Tres votos

Frente a la bas¨ªlica de Jes¨²s de Medinaceli en Madrid se hab¨ªa formado una cola que se extend¨ªa a lo largo de varias manzanas. Cabizbajos y ateridos, los devotos esperaban a que el sacrist¨¢n abriera la puerta del templo para besar y pedirle favores a la imagen milagrosa. La niebla de esa madrugada imped¨ªa distinguir el punto en que esta cola de Jes¨²s de Medinaceli se un¨ªa varias calles m¨¢s all¨¢ a otra cola, que a su vez esperaba a que se abriera el famoso despacho de Do?a Manolita para comprar loter¨ªa de Navidad. Durante la noche, ambas formaciones, vigiladas por la polic¨ªa, hab¨ªan permanecido en silencio, pero a primera hora de la ma?ana del viernes comenzaron a moverse con gran ansiedad y aunque avanzaban en sentido contrario, cada una a su destino, esta gente buscaba el mismo milagro bajo la niebla, unos el milagro del azar, otros el de la divina misericordia. Para solucionar los problemas de la aperreada vida ambos poderes invocados eran cambiables, de modo que habr¨ªa sido lo mismo que al pie del altar de la iglesia se hubiera instalado un puesto de loter¨ªa y que en el despacho de Do?a Manolita se hubiera plantado la imagen del Jes¨²s de Medinaceli. Hoy, 20 de diciembre, se celebran en Espa?a elecciones generales. Hasta las ocho de la tarde, frente a las urnas, habr¨¢ otras colas que podr¨ªan confundirse con las que se formar¨¢n ante los despachos de las apuestas del Estado o ante las iglesias adonde los fieles ir¨¢n a rezar. En este caso tambi¨¦n podr¨ªan cambiarse la papeleta del voto, el d¨¦cimo de loter¨ªa y una s¨²plica al santo de tu devoci¨®n. Pero ?qu¨¦ es m¨¢s dif¨ªcil, que te toque el Gordo pasado ma?ana, que la divina providencia venga en tu ayuda o que el candidato elegido cumpla lo que ha prometido en la campa?a? La iglesia de Jes¨²s de Medinaceli, el despacho de Do?a Manolita, el colegio electoral de la esquina, tres votos para un sue?o irremediable.