Seis charlas geniales para escuchar en bucle
Tener a un gur¨² en el sal¨®n de casa es posible gracias a TED, un fen¨®meno de masas por donde han pasado Bill Gates, Edward Snowden o Stephen Hawking
Cuenta el periodista Carmine Gallo, comunicador y columnista en Forbes.com, que durante una reuni¨®n en Par¨ªs con un grupo de j¨®venes empresarios, estos le comentaron que estaban realmente cansados de asistir a conferencias impartidas por oradores de la vieja escuela.
Algo de historia
La iniciativa surgi¨® hace 31 a?os, cuando el arquitecto y dise?ador gr¨¢fico Richard Saul Wurman organiz¨®, en 1984, el primer evento TED en Monterey, California. Descubri¨® al mundo los CDs, el 'e-book' y los gr¨¢ficos en 3D. Pero, a pesar del inter¨¦s que suscit¨®, a Wurman los n¨²meros no le cuadraron. Seis a?os m¨¢s tarde, y acompa?ado de Harry Marks, sali¨® bien. Desde entonces, TED organiza tres eventos anuales fijos ¨CTEDConference, TEDActive y TEDGlobal¨C y otros ocasionales. Sus cuarteles est¨¢n en Nueva York y Vancouver, desde donde se selecciona gente con buenas ideas capaz de comunicarlas en 18 minutos para brindar al p¨²blico "un viaje intelectual y emocional", seg¨²n Chris Anderson, al mando de TED desde 2000.
¨C?De la vieja escuela? ¨Cles pregunt¨® Gallo¨C ?Y cu¨¢l es exactamente la nueva escuela?
¨C Ya sabes, la de TED ¨Crespondieron.
Poco despu¨¦s, en Jap¨®n, donde el estadounidense impart¨ªa una charla, varias personas se le acercaron para decirle lo mucho que les gustaba el estilo norteamericano de comunicar.
¨C?El estilo norteamericano? ¨Crepiti¨® Gallo, levantando las cejas.
¨CS¨ª, ya sabe, como el de TED ¨Csonrieron los nipones.
Carmine Gallo se percat¨® de que, fuera donde fuera, todo el mundo hablaba de TED, una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro cuyas siglas significan Tecnolog¨ªa, Entretenimiento y Dise?o, y que se dedica, tal y como dice su eslogan, a comunicar ¡°ideas dignas de ser difundidas¡± (ideas worth spreading).
¨CMmmm¨C, se dijo. Puede que TED sea una idea digna de ser explicada¡
As¨ª que Gallo se puso manos a la obra y el a?o pasado public¨® Talk like TED: The 9 public-speaking secrets of the world¡¯s top minds (Habla como TED: Los nueve secretos para hablar en p¨²blico de las mentes m¨¢s brillantes del mundo), considerado en EE UU uno de los mejores libros de 2014. El autor estudia la pericia de una serie de oradores que ha conseguido que los ciclos de conferencias iniciados en 1984 se hayan convertido en un referente internacional. Cient¨ªficos, emprendedores, fil¨®sofos, m¨²sicos, l¨ªderes religiosos, fil¨¢ntropos, m¨¦dicos, ingenieros, arquitectos, pol¨ªticos, actores, escritores, fot¨®grafos, cocineros, economistas, activistas o periodistas. Los perfiles en TED son infinitos y en esa heterogeneidad reside su gran atractivo: todo est¨¢ interconectado y el mundo est¨¢ lleno de personas con ideas valiosas que aportar¡, aunque no todos sepan comunicarlas.
El poder de la vulnerabilidad, de Bren¨¦ Brown.
?Sab¨ªan que las charlas que se imparten en sus eventos anuales han sido traducidas a 90 idiomas y que algunas han sido visionadas on line hasta 20 y 30 millones de veces? En EE UU es muy com¨²n que los profesores utilicen las charlas TED como instrumentos educativos en clase. Lo que empez¨® como una tendencia de culto, hoy es un aut¨¦ntico fen¨®meno de masas. Sin duda es un buen producto. Las conferencias son accesibles a todo el mundo y est¨¢n impartidas de forma clara, concisa y amena. Pueden verse en cualquier momento y en casi cualquier idioma mediante subt¨ªtulos.
