Los que luchan contra el cambio clim¨¢tico (y no son ONG)

La Cumbre de Par¨ªs (2016) se cerr¨® con un tratado hist¨®rico contra el cambio clim¨¢tico. Los 195 pa¨ªses firmantes, casi todos los del mundo, adoptaron una alianza para frenar el calentamiento global originado por el ser humano. Aquellos que lo suscribieron deben reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. La parte crucial para el futuro del planeta.

Paralelamente hay quienes investigan v¨ªas alternativas y apuestan por manipular el clima y el ecosistema con avanzadas tecnolog¨ªas para mitigar sus causas y sus consecuencias.

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El impulso de energ¨ªas limpias debe ser una m¨¢xima para cumplir los objetivos de este acuerdo. Una de las m¨¢s consolidadas en Espa?a es la e¨®lica (segunda fuente de generaci¨®n el¨¦ctrica en 2016, con una producci¨®n de 47.319 gigavatio/hora y una cobertura de la demanda del 19,3%).

A pesar de este dato, Espa?a no cuenta con instalaciones de aerogeneradores en el mar (como s¨ª tienen Reino Unido, B¨¦lgica u Holanda, entre otros). Estos presentan caracter¨ªsticas ventajosas frente a los instalados en tierra: las rachas de viento son mayores y "el impacto paisaj¨ªstico y ac¨²stico es menor. Sin embargo, su evaluaci¨®n y control es m¨¢s complejo y costoso", seg¨²n el Instituto para la Diversificaci¨®n y Ahorro de la Energ¨ªa (IDAE).

El proyecto A-Tempo (Avances en Tecnolog¨ªas Marinas, Producci¨®n Naval y Offshore) impulsado por la Universidad de A Coru?a pretende multiplicar las v¨ªas de negocio en el sector de la ingenier¨ªa naval. Una de sus empresas participantes, Ixion, ha investigado c¨®mo reducir los costes de estos parques e¨®licos marinos con tecnolog¨ªa de ¨²ltima generaci¨®n. ¡°Hemos desarrollado veh¨ªculos y submarinos aut¨®nomos capaces de supervisar las instalaciones y determinar cu¨¢l no funciona con normalidad. De esta manera, la generaci¨®n de energ¨ªa es m¨¢s efectiva y se aprovechan al m¨¢ximo las capacidades de la infraestructura. Tambi¨¦n los utilizamos para detectar fugas de crudo en oleoductos y que el flujo se cierre instant¨¢neamente para reducir su impacto contaminante¡±, aclara Jos¨¦ Carlos Montes, director de Ixion y profesor en el ¨¢rea de Innovaci¨®n del Instituto de Empresa. Con este progreso?se podr¨ªan evitar desastres naturales de gran magnitud. El derrame de petr¨®leo en el agua provoca a?os en el sistema reproductivo y de alimentaci¨®n de los organismos del ecosistema marino.

Otra soluci¨®n frente al impacto paisaj¨ªstico de los molinos de viento la propone la empresa francesa NewWind, creadora de Wind Tree: una turbina e¨®lica que se camufla, gracias a su forma, entre los ¨¢rboles urbanos. Cada hoja, llamada Aerolaf, funciona como un peque?o aerogenerador que, en conjunto con el resto ¡°puede producir electricidad suficiente para proporcionar hasta un 80% de la potencia el¨¦ctrica media de un hogar europeo¡±, tal y como explica la compa?¨ªa. Las Aeroleaf aprovechan la m¨¢s m¨ªnima brisa de viento y son muy resistentes e independientes, es decir, si una deja de funcionar las dem¨¢s no se ven afectadas.

En Espa?a hay varias ciudades que superan las 3.000 horas de sol anuales. Un dato para aprovechar en la generaci¨®n de una energ¨ªa limpia. Los aviones no tripulados pueden ser de gran ayuda para incrementar la eficiencia de los huertos de paneles solares. La empresa espa?ola Consultor¨ªa, Innovaci¨®n Ingenier¨ªa S.L. (Cing) est¨¢ desarrollando esta innovaci¨®n. "Utilizamos un multic¨®ptero [un tipo de dron con varias h¨¦lices] con una c¨¢mara termogr¨¢fica radiom¨¦trica que mide la temperatura de cada celda fotovoltaica y es capaz de detectar si hay alguna defectuosa. As¨ª puedes ir in situ a solucionar el problema ahorrando en tiempo y dinero", explican desde su departamento de comunicaci¨®n.

Las abejas y los pesticidas

Seg¨²n un informe de la organizaci¨®n Greenpeace "la p¨¦rdida de h¨¢bitats, la agricultura industrializada, el uso de plaguicidas y el impacto del cambio clim¨¢tico est¨¢n amenazando la existencia de las abejas". Insectos responsables de la polinizaci¨®n de cerca del 70% de las plantas a nivel mundial. Por ello, investigadores japoneses del Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnolog¨ªa Industrial (AIST) han desarrollado unos peque?os drones capaces de polinizar las flores. Eijiro Miyako, uno de sus expertos en nanomateriales, explica que "los aviones no tripulados est¨¢n cubiertos con el pelo de este insecto y ba?ados con un gel pegajoso, el cual, permite atrapar el polen al posarse sobre una flor y posteriormente liberarlo sobre otra". "Todav¨ªa tenemos que controlarlos. Con la mejora de sistemas GPS y el desarrollo de c¨¢maras de alta resoluci¨®n, creemos que podr¨¢n ser aut¨®nomos en el futuro", asegura.

