Europa¡­ Tenemos que encontrar el momento adecuado. El mundo moderno es as¨ª¡±.