Una santa anti-gentrificadora en la Ciudad de M¨¦xico

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Una a una, las viviendas y casas de la colonia Ju¨¢rez van siendo rehabilitadas para destinarlas al consumo de gente de piel m¨¢s blanca y con mayores ingresos; los edificios antiguos son sustituidos o remozados (blanqueados dicen los residentes de ese barrio) y destinados a usos ¡°modernos¡±; los tradicionales negocios de auto partes est¨¢n siendo comprados por inversionistas, para sustituirlos por lofts; cada vez m¨¢s se est¨¢n abriendo nuevos negocios gourmet y bares; y van apareciendo m¨¢s centros culturales gestionados por ¡°creativos¡± j¨®venes locales o extranjeros. Pero no es la traducci¨®n de los archi-conocidos p¨¢rrafos de Ruth Glass lo que aqu¨ª estamos reproduciendo, sino los comentarios de Sergio Gonz¨¢lez, un habitante y activista por permanecer en su barrio, quien nos narra la radical transformaci¨®n de su barrio.

La colonia Ju¨¢rez es un barrio central ubicado al sur del Paseo de la Reforma (la hist¨®rica avenida moderna donde ahora se multiplican enormes torres de oficinas y departamentos) y al norte de la avenida Chapultepec, el ex acueducto prehisp¨¢nico y colonial de la Ciudad de M¨¦xico. La Ju¨¢rez fue creada a fines del siglo XIX como barrio de las ¨¦lites: all¨ª se construyeron mansiones y embajadas en estilos ecl¨¦cticos. El barrio sufri¨® un proceso de transformaci¨®n hacia la mitad del siglo XX, cuando en una parte se cre¨® la Zona Rosa como distrito de entretenimiento nocturno. Los sismos de 1985 aceleraron la obsolescencia f¨ªsica y el ¨¦xodo de clases medias, pero al mismo tiempo permitieron la llegada de nuevos habitantes de ingresos menores. A partir del a?o 2000, la ¡°izquierda¡± que gobierna la capital mexicana comenz¨® a impulsar una pol¨ªtica de desarrollo urbano centr¨ªpeto bajo distintos nombres: el Bando 2 (2000-2006), el desarrollo urbano intensivo (2006-2012) o la ciudad compacta (2012-2018). Desde entonces este barrio es objeto de una disputa desigual entre diversos inversionistas, el gobierno local y la poblaci¨®n residente.

Los desalojos directos e indirectos se multiplican, a trav¨¦s del incremento de rentas, la no renovaci¨®n de contratos de alquiler, juicios de desahucio, etc¨¦tera. Los residentes activistas denuncian al llamado ¡°cartel inmobiliario¡± de la Ciudad de M¨¦xico, integrado por inversionistas y funcionarios p¨²blicos, quienes tienen una estrategia clara para el despojo de inmuebles en donde su propietario muri¨® o no aparece, cuentan con abogados a su servicio y blanquean inversiones de dudosa procedencia. As¨ª, en el barrio se multiplican edificios de lofts, barber¨ªas hippsters, boutiques caninas, galer¨ªas de arte, tiendas vintage, restaurantes gourmet y toda una oferta gastron¨®mica y de servicios dirigida a los nuevos residentes y usuarios de mayores ingresos.

Este barrio se caracteriza por una rica herencia urbana y arquitect¨®nica, que a veces es preservada e incorporada a los circuitos de consumo de los nuevos residentes de mayores ingresos; y muchas otras veces estorba a los inversionistas, porque impide la captura de mayores rentas urbanas con edificios de mayores alturas. As¨ª que a menudo, de la noche a la ma?ana, varios inmuebles abandonados o sub-utilizados, que no se encontraban en malas condiciones f¨ªsicas, amanecen destruidos o parcialmente destruidos, por lo que se demanda la autorizaci¨®n de su demolici¨®n completa ante el ¡°riesgo de derrumbe¡± que representan para transe¨²ntes e inmuebles vecinos. En los ¨²ltimos cinco a?os tenemos constancia de al menos doce de estos casos, algunos de esos predios funcionan ahora como playas de estacionamiento. La autopsia de estos derrumbes corroborar¨ªa nuestra hip¨®tesis de ¡°destrucci¨®n creativa¡±.

