Una ¡®rave¡¯ en el fondo del oc¨¦ano

Los ruidos creados por el hombre o la naturaleza llegan hasta lo m¨¢s profundo del mar. Un hidr¨®fono colocado en el lecho de la fosa de las Marianas ha grabado desde el ruido de los motores de los barcos que surcaban el mar 11.000 metros m¨¢s arriba hasta el sobrecogedor estruendo de un terremoto. De hecho, apenas hay silencio ah¨ª abajo.

Los oc¨¦anos soportan una creciente contaminaci¨®n ac¨²stica de origen humano. En las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas, el transporte mar¨ªtimo ha crecido desde los 2.600 millones de toneladas en 1970 a 8.400 millones en 2010, seg¨²n las estad¨ªsticas de la ONU. Y la ciencia acumula pruebas de que tanto ruido est¨¢ alterando la conducta de muchas especies, en especial los mam¨ªferos marinos. Pero, ?llega ese ruido a lo m¨¢s profundo del mar?

Para responder a esa pregunta, cient¨ªficos de la Administraci¨®n Nacional Oce¨¢nica y Atmosf¨¦rica de EE UU (NOAA, por sus siglas en ingl¨¦s) y la Universidad Estatal de Oreg¨®n sumergieron un hidr¨®fono a 10.971 metros de profundidad en el llamado "abismo Challenger", la zona m¨¢s profunda de la fosa de las Marianas, en el oc¨¦ano Pac¨ªfico.

El sonido m¨¢s recurrente en la fosa de las Marianas es el de los terremotos, seguido del de los barcos

"Quer¨ªamos tener los niveles de referencia de sonido en lo que debe ser uno de los lugares m¨¢s silenciosos de la Tierra", dice en un correo electr¨®nico el ocean¨®grafo de la NOAA y responsable cient¨ªfico de la misi¨®n, Robert Dziak. "Pero, a la hora de la verdad, hay un ruido casi constante tanto de origen humano como natural", a?ade.

El aparato, protegido con una carcasa especial de titanio para soportar la enorme presi¨®n, estuvo grabando durante 22 d¨ªas hasta que no cab¨ªa m¨¢s ruido en su disco duro. Tras analizar las grabaciones, los investigadores pudieron determinar la mayor¨ªa de las fuentes de los sonidos y su recurrencia.

Seg¨²n reconoce?Dziak,? "el ambiente sonoro del abismo Challenger est¨¢ dominado por el sonido de los terremotos, tanto cercanos como lejanos, as¨ª como por el distintivo quejido de las ballenas". Pero, para ¨¦l, lo m¨¢s abrumador fue el sonido de un tif¨®n de fuerza 4 o el de un terremoto de magnitud 5 cuyo hipocentro estuvo 1.000 metros por encima del hidr¨®fono.

"Tambi¨¦n hay mucho ruido procedente del tr¨¢fico mar¨ªtimo, identificable por el patr¨®n de sonido que crean los propulsores de los barcos al pasar", a?ade. La zona de la fosa de las Marianas es paso obligado para muchas de las rutas mar¨ªtimas del Pac¨ªfico que conectan China y las Filipinas con Australia y Am¨¦rica.

Como ya demostr¨® el director de cine y explorador marino James Cameron y otras misiones en el pasado, descender a tanta profundidad no es una misi¨®n sencilla, aunque se trate de bajar un micr¨®fono de agua. Los cient¨ªficos tuvieron que descenderlo poco a poco para que un aumento repentino de la presi¨®n no lo da?ara. Una vez lleno su disco duro, en julio, tuvieron que esperar a que acabara la temporada de tifones para ir a recogerlo, en noviembre pasado. Desde entonces, estuvieron analizando todos sus ruidos.

As¨ª suena un terremoto desde el abismo Challenger

"Sabemos que el sonido en los oc¨¦anos del mundo ha ido en aumento desde 1960, en su mayor¨ªa debido al incremento generado por los barcos de un comercio en alza", comenta el ocean¨®grafo de la NOAA, que explica para qu¨¦ bajaron un hidr¨®fono a la sima del mundo: "Quer¨ªamos medir los niveles de ruido en el abismo Challenger para tener un punto de referencia con el que comparar futuros niveles y documentar as¨ª la subida del ruido". En 2017 volver¨¢n al abismo, esta vez tambi¨¦n con una c¨¢mara.