Esta es la diferencia entre tristeza y depresi¨®n
La primera afecta a emociones b¨¢sicas. La segunda dura, al menos, dos semanas, e implica baj¨®n de autoestima o p¨¦rdida de peso. Tambi¨¦n hay penas largas
Para sentirnos tristes, tenemos que vivir experiencias dolorosas, frustrantes, desafortunadas, estresantes: la p¨¦rdida de un familiar, un divorcio, el desempleo, una grave enfermedad, la enemistad¡. Pero para sentirnos deprimidos, no es necesario que se haya cruzado un hecho dram¨¢tico, lamentable, hiriente. La depresi¨®n es resultado de la interacci¨®n de varios factores: gen¨¦tico, cambios neurobiol¨®gicos y ambientales. ¡°La tristeza es una emoci¨®n b¨¢sica que experimentamos por situaciones negativas: cuando muere un ser querido, no se cumplen las expectativas personales¡ Es como el miedo, la rabia, el asco", explica Luis Caballero, vocal de la Sociedad Espa?ola de Psiquiatr¨ªa.
"En cambio, la depresi¨®n es una enfermedad, en el sentido psiqui¨¢trico, en la que hay una tristeza patol¨®gica que es intensa y m¨¢s duradera y que est¨¢ asociada a otros s¨ªntomas. Estos son la anhedonia (la incapacidad para sentir placer), la abulia (notable falta de energ¨ªa), la p¨¦rdida de peso y apetito, trastornos del sue?o, fatiga, dificultades para concentrarse, y sucesi¨®n de ideas reiteradas de sentimiento de culpa, preocupaci¨®n excesiva por la salud y fantas¨ªas suicidas¡±, agrega el experto.
La depresi¨®n puede desencadenarse por los hechos tr¨¢gicos enumerados al principio. Pero tambi¨¦n, sin causa externa que la justifique. ¡°Puede surgir en una vida normal, sin pasar por situaciones estresantes¡±, expone Caballero, que, adem¨¢s, es jefe del servicio de psiquiatr¨ªa y psicolog¨ªa cl¨ªnica del grupo HM Hospitales CINAC.
Un aspecto para diferenciar la tristeza de la depresi¨®n es la duraci¨®n. El estado de ¨¢nimo depresivo con p¨¦rdida de inter¨¦s y agotamiento, dura, como m¨ªnimo, dos semanas.
Los cambios qu¨ªmicos del cuerpo influyen en el estado de ¨¢nimo, y los procesos de pensamiento y factores biol¨®gicos contribuyen en algunos casos de depresi¨®n. Un trastorno, que seg¨²n indica Jos¨¦ ?ngel Arbes¨², coordinador del Grupo de Trabajo de Salud Mental de SEMERGEN, cuando se manifiesta con intensidad afecta a la funcionalidad de la persona que lo sufre ¨Ctanto personal como familiar y social.
Para este especialista, ¡°se ha frivolizado con la palabra depresi¨®n¡±; y entre las causas, menciona que se confunde tambi¨¦n con otros problemas de salud mental. Por ejemplo, el trastorno adaptativo. ¡°Es un proceso de tristeza que dura unos seis meses y que presenta s¨ªntomas depresivos, pero no lo es realmente, como ocurre con la pena cuando perdemos un trabajo o a un ser querido¡±.
Existen se?ales sutiles que pueden ayudar a identificar la depresi¨®n, seg¨²n indica la American Psychological Association (APA), como la p¨¦rdida de identidad o de autoestima.
Una gen¨¦tica predispuesta
?Ha influido en un repunte de consultas por cuadros depresivos? "Ha podido desencadenar cuadros mixtos de ansiedad y depresi¨®n en personas predispuestas a ello, porque la depresi¨®n siempre se produce por la interacci¨®n de varios factores, gen¨¦ticos y externos¡±, incide el doctor Caballero.
?Y c¨®mo incide el factor gen¨¦tico? ¡°Convierte a una persona en vulnerable ante situaciones adversas¡±, se?ala Jos¨¦ ?ngel Arbes¨². Tambi¨¦n, existe la depresi¨®n end¨®gena, en la que el componente biol¨®gico y gen¨¦tico pesa tanto que el trastorno se puede hacer cr¨®nico y m¨¢s profundo.
La depresi¨®n afecta a entre el 4 y 5% de la poblaci¨®n en Espa?a, y el riesgo de padecer un episodio es el doble entre las mujeres debido a factores sociales y hormonales.
Otra diferencia con la tristeza es el da?o f¨ªsico. Seg¨²n Luis Caballero, la enfermedad se enmascara en ocasiones con s¨ªntomas que son la punta del iceberg. De hecho, hay veces que, por error, "se trata un cuadro de p¨¦rdida de peso, fatiga cr¨®nica o problemas de colon irritable, pero no se aborda la depresi¨®n, que es lo que est¨¢ de fondo¡±, advierte el doctor.
Identificar las causas que conducen a la depresi¨®n es el primer paso para tratarla, con ayuda profesional y la esperanza de una luz al final del t¨²nel. Cuando el enemigo es la tristeza, hay estrategias m¨¢s sencillas, como llamar a un amigo una desabrida tarde de domingo.
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