¡°Ser¨ªa muy raro que fu¨¦ramos la ¨²nica forma de vida en el universo¡±

Se llama "estrella enana caf¨¦", y fue descubierta por casualidad. Pero esta estrella que no cuenta con energ¨ªa suficiente para brillar es s¨®lo uno de los descubrimientos que tiene en su historial la astr¨®noma chilena Mar¨ªa Teresa Ruiz (Santiago, 1946). Su vasta trayectoria de casi 50 a?os la convirti¨® en la primera mujer en ganar, en 1997, el Premio Nacional de Ciencias en su pa¨ªs. El camino parti¨® en 1971, cuando reci¨¦n licenciada de la Universidad de Chile comenz¨® su estudios de postgrado en la Universidad de Princeton, Nueva Jersey (Estados Unidos). La condecoraci¨®n m¨¢s reciente la recibi¨® en Francia el pasado 24 de marzo, cuando la Unesco y la Fundaci¨®n L'Or¨¦al le otorgaron a ella y otras cuatro cient¨ªficas el Premio Mujeres en Ciencia, un reconocimiento a su trayectoria en la investigaci¨®n de las de las enanas blancas, estrellas que est¨¢n en la etapa final de su evoluci¨®n.

Pocas semanas despu¨¦s de haber recibido el galard¨®n, Ruiz recuerda que la principal sorpresa fue que las investigadoras del resto del mundo no le parecieron tan distintas: ¡°Sus historias eran bien parecidas; el desaf¨ªo para las chicas m¨¢s j¨®venes es tratar de balancear la familia y el trabajo cient¨ªfico. La mujer, cuando termina de prepararse y est¨¢ lista para producir ciencia, o tiene hijos o se olvida, porque esa parte no es postergable".

Despu¨¦s de d¨¦cadas de trabajo ininterrumpido, las rutinas de Ruiz, que tambi¨¦n da clases en la Universidad de Chile, var¨ªan seg¨²n avanza el calendario. ¡°No hay un d¨ªa t¨ªpico¡±, reconoce. Tres o cuatro veces al a?o se dirige a uno de los m¨²ltiples observatorios que hay en el norte del pa¨ªs para realizar observaciones, en extenuantes jornadas que van desde la puesta del sol hasta el amanecer: ¡°Estar en la monta?a interrogando al universo es emocionante¡±, explica.

Las preguntas que hace Ruiz al universo se enfocan principalmente en el campo de los ¡°objetos de baja luminosidad¡±, categor¨ªa a la que corresponden las enanas blancas -las estrellas extintas que la apasionan- y las enanas caf¨¦.

"Todas las estrellas se mueven pero la gran mayor¨ªa no parece cambiar de posici¨®n en diez a?os ya que est¨¢n muy lejos"

Pregunta. ?C¨®mo lleg¨® a investigar sobre los objetos del universo que no brillan con tanta intensidad?

Respuesta. ?Cuando se observa el cielo, lo mas f¨¢cil de ver son las estrellas m¨¢s brillantes, ya sea porque son intr¨ªnsecamente muy luminosas o bien est¨¢n muy cerca del sistema solar y las vemos as¨ª. A mi me interes¨® descubrir los objetos que son intr¨ªnsecamente muy poco luminosos porque la ¨²nica forma de verlos es si se encuentran muy cerca de nosotros. La manera que us¨¦ para detectar estos objetos fue tomando fotos del cielo y compar¨¢ndolas con fotos de la misma regi¨®n del cielo tomada hace diez o m¨¢s a?os. Todas las estrellas se mueven pero la gran mayor¨ªa no parece cambiar de posici¨®n en diez a?os ya que est¨¢n muy lejos. Unas pocas s¨ª muestran movimiento con respecto a las otras estrellas y son las que son muy cercanas.

P. ?Qu¨¦ relaci¨®n guarda su investigaci¨®n con los exoplanetas?

R. Los exoplanetas son planetas que giran en torno a otras estrellas que no son el Sol; se han detectado miles pero muy pocos se han podido ver, ni menos estudiar con detalle. Hoy estudiamos las caracter¨ªsticas de los exoplanetas en estrellas con atributos conocidos como su edad, sus abundancias en metales, su medio ambiente (si est¨¢n en c¨²mulos de estrellas por ejemplo), para entender si estas condiciones tienen influencia en qu¨¦ tipo de planetas se forman. Lo que muchos de los que trabajamos en el tema quisi¨¦ramos descubrir es un planeta que mostrara signos de vida visibles en su atm¨®sfera, como se detecta en la huella de la clorofila o el ox¨ªgeno en la atm¨®sfera terrestre.

P. ?En qu¨¦ queda la discusi¨®n sobre vida en otros planetas con el reciente anuncio de la NASA sobre los siete exoplanetas similares a La Tierra?

R. Ser¨ªa muy raro que nosotros fu¨¦ramos la ¨²nica forma de vida en el universo. Hay cien mil millones de estrellas en nuestra galaxia, la V¨ªa L¨¢ctea, y hay mas de cien mil millones de galaxias en el universo. En alg¨²n planeta, por ah¨ª orbitando en una estrella, debe haber vida. A¨²n no tenemos ninguna evidencia de ello y el descubrimiento de la NASA de que en una estrella peque?a, que son las m¨¢s numerosas, hay siete planetas y que varios de ellos podr¨ªan ser habitables, le da fuerza a este convencimiento de que no estamos solos en el universo.

