La ciudadan¨ªa creativa y digital del Parque Morelos

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?Los que se quejan de la gentrificaci¨®n son los mismos que la causaron?

La maestra Paula es vecina a una cuadra del parque Morelos al que acaban de talar 200 ¨¢rboles. En su casa de una planta, con un amplio patio y una cochera, es donde un grupo de vecinas se re¨²nen una vez a la semana para organizar la resistencia al proyecto de Ciudad Creativa Digital* a lo impuesto y a los enga?os. Tambi¨¦n se encuentran un grupo de j¨®venes para entrenar por las tardes artes marciales y box. Una de las pr¨®ximas edificaciones a construir de 8 pisos va en el terreno de al lado. Ya han cortado las tomas de agua. Nunca m¨¢s tendr¨¢ luz para su patio ni agua. Le robaron una propuesta de proyecto de rob¨®tica para la escuela del barrio, se la llevaron a otro lugar. Mientras tanto, la escuela local se est¨¢ habilitando para ni?os superdotados, poniendo en duda el acceso a ella para todos los ni?os del barrio.

El propietario Gumersindo es hijo de la se?ora Rosario y administra las propiedades acumuladas por la familia durante a?os en el barrio. Renta departamentos y resiste las presiones de compradores con ofertas irrisorias, muchas de ellas en un corredor donde se proyecta conectar el parque con la iglesia del Rosario. Este lugar m¨¢s conocido como el del padre Galv¨¢n, donde al pasear uno se imagina por la amplitud en una rambla como de un pueblo en fiesta de verano, con vecinos y charla en la calle. Seg¨²n un estudio de INEGI, la marginaci¨®n es baja. Seg¨²n el estudio de desarrollo urbano integral sustentable, DUIS, sobre el que se soporta la propuesta urbana de CCD, es una zona muy degradada. Seg¨²n nuestra inspecci¨®n visual, no est¨¢ nada mal.

Manuel es empresario, un joven gallego con 13 a?os en M¨¦xico. Es uno de los socios de una cantina camino de los 114 a?os que apuesta por la tradici¨®n. Todo el barrio le saluda y ofrece trabajo a la gente que ah¨ª vive cuando puede. Quiere seguir apostando por ello y habilitar la techumbre de la propiedad de una altura con una terraza con capacidad para m¨¢s de 100 personas y vistas sobre el Gimnasio Morelos y la Catedral.

Javier es desarrollador inmobiliario, un oficio duro, pues parte del trabajo es expulsar a personas de sus viviendas para despu¨¦s rehabilitarlas y m¨¢s tarde venderlas o alquilarlas a un precio mucho mayor. Es el mecanismo por el que unos vecinos salen y otros vecinos entran en la ciudad. Pero Javier sabe que esto no tiene por qu¨¦ ser siempre as¨ª. Se puede rehabilitar un edificio sin comprar la propiedad del vecino, sacar un lucro equilibrado, trabajar con los vecinos del barrio e innovar socialmente y tecnol¨®gicamente desde otra posici¨®n financiera y econ¨®mica. Un modelo de inversi¨®n y financiaci¨®n urbana no excluyente y distribuido. Un modelo que incluye lo existente y lo a¨²n inexistente.

Javier est¨¢ prototipando junto a Paula, Gumersindo y Manuel un proyecto para financiar, dise?ar, construir, mantener y gestionar edificios que, respetando lo existente, lo genuino, desde el patrimonio, incluyan la multiplicidad de actores de este lugar. Con esta intenci¨®n viene a encontrar apoyos para construir una propuesta que a¨²n no conoce en ninguna de las ciudades donde trabaja y que tampoco tiene Ciudad Creativa Digital.

Susana es programadora experta en viralizaci¨®n de contenido y trabaja en Wordpress. Es una mujer supercreativa y digital. ?lite de su sector. Trabajaba en las oficinas de San Francisco (EEUU) y ahora es vecina del barrio de El retiro (Ciudad Creativa y Digital). No necesita oficina para trabajar, tampoco muchos de sus compa?eros de otras empresas que se re¨²nen en un bar cercano los jueves. Se distribuyen en la ciudad pues el trabajo y la vivienda han cambiado. Su empresa Wordpress tampoco necesita un edificio para sus 550 empleados. Ni en CCD ni en San Francisco.

Es un proceso centrado en las personas, en el que todas aportan desde los intereses diversos

La clase creativa y digital del parque Morelos no sale en los libros de Richard Florida. Pero resulta ser la ciudadan¨ªa creativa de la que habla hoy el autor. En la actualidad se imprimen simult¨¢neamente la celebraci¨®n del libro The Rise of the creative Class , dentro de la saga de ciudades creativas, y la negaci¨®n de las mismas tesis en el libro The new urban Crisis del mismo autor.

