Un poema para defender los derechos de los LGTBI
Lee Mokobe es un poeta sudafricano que ha convertido su experiencia de discriminaci¨®n como ¡°negro, pobre, queer, transg¨¦nero¡± en poes¨ªa comprometida
Lee Mokobe se ha puesto delante de un auditorio y ha explicado c¨®mo se siente un joven que se enfrenta a un entorno en el que no se acepta que se sienta como un chico a pesar de haber nacido con un cuerpo de chica.
Fui un misterio anat¨®mico, una pregunta que se qued¨® sin respuesta, un caminante por la cuerda floja entre el ni?o torpe y la ni?a que pide disculpas. Y al cumplir los 12, la fase muchacho dejo de parecer encantadora. Encontr¨® t¨ªas nost¨¢lgicas que quer¨ªan verme las rodillas a la sombra de las faldas y me recordaban que mi actitud nunca iba a traerme un marido en casa, que yo existo para el matrimonio heterosexual y la procreaci¨®n. Y me tragu¨¦ sus insultos junto con sus afrentes. Naturalmente, no sal¨ª del armario.
Es un fragmento de la historia de Lee. La que cont¨® durante el evento TEDWomen2015 en la ciudad californiana de Monterrey. Habr¨ªa que decir, m¨¢s bien, la que declam¨®. Lee Mokobe es un poeta sudafricano de 21 a?os, apenas 20 durante la conferencia, afincado en Estados Unidos y que se ha convertido en uno de los estandartes de la lucha por los derechos del colectivo LGTBI.
Su poes¨ªa en la iniciativa TED ha superado ya el mill¨®n de visualizaciones y as¨ª es c¨®mo ha explicado al mundo c¨®mo se siente un joven transexual y c¨®mo se enfrenta a un entorno hostil. Tambi¨¦n, aunque no est¨¢ en su poema, Lee Mokobe transmite su compromiso durante su actuaci¨®n. S¨ª, Lee es un artista comprometido. ¡°Creo que cuando tocas las emociones de alguien, cuando apelas a la conciencia de alguien, le est¨¢s empujando a posicionarse, a dar una respuesta y habitualmente lo hace con mucha humanidad. Cuando creas arte que incite a una respuesta, obligas a las personas a ser introspectivas, a mirar dentro de s¨ª mismo y de los dem¨¢s para encontrar una soluci¨®n¡±, explica Mokobe, para justificar su convicci¨®n en el poder transformador del arte.
Mokobe ha elegido la poes¨ªa declamada como su forma de expresi¨®n y de lucha. Los motivos por los que ha optado por este g¨¦nero, que se consolida con fuerza en las ciudades africanas, aparecen de manera sencilla en sus explicaciones: ¡°Hablando honestamente, el arte de transmitir historias a trav¨¦s de la oratoria ha existido a lo largo de los tiempos. Mis ancestros compartieron relatos de dolor, de triunfo y ense?anzas morales alrededor de hogueras. Yo he intercambiado ese entorno por el escenario, pero el antiguo concepto permanece igual. Recitar es una forma de expresarse y de relacionarse con el mundo. Cualquier manifestaci¨®n art¨ªstica est¨¢ pensada para expresar las emociones del individuo, esta tambi¨¦n. Es expresi¨®n libre.
Es un tipo menudo, delicado y de cara ani?ada, pero al mismo tiempo expresa determinaci¨®n y da la impresi¨®n de que Lee Mokobe es brutalmente honesto. As¨ª al menos responde a todas las preguntas, por ejemplo, cuando se le interroga acerca de su experiencia personal, ¨ªntima. ¡°Soy negro, pobre, queer (no heterosexuales) y transg¨¦nero. Todo eso ha condicionado mi trabajo. Es dif¨ªcil tener una existencia como la m¨ªa y no enfrentarse a la injusticia en cualquiera de sus formas. Escribir sobre ello me sirve para que esa injusticia sist¨¦mica y social no me derrote¡±, confiesa el poeta. Como sudafricano afincado en Estados Unidos tambi¨¦n encuentra algunas diferencias: ¡°En Estados Unidos, los poemas que hablan sobre los problemas sociales se hacen habitualmente virales y tienen mucha influencia porque los artistas influyen en la opini¨®n p¨²blica. En Sud¨¢frica, tambi¨¦n pasa pero en otra escala, todav¨ªa un poco incierta. El efecto domin¨® de la poes¨ªa, su capacidad para provocar cambios, es todav¨ªa escaso, pero va creciendo a pasos agigantados. He denunciado muchas situaciones de injusticia en Sud¨¢frica y quiz¨¢ alguien pueda pensar que desprecio a mi pa¨ªs. En realidad, me encanta Sud¨¢frica, lo que no me gusta es c¨®mo se trata a los desfavorecidos¡±.