La lucha de los ¡°juaricas¡± (como se hacen llamar los vecinos de la Ju¨¢rez) por permanecer en su barrio ha rendido algunas victorias, como la fuerte oposici¨®n que emprendieron contra la construcci¨®n del llamado ¡°Corredor Cultural Chapultepec¡±, un mega-proyecto que en el discurso creaba un enorme espacio p¨²blico lineal en segundo piso y resolver¨ªa los problemas viales, adem¨¢s de ¡°recuperar¡± un espacio abandonado; pero que en la pr¨¢ctica constitu¨ªa un enorme centro comercial a lo largo de esa vialidad. En revancha contra el fracaso de ese negocio inmobiliario, el gobierno de la Ciudad de M¨¦xico realiza actualmente el mega-proyecto Centro de Transferencia Modal CETRAM - Chapultepec, en el l¨ªmite poniente del barrio, para ordenar la interconexi¨®n de las modalidades de transporte p¨²blico que all¨ª confluyen (autobuses, microbuses, taxis y metro); pero tambi¨¦n incluye una torre de oficinas de 40 pisos, un hotel y un centro comercial. Se trata de una obra concesionaria al sector privado por un per¨ªodo de 40 a?os, as¨ª que esta obra a la ciudad ¡°no le cuesta nada¡±.

La lucha de estos colectivos sociales recientemente es acompa?ada por una santa, que -seg¨²n vecinos de este y otros barrios- se ha aparecido, ha impedido desalojos y ha apoyado a la gente en su lucha contra nuevos desarrollos inmobiliarios. Ya hay en la colonia Ju¨¢rez, en una ventanita de la calle General Prim n¨²mero 28, un altar con una imagen de Santa Mari La Juarica, que fue montada por unos artistas en el marco de mega evento cultural (Zona MACO M¨¦xico Arte Contempor¨¢neo) que en parte se desarroll¨® y no por azar, en la colonia Ju¨¢rez. Este altar, adem¨¢s de la imagen reconstruida a partir de descripciones de quienes dicen que se les ha aparecido, incluye un rezo que en sus p¨¢rrafos iniciales dice:

Santa Mari La Juarica, patrona y madre, santa y ni?a, protectora contra la gentrificaci¨®n. S¨¢lvame de las malas pr¨¢cticas, l¨ªbrame del desplazamiento, del desalojo, del incremento de la renta, del alza desmedida del [impuesto] predial, del voraz casero, del mal inmobiliario. ?S¨¢lvame de la gentrificaci¨®n!

En un pa¨ªs mayoritariamente cat¨®lico, en donde hasta las clases medias e ilustradas demuestran respeto y devoci¨®n por la virgen de Guadalupe, la virgen morena, el estandarte del movimiento de Independencia en 1810, no es casual que artistas y activistas sociales recurran en su estrategia de lucha y resistencia a la creaci¨®n de mitos, como el del aparecimiento de esta santa. A Santa Mari La Juarica ya le adjudican milagros puntuales, como la detenci¨®n de desalojos y el cancelamiento del megaproyecto ¡°Corredor Cultural Chapultepec¡±. A ella le imploran que los cure del ¡°blanqueamiento social¡±, que es como los juaricas suelen llamar a la gentrificaci¨®n.

* V¨ªctor Delgadillo es profesor e investigador en la Universidad Aut¨®noma de la Ciudad de M¨¦xico (UACM) y posgraduado en Urbanismo por la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM). Coordinador del Nodo UACM de la red de investigaci¨®n Contested Cities (2012-2016).