En el primer libro, Florida nos dice que la decisi¨®n importante es ?D¨®nde vivimos? En el segundo, nos habla de la desigualdad, la inequidad y la gentrificaci¨®n de los procesos generados por el primer libro. 15 a?os bastan para ver algunas consecuencias. Pero ni la idea de una ciudadan¨ªa creativa es criticable de por s¨ª, ni tampoco ahora se arreglar¨¢n de pronto los problemas que generan la acumulaci¨®n de capital en las ciudades. A estas alturas, ya nos hemos damos cuenta de que no se trata solamente de ?d¨®nde vivimos? sino de ?c¨®mo vivimos en el lugar en el que estamos?

Pensemos varias cosas. Parece muy positivo que un nuevo polo de desarrollo econ¨®mico decida revitalizar una zona de la ciudad antes que expandirse y desarrollar en la periferia m¨¢s autopistas, urbanizaciones y consumo del territorio. Por otro lado, parece que la cantidad de edificios antiguos y en condiciones precarias del centro podr¨ªan rehabilitarse y adecentarse antes de que caigan por su propio peso o por la dejadez administrativa. Tambi¨¦n parece necesario no dejar un lugar abandonado a su suerte para que la degradaci¨®n lo haga impenetrable y entonces entre el capital con sus retroexcavadoras.

Por lo tanto, no existir¨¢ una Ciudad Creativa y Digital sin un trabajo sobre lo existente que no abarate los suelos para m¨¢s tarde encarecer las rentas. No existir¨¢ tampoco ning¨²n progreso tecnol¨®gico que no se base en la innovaci¨®n ciudadana local y situada. Un proceso donde se tomen acuerdos en un desarrollo resiliente y eco-social. Un espacio de producci¨®n urbana basado en la transparencia, el c¨®digo abierto y la cooperaci¨®n entre agentes diversos. Luego la cuesti¨®n es entender ?C¨®mo generamos un proceso de adaptaci¨®n urbana abierto e inclusivo? y finalmente ?C¨®mo dise?amos est¨¢ transformaci¨®n desde m¨²ltiples formas, capitales y econom¨ªas?

Partimos de que las planificaciones a gran escala y largo plazo no funcionan por s¨ª mismas y propician la exclusi¨®n de las personas y sus capitales de los territorios. Tambi¨¦n que la financiaci¨®n del urbanismo ciudadano, que es una herramienta innovadora, no permite un alcance extensivo. En el laboratorio de innovaci¨®n urbana y ciudadana CCDLab se trabaja para arrojar evidencias para abordar de otra manera el desarrollo y adaptaci¨®n de las ciudades.

Es un proceso centrado en las personas, en el que todas aportan (sus habilidades y competencias desplegadas en proyectos sobre territorios concretos) desde lo que les mueve (sus vocaciones), desde lo que les afecta (lo que impacta) y desde los intereses diversos. De esta forma poder habitar el conflicto desde la pr¨¢ctica, generando proyectos con quienes dif¨ªcilmente se dar¨ªa la posibilidad de juntarse a cooperar juntos. Si la innovaci¨®n ciudadana pasa por generar soluciones desde los afectados, y no para ellos, tendr¨¢n que ecualizarse los intereses e impactos mutuos y rec¨ªprocos de ¡°nuestra¡± clase creativa y digital en toda su diversidad. En el Parque Morelos, y en tantos barrios, distritos y ciudades que se encuentran en momentos delicados y vitales para la ciudadan¨ªa.

(*) CCDLab Durante estos meses, estamos desarrollando un Laboratorio de Innovaci¨®n Urbana y Ciudadana en la ciudad de Guadalajara, Jalisco. Es un proyecto impulsado por la Asociaci¨®n Civil Ciudad Creativa Digital, y facilitado por VIC. Un proceso Opensource, abierto y compartido con licencia CC 4.0. Internacional, CC BY 4.0. En 2011, en plena efervescencia de los primeros libros de Florida, nace en Guadalajara un proyecto para revitalizar parte del centro hist¨®rico de la ciudad: Ciudad Creativa Digital. Esta comprende los barrios o pol¨ªgonos del Parque Morelos, El retiro, El refugio, La perla y los barrios aleda?os. En 2011 se presenta un masterplan para remodelar esta parte de la ciudad por parte de Carlos Ratti del MIT de Massachusets, y hacer de Guadalajara una ciudad creativa y digital. M¨¢s info en circuitos.red/ccdlab y viveroiniciativasciudadanas.net.