"Siento que [en la sociedad actual] falta un debate que sea basado en evidencia y no en percepciones"

A sus 70 a?os, la reputada cient¨ªfica chilena explica que su inter¨¦s por la ciencia parti¨® con una mezcla de la curiosidad habitual de los ni?os con ¡°una necesidad f¨ªsica de encontrar respuestas (¡­) M¨¢s mayor, encontr¨¦ en la ciencia algo que no ten¨ªa muy f¨¢cilmente en mi entorno, en mi vida familiar o social, que era usar la raz¨®n para llegar a una conclusi¨®n y basarme en evidencia y no en rumores ni creencias locas¡±. ¡°Me pareci¨® muy refrescante", reflexiona, "y hasta el d¨ªa de hoy es v¨¢lido. Una de las gracias de tener m¨¢s cient¨ªficos en una sociedad es que se usa el razonamiento basado en evidencias y eso es valioso¡±, enfatiza.

P. ?Y c¨®mo ve la sociedad actual? ?Se opina con base en evidencias?

R. Lo extra?o. Eso ha ido desapareciendo del debate p¨²blico y empiezan a ser m¨¢s relevantes las opiniones gritadas o las cosas que a la gente le parecen m¨¢s f¨¢ciles de entender. Siento que falta un debate que sea basado en evidencia y no en percepciones. Eso me incomoda.

P. ?En qu¨¦ tipo de conversaciones se siente inc¨®moda?

R. En cualquiera. Creo que la ciencia es m¨¢s necesaria que nunca no s¨®lo para empujar el conocimiento y los l¨ªmites. Me parece que abandonar la raz¨®n es una acci¨®n temeraria que no nos lleva a ning¨²n lado. Esto me enoja, yo digo que quiz¨¢ me toca morir luego, porque cuando uno empieza a enojarse por lo que est¨¢ pasando [r¨ªe], yo siempre he dicho que quiero resucitar en unos 2.000 a?os m¨¢s para ver qu¨¦ pas¨®.

Entre bromas sobre su propia muerte y resurrecci¨®n, Ruiz recuerda que, cuando era ni?a, su padre y su abuela materna jugaban a esconderle juguetes nuevos entre los que ya ten¨ªa: ¡°Eso incentiv¨® mi poder de observaci¨®n y la rica sensaci¨®n de que la vida era m¨¢gica, en el lugar m¨¢s inesperado de repente aparecen tesoros en la vida¡±.

P. ?C¨®mo se hace para incentivar esa inquietud cient¨ªfica en los ni?os?

R. Los ni?os son como esponjas. Desde chiquitos hay que proponerles desaf¨ªos para ir desarrollando su juicio propio, porque ese es el problema, que cuando llegamos a adultos es dif¨ªcil tener un juicio cr¨ªtico. Yo creo que no queremos que todos los ni?os sean cient¨ªficos, pero s¨ª queremos que todos los ni?os tengan herramientas que les permitan usar su capacidad de razonar para hacer sus propios juicios.

P. Usted tiene el honor de ser la primera mujer en ganar el Premio Nacional de Ciencias y tambi¨¦n la primera presidenta de la Academia Chilena de Ciencias, ?Se siente una referente para sus pares?

"Cuando me daba cuenta de que me estaban discriminando me daban pena los discriminadores"

R. No a prop¨®sito. Siempre he hecho esas cosas sin querer. Despu¨¦s el Premio Nacional de Ciencias ni me enter¨¦ que me estaban presentando, fueron mis colegas y cuando me lo dieron me sent¨ª muy contenta porque cuando una es cient¨ªfica y est¨¢ empezando tiene que sobrevivir. Muchas veces pens¨¦ "me di el gusto de ser cient¨ªfica y quiz¨¢ deb¨ª haber estudiado ingenier¨ªa", pero cuando te dan el premio ese pensamiento no se te pasa nunca m¨¢s por la cabeza porque te est¨¢n diciendo "a Chile le interesa lo que t¨² haces" y eso es s¨²per potente. Nunca m¨¢s me qued¨® la duda.

P. Y usted ha derribado esos muros

R. En parte porque siempre he sido medio pajarona [distra¨ªda, en Chile]. Con las cinco premiadas [por Unesco-L'Or¨¦al] ten¨ªamos en com¨²n que no nos preocup¨¢bamos tanto de lo que los otros piensan. Muchas veces las mujeres se sienten tan mal porque son discriminadas y lo dejan. Cuando me daba cuenta de que me estaban discriminando me daban pena los discriminadores. Muchas veces pasa que las mujeres ni siquiera se plantean ocupar un cargo porque que se supone que son para hombres. Si una no juega, no participa, no puede ganar.

P. Usted tiene un hijo adulto, ?qu¨¦ apoyo recibi¨® para desarrollar su carrera profesional en paralelo a la vida familiar?

R. El apoyo m¨¢s grande fue tener un hombre que ha caminado siempre conmigo [Fernando Lund, Premio Nacional de Ciencias Exactas en 2001]. Siempre me han preguntado si ¨¦l me ayudaba. No me ayudaba, divid¨ªamos las responsabilidades y no hab¨ªa separaci¨®n de roles. Yo me mor¨ªa de pena cuando iba a observar a los telescopios, pero ten¨ªa s¨²per claro que iba a ser una mejor mam¨¢ en la medida en que fuera una persona m¨¢s satisfecha conmigo