Por qu¨¦ se lo deber¨ªa pensar dos veces antes de comprar una crema o perfume sorprendentemente baratos
Un cosm¨¦tico cinco veces por debajo de su precio indica un fraude. Lo que probablemente no sepa es que tambi¨¦n pone en riesgo su salud
Los datos oficiales no dejan lugar a dudas. Las falsificaciones de cosm¨¦ticos y perfumes son hoy por hoy un verdadero problema econ¨®mico y social. Empecemos por los facilitados por la Oficina para la Armonizaci¨®n del Mercado Interior (OAMI), la agencia comunitaria encargada del registro de marcas, dibujos y modelos en la Uni¨®n Europea. Seg¨²n un estudio publicado por dicha oficina en 2015, Espa?a est¨¢ a la cabeza de los pa¨ªses de la UE en falsificaciones de cosm¨¦ticos en t¨¦rminos relativos, lo que afecta al 17,1% de las ventas del sector. Traducido en t¨¦rminos absolutos, significa que cada a?o fabricantes, minoristas y distribuidores de nuestro pa¨ªs pierden 949 millones de euros. Esta cifra, que puede resultar fr¨ªa para muchos, adquiere un significado m¨¢s c¨¢lido si tenemos en cuenta las repercusiones para el ciudadano: entre los directos e indirectos, en toda la UE se pierden 80.000 puestos de trabajo a causa de las falsificaciones. Esto, adem¨¢s del tremendo varapalo a pa¨ªses como Espa?a, con casi cuatro millones de parados, implica que los gobiernos dejen de ingresar la espectacular cifra de 1.700 millones de euros en impuestos y a la Seguridad Social. Perdemos todos.
Pero, ?hay adem¨¢s alg¨²n perjuicio directo sobre la salud de quienes consumen cosm¨¦ticos de imitaci¨®n? Mar¨ªa Emilia G¨®mez Huerta, del ¨¢rea jur¨ªdica de la Confederaci¨®n de Consumidores y Usuarios (CECU), resuelve: ¡°Sin duda, las falsificaciones suponen un peligro para la salud. Uno de sus problemas m¨¢s graves es que la forma de fabricarlos y los ingredientes que utilizan no est¨¢n regulados, por lo que pueden incluir productos qu¨ªmicos que resulten da?inos o est¨¦n contaminados¡±.
Ingredientes no cosm¨¦ticos
Lidia Maro?as, m¨¦dico especialista en dermatolog¨ªa de la Cl¨ªnica Dermatol¨®gica Internacional, explica el proceso de control: ¡°La elaboraci¨®n de un nuevo perfume o cosm¨¦tico ha de pasar un riguroso examen de seguridad antes de llegar al mercado. Toda la informaci¨®n relativa a su f¨®rmula (ingredientes, producto final y uso) queda recogida en una base de datos europea, a la que tienen acceso las autoridades nacionales de control y los centros de toxicolog¨ªa, para garantizar la transparencia del proceso y la seguridad del consumidor¡±. Las falsificaciones, evidentemente, no siguen la misma pauta: ¡°Sus componentes no pasan ning¨²n control de calidad ni respetan las medidas de evaluaci¨®n de seguridad que establece el Reglamento Europeo de Cosm¨¦ticos, un hecho grave al tratarse de productos que est¨¢n en contacto con nuestra piel¡±, considera Carmen Esteban, directora t¨¦cnica de la Asociaci¨®n Nacional de Perfumer¨ªa y Cosm¨¦tica (Stanpa).
Ana Rocamora, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Qu¨ªmicos Cosm¨¦ticos (SEQC) y directora de cosmeticsinMind, compa?¨ªa de ingenier¨ªa cosm¨¦tica dedicada a la creaci¨®n de nuevos productos, hace hincapi¨¦ en los componentes de productos falsificados: ¡°No emplean activos ni de ¨²ltima ni de primera generaci¨®n. De hecho, los ingredientes que usan suelen ser de calidad no cosm¨¦tica o incluso caducados. Podr¨ªan ser glicerina industrial, propilenglicol, aceites industriales, conservantes no autorizados, colorantes industriales no autorizados, etc¨¦tera. Pero el mayor riesgo no viene del ingrediente en s¨ª, sino de la posible concentraci¨®n elevada de impurezas o mala conservaci¨®n que pueden tener estos productos¡±. Rocamora advierte que las sustancias que integran estas imitaciones, probablemente, provengan de empresas de aplicaciones industriales donde la materia prima es m¨¢s econ¨®mica porque se le exige menos pureza. Adem¨¢s, se fabrican y envasan en lugares clandestinos que no cumplen las exigencias sanitarias.
"No hay regulaci¨®n para la fabricaci¨®n e ingredientes de un cosm¨¦tico falso, por lo que pueden estar contaminados o incluir productos qu¨ªmicos que resulten da?inos" (M? Emilia G¨®mez, ¨¢rea jur¨ªdica de CECU)
Con el objetivo de constatar la ¡ªmala¡ª calidad de los ingredientes de las falsificaciones, Stanpa solicit¨® el pasado a?o un an¨¢lisis de laboratorio. Se confirm¨® que la composici¨®n de la mayor¨ªa de los perfumes y cosm¨¦ticos falsificados es completamente distinta a la del producto original. Para elaborar estos an¨¢lisis se utiliz¨® la denominada t¨¦cnica de Cromatograf¨ªa de Gases y la Espectrometr¨ªa de Masas (GC/MS, por sus siglas en ingl¨¦s), que identifica los componentes de productos falsificados y los compara con los originales. Frente a los m¨¢s de 80 componentes que contiene un perfume original, la mayor¨ªa de las falsificaciones no alberga m¨¢s de 20 o 25. En alguna de las muestras analizadas se encontraron compuestos prohibidos como el etilenglicol (el ingrediente primario de los anticongelantes para autom¨®viles). Y algo m¨¢s: las falsificaciones carecen de protecci¨®n frente a los rayos ultravioleta (UV), lo que puede dar lugar a fotodegradaci¨®n y generaci¨®n de sustancias de riesgo para la salud.
