Cuando el pozo crea el barrio

El agua potable es muy escasa en Rep¨²blica Centroafricana. Naciones Unidas estima que tan solo un 30 % de la poblaci¨®n tiene acceso a ella. Durante la crisis que afect¨® el pa¨ªs hace cuatro a?os, los grupos armados lo destruyeron y malmetieron todo, muchas veces de forma deliberada. La red de abastecimiento de agua, ya de por s¨ª muy precaria, qued¨® hecha trizas.

Pero la falta de este bien imprescindible alter¨® tambi¨¦n la vida social de los barrios. La gente empez¨® a ir a buscarla a otros barrios, a dejar de ir a la escuela o los centros de salud donde no hab¨ªa agua ni acceso al saneamiento. Es normal: ?qui¨¦n va a ir a una escuela sin ba?os o a un hospital donde un m¨¦dico no puede lavarse las manos?

Y es que el agua puede ser un instrumento de paz y cohesi¨®n social. Para contribuir a ella se puso en marcha un programa de reconstrucci¨®n econ¨®mica y social en las zonas urbanas de la capital centroafricana. Junto con la SODECA, la compa?¨ªa nacional de aguas, ha reconstruido y rehabilitado diez instalaciones de agua llamadas 'Kiosque Bonne Fontaine', Quiosco Buena Fuente, una especie de quioscos-fuentes, donde la gente puede tener un acceso p¨²blico y permanente al agua en sus barrios.

El proyecto, orientado no s¨®lo al suministro de agua, sino a la cohesi¨®n social, tambi¨¦n rehabilit¨® la infraestructura sanitaria y mejor¨® el acceso al agua de otros espacios sociales: un mercado, dos escuelas y un centro de sanidad.

Los quioscos han cambiado las vidas de m¨¢s de 6.000 personas. Forman ya parte del paisaje urbano de Bangui. Por todos los lados se ven estas peque?as casitas azules, que garantizan que hay agua, y por tanto vida, en los barrios. Dentro de cada uno de ellos est¨¢ la persona encargada de gestionarlo. Como en las casas no hay agua corriente, cada d¨ªa la gente se re¨²ne en torno al quiosco para comprarla, pagando una peque?a cuota. Mientras est¨¢n all¨ª, los vecinos conversan, juegan e intercambian informaci¨®n y servicios.

Es importante mantener en buen estado estas infraestructuras para que el barrio no pierda el acceso al agua y con ¨¦l el lugar de encuentro. Por eso, y por la experiencia de las crisis pasadas, tambi¨¦n se hace un esfuerzo para? sensibilizar a las comunidades. La campa?a 'Mi Quiosco, Mi barrio' promueve el conocimiento sobre las condiciones de acceso al agua. La campa?a facilita la cohesi¨®n social y asegura la protecci¨®n del quiosco, y del agua, si surgiera alg¨²n estallido de violencia.

El agua es esencial para beber, cocinar y lavar. Pero sin agua tambi¨¦n deja de existir la vida en el barrio. Por eso, respetar un quiosco es respetar un barrio entero.