Esto ha sido posible gracias a otro gran acierto de su director, Chris Anderson, quien lanz¨® en 2009 el proyecto Abierto de Traducci¨®n para ¡°llegar a esos 4.500 millones de personas en el planeta que no hablan ingl¨¦s¡±. De momento, 15.000 voluntarios han realizado 50.000 traducciones en 104 idiomas. Toda una serie de atractivos que hacen que, seg¨²n Carmine Gallo ¨Cque se dedic¨® a analizar 500 de las mejores charlas de TED, a entrevistar a los conferenciantes y asesorarse por conocidos neurocient¨ªficos¨C la f¨®rmula TED sea perfecta para nuestro cerebro humano. Sus charlas resultan tremendamente adictivas sin que representen ¨Cincre¨ªble, pero cierto¨C ning¨²n peligro para la salud. Todo lo contrario.
?Matan las escuelas la creatividad?, una charla del experto en educaci¨®n Ken Robinson
Estar¨¢n de acuerdo en que con m¨¢s de 1.600 charlas colgadas en la Red es muy dif¨ªcil decidir cu¨¢les han sido las mejores, pero la audiencia marca su propio ranking. En el indiscutible n¨²mero uno est¨¢ la presentaci¨®n que imparti¨® el experto en educaci¨®n Ken Robinson, en 2006: C¨®mo la escuela mata la creatividad, la cual ha tenido 31 millones de visionados. Le sigue la psic¨®loga social Amy Cuddy con Tu lenguaje corporal modela como eres, impartida en 2012, que ha alcanzado 23 millones de visitas. Otros 20 millones de visionados tiene, por ahora, la conferencia que Simon Sinek, experto en liderazgo, dio en 2010. Y 18 millones la de Bren¨¦ Brown, El poder de la vulnerabilidad, gracias a la cual, por cierto, Brown fue fichada por la mism¨ªsima Oprah Winter, la muy poderosa presentadora de televisi¨®n.
El exempleado de la CIA y la NSA ofrece una charla llamada As¨ª es como recuperamos Internet
Puede que estos nombres tan made in the USA no les digan demasiado, pero tambi¨¦n hay muchas celebridades que han participado en este exitoso evento. Seguro que conoce a la mayor¨ªa: Steve Jobs, Bill Gates, Stephen Hawking o Edward Snowden (intervino mediante telepresencia, claro, ya que tras desvelar los secretos de espionaje de EE UU contin¨²a fugitivo en Rusia desde 2013); Larry Page (cofundador de Google); los expresidentes estadounidenses Al Gore o Bill Clinton; los m¨²sicos Bono (U2) o Paul Simon (Simon & Garfunkel); la primat¨®loga Jane Goodall¡
R¨¦plicas locales
Pero lo que les estamos contando es solo la primera y fecunda parte de una historia que promete ser muy larga. Las charlas se propagan a gran velocidad en todo el continente americano, Europa e incluso en Asia, ?frica y Ocean¨ªa. Y no solo a trav¨¦s de los visionados. Tambi¨¦n porque se est¨¢n multiplicando a gran velocidad los denominados eventos TEDx, iniciativas desarrolladas bajo su licencia para ayudar a las comunidades, organizaciones e individuos a conversar y ser part¨ªcipes del esp¨ªritu TED a nivel local. Una licencia totalmente gratuita que se otorga a cambio de cumplir una serie de requisitos con el fin de preservar la idea original. Ya se han celebrado en lugares tan dispares como La Habana, ?msterdam, R¨ªo de la Plata, Hong Kong, Johanesburgo, Sidney, Saig¨®n, Tesal¨®nica, Casablanca, Papeete, islas Gal¨¢pagos..., incluso en la prisi¨®n neoyorquina de Sing Sing.
Bill Gates y su charla C¨®mo los presupuestos del estado est¨¢n rompiendo las escuelas estadounidenses
Por supuesto, tambi¨¦n en Espa?a proliferan las TEDx (programas de conferencias locales), tanto en grandes ciudades ¨Cel pasado 27 de febrero tuvo lugar un ciclo de siete conferencias en el TEDx del barrio madrile?o de Mirasierra bajo el t¨ªtulo El cambio eres t¨²¨C como en otras poblaciones m¨¢s peque?as.
?Se imaginan cu¨¢ntas ideas para compartir, cu¨¢nto conocimiento expresado a trav¨¦s de un sistema completamente abierto? Esa debe ser quiz¨¢ la mayor gloria de TED, hacer que las grandes ideas, las iniciativas m¨¢s innovadoras y los sue?os m¨¢s esperanzadores puedan llegar, literalmente, a todo aquel que tenga acceso a Internet. Es, sin duda, la democratizaci¨®n total del conocimiento y la celebraci¨®n de la creatividad y de la excelencia.
