El esperma donado no influir¨¢ en la salud mental de tu hijo
Un reciente estudio descarta diferencias en el bienestar psicosocial entre los ni?os concebidos mediante semen an¨®nimo y la poblaci¨®n general
Cuando una pareja o una mujer sola acude a la inseminaci¨®n artificial con donante de semen an¨®nimo para concebir un hijo, las preguntas sin respuesta quedan en el aire. ?El ni?o nacer¨¢ sano? ?Se desarrollar¨¢ bien?
A pesar de los rigurosos ex¨¢menes cl¨ªnicos que por ley se somete al donante y su material gen¨¦tico, tanto caracter¨ªsticas fenot¨ªpicas como psicol¨®gicas, siempre existe el miedo a que alg¨²n problema de salud no detectado se desarrolle en el futuro.
Seg¨²n un reciente estudio publicado en la revista Reproductive Biomedicine Online, esta preocupaci¨®n podr¨ªa no ser tan importante. Los investigadores australianos del Murdoch Children's Research Institute consideran que la salud f¨ªsica, psicol¨®gica y mental de los ni?os concebidos mediante esperma donado es similar a cualquier otro ni?o.
"Para los futuros padres, la decisi¨®n de usar esperma de donante puede parecer un paso hacia lo desconocido. Nuestros resultados deben proporcionar la tranquilidad de que la salud f¨ªsica, psicol¨®gica y mental de los ni?os concebidos con esperma de donantes es similar a la de los ni?os en la poblaci¨®n general", ha explicado en un comunicado el coordinador del estudio, David John Amor. En la investigaci¨®n se analiz¨® la salud de 244 ni?os en edad escolar, entre cinco y 11 a?os, concebidos gracias a la donaci¨®n. Para obtener los resultados se pidi¨® a las madres de estos ni?os que rellenaran cuestionarios sobre aspectos psicosociales, de salud mental y desarrollo.
Aumento de los beb¨¦s de padre an¨®nimo
La investigaci¨®n surgi¨® ante el repunte de nacimientos de beb¨¦s fecundados con semen donado en la regi¨®n de Victoria, Australia. Entre 2010 y 2015 se dio un aumento hasta el doble de estos casos, donde el 50% correspond¨ªa a familias monoparentales, formadas por una mujer sola, y un 35% de parejas de mujeres. El estudio pretend¨ªa determinar si los hijos de padre an¨®nimo podr¨ªan desarrollar alg¨²n tipo de problema psicosocial en un futuro e incluso se revis¨® si exist¨ªa alguna diferencia entre el estado general de salud de los ni?os que viv¨ªan en familias formadas por padres del mismo sexo respecto a familias de progenitores heterosexuales. En ambos casos, el resultado fue negativo. Eran ni?os igual de sanos que los dem¨¢s.
En el aspecto de la salud y el bienestar se analizaron, entre otros puntos, las posibles limitaciones sociales derivadas de problemas emocionales o de comportamiento. Las subescalas del cuestionario orientadas a la salud mental analizaban s¨ªntomas emocionales, problemas de conducta, hiperactividad, dificultades para relacionarse con los compa?eros y conducta prosocial (comportamientos social positivo). Tambi¨¦n se analiz¨® la incidencia de posibles Trastornos de Espectro Austista (TEA), porque a pesar de tener origen gen¨¦tico no existe todav¨ªa un diagn¨®stico prenatal y mucho menos a trav¨¦s del an¨¢lisis del donante. Tampoco aparecieron m¨¢s casos entre los ni?os concebidos mediante esperma donado.
En todos y cada uno de los aspectos analizados en este estudio los resultados fueron los mismos: no se observan diferencias respecto al resto de la poblaci¨®n. Incluso algunos de los resultados eran favorables a los ni?os concebidos con semen donado. Seg¨²n el Cuestionario de Salud Infantil aplicado, estos peque?os ten¨ªan un promedio m¨¢s alto en las percepciones de salud general, autoestima y salud mental respecto a la poblaci¨®n general australiana.
Sin embargo, los investigadores advierten que su estudio presenta tres limitaciones importantes a tener en cuenta. Por una parte, se compara a estos ni?os con la media de la poblaci¨®n australiana, pero no se aplic¨® un grupo de control espec¨ªfico dentro de la investigaci¨®n, y por lo tanto excluye el ajuste para posibles factores de confusi¨®n. En segundo lugar, al tratarse de un estudio mediante encuesta puede darse cierto sesgo por parte de las madres o incluso puede que las madres de ni?os con menos problemas de salud o desarrollo hayan querido participar m¨¢s que las madres de ni?os con estos problemas. Y por ¨²ltimo, no se trata de resultados objetivos, cl¨ªnicamente obtenidos y contrastados, sino que dependen siempre del informe de la madre.
Por eso, aunque el estudio abre la puerta a la necesidad de nuevas investigaciones con muestras m¨¢s amplias, grupos de control y an¨¢lisis m¨¦dicos, sus conclusiones son optimistas y consideran que la carga gen¨¦tica donada no tiene por qu¨¦ afectar negativamente al desarrollo psicosocial del ni?o.
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