La gente no puede dejar de hablar de estas 8 cosas de los Grammy

En su discurso final, la gran triunfadora de la gala, Adele, lo dijo: "Tu disco nos ha alumbrado a todos". Y eso es lo que piensa todo el mundo: que Lemonade, de Beyonc¨¦, es mucho m¨¢s valiente, inteligente e influyente que 25, de Adele. Pero gan¨® 25. De nueve nominaciones, Beyonc¨¦ solo se llev¨® dos. De cinco, Adele hizo pleno.?

Presentada por James Corden, la 59 ceremonia de los Grammy (en el Staples Center de Los ?ngeles) dio para mucho. Estos son los temas de los que todo el mundo habla...

La angustia de ver a Beyonc¨¦ (embarazada) hacer equilibrios en una silla

Seguramente fue el momento de m¨¢s tensi¨®n de la historia de las galas televisadas. Cuando se movi¨® la silla para atr¨¢s, el coraz¨®n del mundo se par¨®: ?cuidado que esa mujer est¨¢ embarazada! ?Y de mellizos! El truco sali¨® bien y todos respiramos aliviados. La historia de la m¨²sica y las ceremonias televisadas tendr¨¢n un antes y un despu¨¦s de la actuaci¨®n de Beyonc¨¦ en los Grammy. Y no solo por la silla.

Sali¨® como una reina (corona incluida) o una virgen (ese velo), con su embarazo viento en popa, con un vestido de pedrer¨ªa y transparencias, con flores por todas partes... Estuvo tres minutos sin cantar, exhibi¨¦ndose, movi¨¦ndose de forma sensual. Mientras, se superpon¨ªan im¨¢genes grabadas de ella misma. Sofisticaci¨®n, elegancia. Cuando empez¨® a cantar (Love drought y Sandcastles) ya todo el mundo estaba alucinando con el misticismo que desprend¨ªa aquello. Fue sutil a la vez que barroco. El momento perfecto para coronarla como el fen¨®meno m¨¢s colosal de la m¨²sica actual. Por si hab¨ªa alguna duda.

Adele para su actuaci¨®n y nos emociona a todos

La fragilidad de Adele apareci¨® en el peor momento: cuando rend¨ªa homenaje a uno de sus ¨ªdolos, George Michael. La cantante, aparentemente por no sonar en tono, par¨® la actuaci¨®n ante el estupor de todos. Hab¨ªa que ver las caras de Jennifer Lopez, Beyonc¨¦ o Jay Z en el patio de butacas. "Lo siento, la he cagado. Tenemos que parar", dijo la brit¨¢nica. El mundo se le cay¨® encima. Comenz¨® de nuevo, pero fue una actuaci¨®n fr¨ªa que no se calent¨® hasta el final. La cantante acab¨® llorando y muy contrariada. Otro en su lugar hubiese seguido porque pocos se hab¨ªan enterado del fallo. Ella y su sensibilidad no pod¨ªan. A pesar del fallo, hay que felicitarla.

Fue injusto: el disco de Beyonc¨¦ es mucho mejor

Beyonc¨¦ lloraba cuando en el agradecimiento final Adele solo hablaba cosas buenas de Lemonade, el disco de la estadounidense. La brit¨¢nica hablaba por boca de todos. Fue como: vale, he ganado yo porque los Grammy son as¨ª de conservadores, pero tu disco (y t¨²) es mejor. El marido de Beyonc¨¦, Jay Z, no hac¨ªa m¨¢s que asentir.

?Vivan las madres!

"Es duro ser madre", dijo Adele cuando recogi¨® uno de los premios. Desvel¨® que la ¨²ltima vez que recogi¨® un Grammy estaba embarazada y no lo sab¨ªa. Y tambi¨¦n confes¨® que lo tuvo que dejar todo para ser madre y que la vuelta a la primera fila hab¨ªa sido dura. Pero el premio est¨¢ ah¨ª. Fue una reivindicaci¨®n de todas las madres, de todas las mujeres, de la feminidad y de la capacidad del ser humano para dar vida a otro. Todo coronado por esa alucinante actuaci¨®n de Beyonc¨¦ embarazad¨ªsima.?

James Corden se cae por las escaleras

Y, de repente, James Corden, el presentador, se cae rodando por las escaleras. Vale, estaba preparado, pero el tipo que se daba trompazos ?no pod¨ªa! ser un doble. Era ¨¦l. Sabe Dios cuantos moratones se habr¨¢ hecho Corden ensayando ese numerito. El arranque de la ceremonia, con Corden sin un zapato y sofocado por los trompicones, fue gracioso y original. El n¨²mero del coche emulando su Carpool Karaoke mientras cantaba Sweet Caroline con Jennifer Lopez, John Legend, Neil Diamond (su autor) y hasta la hija de Beyonc¨¦ y Jay Z, fue muy, muy divertido. Estuvo bien Corden, en una ceremonia largu¨ªsima de m¨¢s de cuatro horas.

Se quitaron los pantalones y recibieron el premio en calzoncillos

?Un grupo recibiendo el premio en calzoncillos? Los Grammy son as¨ª. Fue la banda estadounidense (de Ohio) Twenty One Pilots, premio a Mejor D¨²o Pop. En las escaleras que llevaban al escenario, delante de millones de personas, se quitaron los pantalones y subieron en calzoncillos. Luego desvelaron que era una apuesta. Un d¨ªa, hace muchos a?os, ve¨ªan los Grammy en el sal¨®n de su casa en calzoncillos. Y se dijeron: "Si alg¨²n d¨ªa lo ganamos lo recogeremos as¨ª". Y lo cumplieron. "Pod¨¦is ser los siguientes", dijeron. Un buen consejo para todos los j¨®venes m¨²sicos que les estaban viendo. Si se cree y se trabaja, se puede. Simeone tambi¨¦n estar¨¢ de acuerdo.

Lo mismo le da hacer una balada refinada con?Tony Bennett que cantar heavy metal con Metallica. Lady Gaga demostr¨® en la ceremonia que puede con cualquier desaf¨ªo. Suponemos que James Hetfield y compa?¨ªa sab¨ªan que esta vez eran la banda de acompa?amiento. Y Gaga ejerci¨® de jefa desde la primera nota. Con su vozarr¨®n al frente, acab¨® lanz¨¢ndose al p¨²blico. Bien por ella.

Parece ser que Donald Trump no es tan importante como todos nos creemos (¨¦l tambi¨¦n). Por encima de ¨¦l est¨¢ Dios. Este ¨²ltimo fue el m¨¢s nombrado en la gala, por raperos, poperos y la mayor¨ªa que se subi¨® a recoger su premio. Muchos mostraron una apasionada devoci¨®n. Especial menci¨®n para el hiphopero Chance The Rapper. Qu¨¦ hombre m¨¢s religioso este. Beyonc¨¦ apenas dijo unas palabras sobre la actualidad pol¨ªtica, dedicando un premio a "los ni?os de todas las razas". Si queremos suponer, claro, que era un mensaje para Donald Trump y su pretensi¨®n de construir muros y vetar a pueblos. Katy Perry dijo al final de su actuaci¨®n: "?No al odio!". El rapero Busta Rhymes refiri¨® directamente a Trump y "su fracaso al intentar el veto a los musulmanes". Y los en¨¦rgicos A Tribe Called Quest llamaron a la revoluci¨®n. Por lo dem¨¢s, poca brillantez en los discursos.