La ¡®silla el¨¦ctrica¡¯ que mutila a las aves en Espa?a
M¨¢s de 200 ¨¢guilas perdiceras y m¨¢s de 120 imperiales han muerto electrocutadas en Espa?a en los ¨²ltimos 15 a?os
Un ¨¢guila imperial yace en una camilla en el quir¨®fano veterinario en el Hospital de Fauna Salvaje de Grefa (Grupo de Rehabilitaci¨®n de la Fauna Aut¨®ctona y su H¨¢bitat). El animal permanece inerte mientras dos veterinarias le aplican antibi¨®ticos y le inmovilizan un ala. Es uno de los 6.000 ejemplares que llegan cada a?o a ese centro ubicado en Majadahonda (Madrid), en su mayor¨ªa v¨ªctimas de colisiones y electrocuciones en los 25.000 tendidos el¨¦ctricos que se extienden por Espa?a. Se estima m¨¢s de 200 ¨¢guilas perdiceras y m¨¢s de 120 imperiales han muerto electrocutadas en el pa¨ªs en los ¨²ltimos 15 a?os, seg¨²n los datos la Plataforma SOS Tendidos El¨¦ctricos. En 2017,192 p¨¢jaros de diferentes especies han sido v¨ªctimas de esas estructuras.
Las nueve ONG que conforman la Plataforma denuncian que la legislaci¨®n aprobada hace diez a?os (el Real Decreto 1432/2008) para determinar medidas de protecci¨®n en la red el¨¦ctrica ha resultado "fallida". La principal cr¨ªtica de los ecologistas es que el decreto ¡ªque reconoce la muerte de "varias decenas de miles" de aves¡ª limita las normativas "anticolisi¨®n" y "antielectrocuci¨®n" a zonas establecidas por cada comunidad aut¨®noma. Solo Catalu?a, Castilla-Le¨®n, Castilla La Mancha, Extremadura y Andaluc¨ªa cumplen con la legislaci¨®n, seg¨²n los ecologistas.?
Las especies m¨¢s afectadas son las ¨¢guilas imperiales y reales, los buitres negros, los halcones y los b¨²hos reales. Estos ¨²ltimos tienen una trampa mortal en su principal zona de cacer¨ªa en la Comunidad de Madrid: el campo de tendidos el¨¦ctricos de Majadahonda, al que se llega a trav¨¦s de una v¨ªa de tierra perpendicular a la carretera, por donde hay que caminar durante 10 minutos. En esa regi¨®n, las estructuras de electricidad no est¨¢n se?alizadas ¡ªse suelen utilizar tiras de neopreno o silicona o espirales rojas¡ª ni aisladas c¨®mo determina el Real Decreto. "Se puede pensar que al lado de grandes zonas urbanas no hay diversidad, pero no es as¨ª. Aqu¨ª, estamos junto a un parque natural y no hay protecci¨®n", critica Juan Jos¨¦ Iglesias, portavoz de SOS Tendidos El¨¦ctricos.?
Iglesias se?ala que muchos tipos de ¨¢guilas resultan heridas o muertas en el campo de Majadahonda.?"Actualmente, hay 420 parejas reproductivas de ¨¢guila imperial ib¨¦rica. Esa poblaci¨®n pudiera haber crecido si no fuesen por los tendidos. Como consecuencia, muchos ejemplares colonizan sitios que consideran m¨¢s seguros, pero que no corresponden con su h¨¢bitat natural", afirma el ecologista.?
El mayor porcentaje de aves que se choca con los tendidos muere, y las que logran sobrevivir se quedan con traumatismo en las alas, lo que les impide volver a volar", seg¨²n explica Nicol¨¢s L¨®pez, t¨¦cnico de la ONG Seo BirdLife. "Algunas caen ardiendo en el suelo, lo que puede incluso provocar incendios", a?ade.
En el Hospital de Grefa, dos ¨¢guilas reales, un par de ¨¢guilas imperiales y un milano real con un ala inmovilizado contemplan a los visitantes a trav¨¦s del cristal de su cautiverio. A su lado, un ¨¢guila-azor perdicera ¡ªespecie amenazada que cuenta con tan solo una pareja reproductiva en Madrid¡ª ensaya un vuelo de una rama de ¨¢rbol a otra, pero no lo logra, porque solo tiene un ala. En esa zona del centro de rehabilitaci¨®n est¨¢n los ejemplares que han sufrido amputaciones u otros da?os irreversibles despu¨¦s de una colisi¨®n o electrocuci¨®n. "Las quemaduras suelen provocar necrosis en algunas partes del cuerpo de las aves, y aunque utilicemos terapias con antibi¨®ticos y antiinflamatorios, en algunos casos se quedan con secuelas incompatibles con la vida en la naturaleza", lamenta Fernando Gonz¨¢lez, veterinario de Grefa. ?
Soluciones
La ¨²nica manera de eliminar totalmente los riesgos de la red el¨¦ctrica para la fauna, seg¨²n los expertos, es construir tendidos "soterrados", lo que conlleva costes m¨¢s elevados e impacto en el h¨¢bitat por la excavaci¨®n del terreno. Otra alternativa es dise?ar estructuras m¨¢s seguras, con conductores de electricidad m¨¢s aislados, cables de tensi¨®n a diferentes alturas y fundas de cobertura aislante.
Un grupo de t¨¦cnicos espa?oles de la multinacional 3M ya ha desarrollado uno de esos sistemas, que ha sido homologado por Iberdrola y est¨¢ en pruebas en l¨ªneas de Zaragoza, Salamanca y el Parque Nacional de Do?ana, en Huelva. Se trata de unos aislantes de silicona que cubren los conductores a¨¦reos para distribuci¨®n de electricidad, estructuras de conexi¨®n a tierra en subestaciones el¨¦ctricas o pararrayos.?
Al lado de la carretera que da acceso a Valdemorillo, en Madrid, se puede encontrar un ejemplo de tendido el¨¦ctrico sostenible: los postes est¨¢n se?alizados con lazos de neopreno conocidos como salvap¨¢jaros. ¡°Es una l¨ªnea bien hecha. Todos los puntos calientes pasan por debajo del tendido y los se?alizadores facilitan que las aves puedan ver la estructura en d¨ªas con lluvia o mucho viento¡±, explica Juan Jos¨¦ Iglesias, mientras una pareja de ¨¢guilas perdiceras sobrevuela la zona.?
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