El cambio clim¨¢tico se ceba con las especies ya m¨¢s amenazadas

El cambio clim¨¢tico est¨¢ alterando las condiciones de la vida en el planeta. Pero su impacto no es el mismo para todos los seres vivos y ecosistemas. Un estudio con los ant¨ªlopes africanos muestra ahora que las especies con una distribuci¨®n geogr¨¢fica m¨¢s reducida ser¨¢n castigadas de forma desproporcionada por el calentamiento global, viendo sus peque?os h¨¢bitat menguar a¨²n m¨¢s. Para algunas, a finales de siglo ya no habr¨¢ sitio donde ir, literalmente.

La aparente paradoja que plantea la reciente noticia sobre el reverdecimiento del planeta por el aumento de las emisiones de CO₂ muestra lo complejo que es el cambio clim¨¢tico. A algunas especies les puede venir bien la elevaci¨®n de la temperatura. En las zonas templadas del planeta, por ejemplo, se est¨¢ produciendo un fen¨®meno de traslaci¨®n de muchos animales y plantas hacia un norte cada vez m¨¢s benigno. La migraci¨®n ya se estar¨ªa produciendo tambi¨¦n entre especies de zonas c¨¢lidas, huyendo del excesivo calor.

Pero hay especies con las que el cambio clim¨¢tico se va a cebar. Se trata de aquellos animales que por variadas razones, muchas provocadas por los humanos, tienen un rango de distribuci¨®n reducido. Ya sea por la destrucci¨®n de su h¨¢bitat original, por el avance de la ganader¨ªa, la agricultura, las guerras humanas o el acoso del furtivismo, muchas especies viven hoy casi arrinconadas. Tanto, que muchas de ellas aparecen como amenazadas en la lista roja de la Uni¨®n Internacional para la Conservaci¨®n de la Naturaleza (UICN). Son estas las que lo van a pasar desproporcionadamente peor con el calentamiento global.

Es lo que han comprobado dos investigadores estudiando a los ant¨ªlopes africanos. Con m¨¢s de 70 especies en todo el continente, los hay en todo tipo de ecosistemas. Algunas especies cuentan sus ejemplares por millones, mientras hay otras de las que apenas quedan 300 ejemplares. En la mayor¨ªa de los casos estos herb¨ªvoros son la base del ecosistema como dispersores de semillas y como presas de los depredadores. Los bi¨®logos de la Universidad de Liverpool (Reino Unido),?Jakob Bro-J?rgensen y Nicola Frost, eligieron a esta subfamilia de ungulados para estudiar c¨®mo afecta el cambio clim¨¢tico a las especies ya m¨¢s amenazadas.

Los 320 ant¨ªlopes de Hunter que sobreviven en las llanuras costeras de Kenia no tendr¨¢n donde ir si la zona se vuelve m¨¢s fr¨ªa y h¨²meda

"Nuestro estudio muestra que el cambio clim¨¢tico probablemente castigue a la vida salvaje m¨¢s duro de lo que cre¨ªamos porque las especies que ya est¨¢n en peligro pueden llegar a perder una mayor proporci¨®n de sus ¨¢reas de distribuci¨®n", dice Bro-J?rgensen. Actualmente un tercio de las especies de ant¨ªlopes ya est¨¢n, con un mayor o menor grado de amenaza, en la lista roja de la UICN. Para 2080, seg¨²n este trabajo, el 82% de las 72 especies de ant¨ªlopes africanos ver¨¢n empeorar las condiciones clim¨¢ticas de su h¨¢bitat. Y un tercio de ellas perder¨¢n al menos la mitad del espacio en el que hoy viven.

Hay que tener en cuenta que el cambio clim¨¢tico se suma a las amenazas ya existentes, como el deterioro y fragmentaci¨®n del h¨¢bitat y la presi¨®n humana. Pero, aunque su impacto sea generalizado, las especies con h¨¢bitat m¨¢s reducidos ser¨¢n las m¨¢s perjudicadas. De hecho, el estudio, publicado en Current Biology, no prev¨¦ que ninguna especie salga de la lista de la IUCN para 2080. En cambio, s¨ª aventura la entrada o elevaci¨®n del grado de amenaza de una decena de especies.

59 especies de ant¨ªlopes africanos ver¨¢n reducidos sus h¨¢bitats a final de siglo por el cambio clim¨¢tico

Al menos cuatro especies no existir¨¢n, en el escenario m¨¢s adverso, cuando acabe este siglo. Algunas tienen una distribuci¨®n muy reducida y cuentan con no m¨¢s de 300 ejemplares, como es el caso de los adax (Addax nasomaculatus) que quedan en ¨¢reas de N¨ªger y Chad. Otras especies, como el hirola (Beatragus hunteri) han visto mermada su poblaci¨®n en un 98% desde 1970 debido a la p¨¦rdida de su h¨¢bitat original. Hoy, apenas 320 ejemplares sobreviven en las llanuras costeras de Kenia. "Es preocupante que nuestras proyecciones indiquen que, al estar justo enfrente del Oc¨¦ano ?ndico, este ant¨ªlope pueda quedarse sin sitio al que ir si la regi¨®n se vuelve m¨¢s h¨²meda como indican las predicciones", escriben los autores del estudio.

"En teor¨ªa, a¨²n estamos a tiempo de salvar a todas las especies de ant¨ªlopes, pero sin un aumento significativo del apoyo a las iniciativas de conservaci¨®n, al menos dos especies est¨¢n en peligro inminente de extinguirse", comenta Bro-J?rgensen en referencia al addax y al hirola. Precisamente, el primero protagonizar¨¢ una conferencia en Barcelona la semana que viene organizada por el Fondo para la Conservaci¨®n del Sahara.

A diferencia de otros impactos casi inevitables del cambio clim¨¢tico, para los ant¨ªlopes africanos m¨¢s amenazados y el resto de especies con una distribuci¨®n limitada existen algunas medidas que podr¨ªan mitigar su impacto. Adem¨¢s del aumento de las ¨¢reas protegidas, los autores de esta investigaci¨®n se?alan la necesidad de frenar el avance de la agricultura y la conexi¨®n entre ¨¢reas protegidas mediante corredores. En ¨²ltima instancia, su modelo tambi¨¦n se?ala las zonas a las que se podr¨ªa llevar, aunque fuera volando, a las especies m¨¢s en peligro para que tuvieran una segunda oportunidad.