?Cu¨¢ndo puedo decirle a alguien que apague su cigarrillo electr¨®nico y cu¨¢ndo me tengo que aguantar?
En pleno debate cient¨ªfico sobre su uso, nace un c¨®digo de buenas pr¨¢cticas para lugares p¨²blicos
?Sabe lo que puede hacer cuando en una cafeter¨ªa un desconocido empieza a fumar un cigarrillo electr¨®nico y a usted le molesta el vapor? Pedirle que lo apague, pero con mucha educaci¨®n. El vapeador no est¨¢ incumpliendo la ley (en Espa?a, la legislaci¨®n permite el consumo de cigarrillos electr¨®nicos a mayores de edad en bares, restaurantes y cafeter¨ªas; y lo restringe en hospitales, colegios y transporte p¨²blico), pero la Federaci¨®n Espa?ola de Hosteler¨ªa y la Asociaci¨®n Nacional del Cigarrillo Electr¨®nico han lanzado un c¨®digo de convivencia en el que se insta a los hosteleros a solicitar la interrupci¨®n del uso del cigarrillo electr¨®nico ante la queja de un tercero.
El resto de buenas pr¨¢cticas pasa por no vender en los locales los l¨ªquidos para cargarlo, evitar el vapeo si el local est¨¢ muy frecuentado por menores o informar en un cartel de que el uso de e-cigs est¨¢ aprobado por la ley. El c¨®digo nace justo en medio de un importante debate cient¨ªfico sobre la utilidad de estos instrumentos. Mientras que el Colegio de M¨¦dicos de Reino Unido promueve el uso de vapeadores para dejar de fumar, como una especie de mal menor, (¡°ayudan a desengancharse y, sin ser inocuos, reducen da?os¡±, alegan), las sociedades m¨¦dicas espa?olas advierten de que tienen efectos sobre la salud a largo plazo que a¨²n se desconocen.
Fumar golosina de mora azul o tarta de fresa
En EE UU cada vez hay m¨¢s j¨®venes que vapean y menos que echan mano del cigarrillo tradicional, hasta el punto de que la Agencia del Medicamento de EE UU (FDA) se vio obligada hace unos meses a prohibir el consumo de e-cigs en menores de 18 a?os, preocupada por su r¨¢pida expansi¨®n. Sin embargo, pocos inhalaban nicotina (solo el 22%), sino cosas tan extra?as como helado de tarta de fresa o golosina de mora azul (el 66%). Conviene aclarar que estos dispositivos funcionan con bater¨ªa calentando l¨ªquidos que emanan un vapor que el consumidor inhala, con cargas que pueden contener nicotina (que, al fin y al cabo, no es lo peor del tabaco, sino el alquitr¨¢n y la combusti¨®n de otros t¨®xicos) o esas disparatadas esencias que tanto gustan a los adolescentes americanos, seg¨²n Tobacco control. El fen¨®meno se llama flavouring: algo as¨ª como saboreando.
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