Posiblemente, la mayor gloria de TED es hacer que las grandes ideas, las iniciativas m¨¢s innovadoras y los sue?os m¨¢s esperanzadores puedan llegar a todo el que tenga un terminal conectado a Internet
La iniciativa que TED est¨¢ llevando a cabo, y muchas otras que est¨¢n surgiendo en numerosos lugares de nuestro planeta, deber¨ªan recordarnos, una vez m¨¢s, que el mundo, aunque algunos se empe?en en vendernos lo contrario, est¨¢ lleno de gente admirable, ¨²til e inmensamente sabia. Tenerlo claro nos permite vislumbrar un futuro m¨¢s ilusionante porque, como reza un dicho hind¨² ¡°la llama de la sabidur¨ªa quema por completo la escoria¡±. Encima, es divertido y no cuesta dinero. Desde 2005 la organizaci¨®n otorga cada a?o un premio de un mill¨®n de d¨®lares a la persona que haya tenido una gran idea dirigida a cambiar el mundo. En 2014, lo gan¨® Charmian Gooch con un deseo muy contempor¨¢neo: acabar con la corrupci¨®n. Gooch, al mando de Global Witness desde 1993, trabaja para revelar quien est¨¢ detr¨¢s de las sociedades an¨®nimas de todo el planeta y desenmascarar a los personajes que mueven los hilos de estas corporaciones que, ampar¨¢ndose en su invisibilidad, financian guerras y c¨¢rteles de droga, saquean Estados o destruyen el medioambiente.
Tu lenguaje corporal modela qui¨¦n eres, de Amy Cuddy.
Un mill¨®n para el mejor
En la edici¨®n de 2013, el premiado fue alguien con un perfil muy diferente: el educador hind¨² Sugata Mitra, cuyo sue?o es construir una escuela en la nube ¨Cescuela virtual¨C en la que los ni?os se ense?en unos a otros. Mitra comprob¨® tras interesantes experimentos (coloc¨® un ordenador en una pared de un barrio muy pobre de Nueva Delhi y vio con c¨¢mara oculta c¨®mo los ni?os aprenden por s¨ª mismos, si est¨¢n motivados por la curiosidad y el inter¨¦s de los compa?eros), que ni?os oriundos de aldeas remotas que jam¨¢s hab¨ªan tocado un ordenador, no solo son capaces de apa?¨¢rselas para manejarlo, sino que se esfuerzan en aprender ingl¨¦s para entender c¨®mo funcionan los videojuegos.
C¨®mo los grandes l¨ªderes inspiran a la acci¨®n, de Simon Sinek.
En 2010, por poner un tercer ejemplo muy distinto, el galardonado fue el medi¨¢tico cocinero Jamie Oliver. ?Su sue?o? Revolucionar el mundo de la comida con el fin de animar a los ni?os y a las familias a alimentarse de forma saludable y a luchar contra la obesidad, una de las lacras del siglo XXI. Un mont¨®n de premiados y un mont¨®n de buen¨ªsimas ideas que pueden conocer al detalle en la web de TED.
C¨®mo ser un conferenciante al estilo TED
1. Libere al experto apasionado que hay en su interior: la pasi¨®n y el dominio del tema son las bases para una presentaci¨®n extraordinaria.
2. Cuente tres historias personales y conecte con el cerebro y el coraz¨®n del p¨²blico. Haga que sus oyentes empaticen.
3. Practique, interiorice su discurso y convi¨¦rtalo en una charla con amigos.
4. Ofrezca a su p¨²blico alg¨²n dato nuevo e inesperado que sacuda sus ideas y ayude a que vean el mundo con ojos nuevos.
5. Brinde a los espectadores un momento asombroso que provoque una respuesta emocional intensa, de alegr¨ªa, miedo o sorpresa.
6. Utilice el sentido del humor para que el p¨²blico baje la guardia. Ojo: sea divertido, pero no se haga el gracioso.
7. No se extienda: 18 minutos es un lapso lo bastante largo para contar algo importante, pero no tanto como para aburrir.
8. Otorgue protagonismo a la imagen: una idea se capta mejor a?adiendo alg¨²n impacto visual. Y olvide las listas¡
9. Mu¨¦strese tal y como es. Sea aut¨¦ntico, abierto o vulnerable si se tercia. Debe resultar cercano.
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