Para que estas abejas robotizadas no se plantearan como una soluci¨®n en el futuro, debemos, entre otras cosas, reducir el uso de herbicidas y pesticidas (nocivos tambi¨¦n para la calidad del agua). En este ¨¢mbito se impuls¨® el proyecto europeo RHEA, en el cual, trabajaron de la mano el Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas de Espa?a (CSIC) y la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid. Uno de sus responsables, el profesor Constantino Valero, cuenta que consisti¨® en robotizar tres tractores y coordinarlos con drones. "Los veh¨ªculos a¨¦reos sobrevolaban los campos de cultivo, detectaban las zonas de malas hierbas y realizaban un mapa. Despu¨¦s, los tractores acud¨ªan de forma aut¨®noma a eliminarlas", clarifica. Una innovaci¨®n que lograba ahorrar un 75% la utilizaci¨®n de productos qu¨ªmicos.

El proyecto no se lleg¨® a comercializar pero a ra¨ªz del mismo, empresas como Case IH y New Holland han presentado prototipos de tractores robotizados este a?o.

'Siembra' de nubes

El cambio clim¨¢tico se expresa en todos los par¨¢metros: desde el calentamiento global, la subida de nivel de los oc¨¦anos, hasta sequ¨ªas e inundaciones. Para dar soluci¨®n a estos problemas un equipo de investigadores de la Desert Research Institute (DRI) est¨¢ llevando a cabo unas pruebas en el desierto de Nevada (EE UU). Utilizando aeronaves no tripuladas pretenden depositar determinados elementos en las nubes para provocar o evitar la lluvia.

Por el momento, enfocados en el primero de los supuestos, se ha utilizado a un dron bajo el nombre de Savant. Mide tres metros, pesa 25 kilogramos y es capaz de volar hacia las nubes y depositar yoduro de plata que, al tener una estructura cristalina muy parecida a la del hielo, act¨²a de n¨²cleo de condensaci¨®n.

En la actualidad la 'siembra' de nubes puede realizarse disparando ca?ones o cohetes desde tierra y con aviones convencionales. La efectividad de este procedimiento contin¨²a en duda, aunque la Organizaci¨®n Mundial Meteorol¨®gica afirma que "se han realizado varios experimentos de ¨¦xito, especialmente en regiones monta?osas". El DRI considera que la utilizaci¨®n de drones optimiza el proceso y reduce en gran medida su coste.

Vigilar el impacto del cambio clim¨¢tico

Sara Pizzinato, experta en soluciones contra el cambio clim¨¢tico de Greenpeace, no se posiciona a favor de soluciones "m¨¢s espectaculares que otra cosa". S¨ª lo hace en relaci¨®n con los avances tecnol¨®gicos y digitales dedicados a ampliar nuestro conocimiento sobre la Tierra, su estado y evoluci¨®n. Un ejemplo de estas innovaciones es el proyecto de la Universidad Laval (Quebec, Canad¨¢) para detectar los efectos del cambio clim¨¢tico en el oc¨¦ano ?rtico: el dron Argo. Jos¨¦ Luis Lagunas, ingeniero de investigaciones en el laboratorio Tavukik (creado en enero de 2011 a trav¨¦s de una asociaci¨®n entre la instituci¨®n acad¨¦mica y el Centro Nacional de Investigaci¨®n Cient¨ªfica canadiense) explica que este dispositivo puede sumergirse hasta los 2.000 metros, midiendo las variables de temperatura y salinidad asociadas a la presi¨®n. "De esta forma, se mejora el monitoreo y la predicci¨®n de fen¨®menos como la p¨¦rdida de la capa de hielo en verano y la invasi¨®n de especies marinas provenientes del sur", afirma.

La OMM y la Unesco lanzaron el programa Argo con la voluntad de formar una red mundial de plataformas flotantes y drones submarinos para la observaci¨®n de los oc¨¦anos. Sin embargo, las condiciones tan adversas del ?rtico imped¨ªan la presencia de estos dispositivos. En la actualidad, gracias a esta innovaci¨®n es posible ampliar nuestro conocimiento de una zona que es centinela del cambio clim¨¢tico. "El dron submarino posee un detector de hielo por l¨¢ser que le alerta de la presencia de placas congeladas en la superficie y as¨ª rehuirlas. Se evitan posibles da?os a la hora de emerger despu¨¦s de su ciclo de recolecci¨®n de datos", subraya Lagunas. Cualquier deterioro podr¨ªa resultar muy caro de reparar teniendo en cuenta que cada unidad cuesta m¨¢s de 80.000 euros.