Reacciones cut¨¢neas
¡°Al ser art¨ªculos que se aplican directamente sobre la piel, lo m¨¢s frecuente es que produzcan reacciones cut¨¢neas de contacto en forma de dermatitis, ya sea irritativa o al¨¦rgica, por sensibilizaci¨®n a alguno de sus componentes¡±, describe la dermat¨®loga Maro?as. Estas reacciones, a?ade, suelen manifestarse en forma de molestia ¡ªpicor, sensaci¨®n de tirantez, escozor¡ª, enrojecimiento o inflamaci¨®n localizada de la piel en la zona de aplicaci¨®n del producto y, m¨¢s raramente, pueden diseminarse, dar lugar a ampollas y poner en peligro ¨®rganos internos. De forma ocasional, se han reportado casos de hipersensibilizaci¨®n cruzada, intoxicaci¨®n, urticaria y cambios permanentes en la coloraci¨®n de la piel. Rocamora coincide: ¡°Al emplear falsificaciones estamos aumentando el riesgo de irritaciones o deterioro del efecto barrera a largo plazo. Adem¨¢s, debido a que el control de calidad en estas fabricaciones falsas es deficiente o inexistente, puede haber variaciones del pH o mayor facilidad para que el producto se deteriore¡±.
El hecho de desconocer la composici¨®n de un cosm¨¦tico y el lugar de producci¨®n es un gran inconveniente para identificar la sustancia que provoca la reacci¨®n y erradicar sus efectos a largo plazo, que no son tan extra?os. Seg¨²n el informe Metal Hazard the Health Risk of Hidden Heavy Metals in Face Make up, publicado en mayo de 2011 por la organizaci¨®n medioambiental canadiense Environmental Defence, productos como sombras de ojos, delineadores, bases de polvos o m¨¢scaras de ojos contienen concentraciones peligrosas de plomo, ars¨¦nico y cadmio, que en dosis no controladas podr¨ªan provocar insuficiencia renal, intoxicaciones y da?os en la vista.
"De forma ocasional, se han reportado casos de intoxicaci¨®n, urticaria y cambios permanentes de la coloraci¨®n de la piel por el uso de un cosm¨¦tico falso" (Lidia Maro?as, dermat¨®loga)
La dermat¨®loga aconseja consultar con un especialista a la m¨ªnima sospecha de reacci¨®n a un perfume o cosm¨¦tico: ¡°Iniciamos tratamiento sintom¨¢tico de forma ambulatoria con emolientes, corticoides t¨®picos y antihistam¨ªnicos orales para disminuir la inflamaci¨®n y aliviar las molestias locales como el picor. En casos severos, puede ser necesario el ingreso hospitalario del paciente para mantener una monitorizaci¨®n m¨¢s estrecha¡±.
Condiciones lamentables
El inspector jefe del Grupo de la Secci¨®n de Delitos contra la Propiedad Intelectual e Industrial de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta, Jos¨¦ Luis G¨®mez Pidal, pone la lupa en los lugares donde se fabrican y almacenan las falsificaciones: ¡°Las organizaciones criminales invierten dinero en investigar y desarrollar los productos que pretenden falsificar. Sin embargo, los lugares donde se desarrollan los productos falsificados carecen de cualquier medida de seguridad o control sanitario. La experiencia de la Polic¨ªa en la desarticulaci¨®n de este tipo de organizaciones nos muestra como denominador com¨²n que las condiciones en las que se confeccionan los productos falsificados son lamentables: locales insalubres, maquinaria ruinosa, sin control sanitario y un largo etc¨¦tera de desprop¨®sitos en la creaci¨®n de productos para uso humano¡±.
G¨®mez Pidal asegura que estamos ante una pr¨¢ctica generalizada: ¡°Donde antes solo encontr¨¢bamos textil, ahora tambi¨¦n hay cosm¨¦tica y perfumer¨ªa. Las cifras son abrumadoras¡±. Un ejemplo: en la operaci¨®n Tashkent, en 2015, se incautaron m¨¢s de 120.000 botes de champ¨². Los motivos vienen de la relaci¨®n costes y beneficios. ¡°Las falsificaciones dan mucho dinero y suponen baja penalidad¡±, aclara. As¨ª, las organizaciones delictivas se asocian con frecuencia para conseguir m¨¢s ganancias.
En enero de 2014, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) quiso alertar sobre esta realidad a trav¨¦s de la campa?a de sensibilizaci¨®n Productos falsificados: no apoyes el crimen organizado, en la que aseguraba lo siguiente: ¡°La falsificaci¨®n puede estar vinculada al narcotr¨¢fico, a la trata de seres humanos, al tr¨¢fico de armas y a otros graves delitos. Falsear a menudo implica estar conectado con la corrupci¨®n, el blanqueo de dinero, la extorsi¨®n y el tr¨¢fico il¨ªcito de divisas¡±. Los ahorros que dedicamos a las compras de imitaci¨®n pueden ir a parar a organizaciones delictivas de amplio espectro, como alerta el inspector G¨®mez Pidal, que concluye: ¡°El hecho de que gran parte de los productos de perfumer¨ªa y cosm¨¦tica falsificados sean distribuidos en mercadillos o por los llamados manteros no significa que el fen¨®meno sea de baja intensidad, ya que solo estamos viendo la punta de un iceberg que mueve gran cantidad de dinero¡±.
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