Este joven, que se ha hecho conocido a trav¨¦s de las redes por su defensa de los derechos del colectivo LGTBI, no se considera un militante, s¨®lo una persona ¡°que recuerda sin complejos que somos humanos, cada uno con sus particularidades¡±. A pesar de esos matices est¨¢ convencido de llevar adelante su combate. ¡°?Cu¨¢ndo has visto glorificar a personas que han luchado por sus derechos?¡±, se pregunta el poeta. ¡°En ning¨²n momento de la historia los oprimidos han sido alabados hasta que no han ganado, mientras tanto son, sistem¨¢ticamente, cabezas de turco, los enemigos de la sociedad¡±, concluye.
Corren tiempos duros para el colectivo LGTBI en ?frica, con el endurecimiento de las leyes que les persiguen en muchos pa¨ªses del continente. Sin embargo, nunca hasta ahora los defensores de sus derechos han hablado tan alto, nunca sus reivindicaciones han sido tan p¨²blicas, nunca ha habido tantos artistas comprometidos dispuestos a utilizar su popularidad para dar voz a este colectivo. ¡°A medida que los Gobiernos se vuelven m¨¢s intolerantes contra las personas del colectivo LGTBI, los miembros de estos colectivos se ven obligados a unirse y a reivindicar para sobrevivir¡±, explica Mokobe. Y a?ade: ¡°El maltrato a la gente diferente es un problema de respeto de los derechos humanos y hasta que no sea considerado as¨ª, no parar¨¢ de haber actuaciones, discursos o protestas a cualquier nivel¡±.
De la misma manera, los raperos y los poetas se han ido convirtiendo en aut¨¦nticos ¨ªdolos para la juventud africana, sobre todo la urbana. Su prestigio social y ascendencia les han convertido en modelo para muchos. Lee confiesa que es consciente de esa situaci¨®n, pero que le resulta ¡°muy duro¡±. El joven poeta no quiere cargar con esa responsabilidad: ¡°A m¨ª me gusta vivir sin complejos mi vida y mis sue?os y es dif¨ªcil hacerlo pensando que a veces le puedes fallar a alguien, que algunas personas se pueden sentir decepcionadas por algo que hagas. Pero a la vez creo que es importante aprovechar mi visibilidad para que algunos j¨®venes sepan que hay m¨¢s gente como ellos y que pueden habitar todos los espacios del mundo¡±.
Es dif¨ªcil tener una existencia como la m¨ªa y no enfrentarse a la injusticia en cualquiera de sus formas
Lee Mokobe
Mokobe ha tenido reconocimientos y premios, pero sin duda su aparici¨®n en las charlas TED es lo que ha terminado de hacerle popular. ¡°Es cierto que ha cambiado, en parte, mi entorno. Tengo mucha m¨¢s visibilidad y hay gente que se fija en m¨ª para entender mi experiencia y, quiz¨¢, para tratar de conocerse mejor a s¨ª mismas. Hay gente que no era consciente de que hubiese personas transg¨¦nero en Sud¨¢frica, hasta que mi charla en TED no se difundi¨® por internet. Eso ha ayudado a dar un sentido de comunidad que si no, no hubiese sido posible¡±, comenta.
Ahora, Lee est¨¢ afincado en Estados Unidos y tiene un nuevo reto. Se ha propuesto ¡°legitimar mi condici¨®n sexual¡±, seg¨²n ¨¦l mismo expresa. Mokobe es todav¨ªa muy joven y por eso trata de orientar sus esfuerzos en dos sentidos, por un lado, mejorar su t¨¦cnica y sus condiciones art¨ªsticas. Pero, por otro, aprovechar su popularidad para beneficiar a los dem¨¢s. ¡°Estoy trabajando duro¡±, revela, ¡°para mejorar como artista y mejorar mi formaci¨®n. Y estoy trabajando duro porque, cuando lo consiga podr¨¦ conseguir becas para j¨®venes aspirantes a escritores sudafricanos¡±. ¡°Por primera vez en a?os, me he dado cuenta de que debo trabajar para mejorar yo, con el objetivo de poder ayudar a otros en un futuro pr¨®ximo¡±.
* Wiriko es una asociaci¨®n cultural que tiene como objetivo la difusi¨®n de las manifestaciones art¨ªsticas y las culturales africanas contempor¨¢neas. Desarrolla actividades de divulgaci¨®n a trav¨¦s de un magac¨ªn en internet y de formaci¨®n mediante un Aula Virtual.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
M¨¢s informaci¨®n
El refugio del Orgullo
Archivado En
- Desarrollo ?frica
- Discriminaci¨®n sexual
- Agenda Post-2015
- Activismo Lgtbiq
- Comunidad Lgtbiq
- Poes¨ªa
- Indicadores sociales
- Derechos civiles
- Activismo
- Derechos humanos
- Grupos sociales
- Literatura
- ?frica
- Desarrollo sostenible
- Discriminaci¨®n
- Cultura
- Prejuicios
- Organizaciones internacionales
- Problemas sociales
- Sociedad
- Planeta Futuro