?Por qu¨¦ o¨ªmos peor con la edad?
Uno de cada seis adultos europeos tiene limitada su capacidad auditiva. Esto es lo que ocurre en nuestros o¨ªdos para que perdamos agudeza en la madurez
A partir de cierta edad es frecuente experimentar alg¨²n grado de p¨¦rdida auditiva. Lo asumimos sin buscarle explicaci¨®n, igual que aceptamos que con el paso de los a?os se deterioran tambi¨¦n la vista y las articulaciones. Pero ?qu¨¦ ocurre exactamente en nuestros o¨ªdos para que esta capacidad se vea mermada en un amplio porcentaje de la poblaci¨®n adulta? Seg¨²n el estudio Evaluaci¨®n de los costes sociales y econ¨®micos de la discapacidad auditiva, el 16% de los adultos europeos sufre este problema, seis puntos m¨¢s que hace solo unos a?os. Hablamos de 71 millones de personas en nuestro continente. El informe vaticina que la cifra ¡°se incrementar¨¢ en las pr¨®ximas dos o tres d¨¦cadas¡± y apunta entre las razones el aumento de esperanza de vida, que incrementar¨¢ el n¨²mero de casos de p¨¦rdida auditiva por razones de edad.
Con el paso de los a?os se revela en nuestros o¨ªdos un factor acumulativo: si llevamos mucho tiempo soportando altos niveles de ruido, poco a poco empezaremos a notar las consecuencias. Pero esa exposici¨®n a los decibelios tambi¨¦n puede haberse producido durante un periodo concreto de nuestras vidas: por ejemplo, en la juventud, como expone un estudio publicado en Journal of Neuroscience. Como resultado, se produce ¡°un da?o en las c¨¦lulas pilosas de o¨ªdo, responsables de que podamos o¨ªr¡±, seg¨²n el portal del Servicio Nacional de Salud de Estados Unidos. La p¨¦rdida de audici¨®n por la edad se denomina presbiacusia; suele ser progresiva y afecta primero a las altas frecuencias. Las c¨¦lulas pilosas, afectadas por esa condici¨®n, est¨¢n situadas en la parte interna del o¨ªdo y convierten las vibraciones ac¨²sticas en se?ales el¨¦ctricas. Estas se?ales se transmiten al cerebro a trav¨¦s del nervio auditivo.
En otros casos, la p¨¦rdida de la capacidad auditiva puede estar motivada por enfermedades relacionadas con la edad, como la hipertensi¨®n o la diabetes, as¨ª como por un efecto secundario de medicamentos ¡ªcomo algunos antibi¨®ticos o los f¨¢rmacos que se emplean en quimioterapia¡ª, t¨®xicos para las c¨¦lulas sensoriales de los o¨ªdos. El sobrepeso y el tabaco?tambi¨¦n pueden influir. En la mayor¨ªa de los casos, a?ade el portal sanitario de Estados Unidos, la p¨¦rdida es consecuencia de varios de esos factores.
En cuanto empiezan a percibirse los primeros indicios (necesidad de subir el volumen del televisor, dificultad a la hora de entender lo que le dicen por tel¨¦fono, tener que pedir que le repitan las cosas, elevar su propia voz al hablar), los especialistas recomiendan acudir a un centro especializado para efectuar una revisi¨®n del o¨ªdo, que en el caso de General Optica es gratuita. All¨ª, un audioprotesista le realizar¨¢ una audiometr¨ªa, una prueba sencilla e indolora con tecnolog¨ªa de ¨²ltima generaci¨®n para medir su capacidad auditiva. Como ocurre con otros ¨¢mbitos de la salud, incluso aunque no perciba ninguna limitaci¨®n los expertos recomiendan someterse peri¨®dicamente a esta prueba a partir de cierta edad, para comprobar que sus o¨ªdos funcionan correctamente.
Y si se confirman sus temores, no desespere: hay soluci¨®n. De hecho, un abanico de soluciones muy avanzadas y discretas que le devolver¨¢n la ansiada calidad de vida. No solo eso: en estos tiempos en que todos necesitamos estar tecnol¨®gicamente conectados, General Optica le ofrece, adem¨¢s, una serie de accesorios que le ayudar¨¢n a mejorar en su d¨ªa a d¨ªa, como despertadores con alarmas sonoras y luminosas, tel¨¦fonos con un volumen especial para facilitar la escucha, m¨®viles tambi¨¦n adaptados para personas con dificultades auditivas y auriculares para la televisi¨®n. A partir de ese momento, nada escapar¨¢ a su o¨ªdo.
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